Another: Lo promesa, Un Nuevo Comienzo

¿así me lo pagas?

Misaki:

Había llegado el momento de hablar con Naoya al respecto... "teshigawara yo... amo a sakakibara y es algo que no puedo controlar o cambiar..." lo haría... ¿era la decisión correcta? Sakakibara había tenido mucho a su favor... me había demostrado de muchas maneras cuanto me quería... quería estar convencida que de esto no me arrepentiría.

Amor, te estoy esperando ¿Dónde estás?

El mensaje de Naoya me había caído como un balde de agua fría. Quería decirle que no estaba lista para la boda, que necesitaba tan solo un poco de tiempo para pensarlo, tiempo que tomaría con sakakibara... convencerme de su amor, de todo lo que podría ofrecerme.

Naoya no puedo. Lo siento.

Apagué el celular y me encerré en la camioneta de sakakibara a pensar. Busqué mucho entre sus cosas, hallé CD's viejos de la buena música, una carpeta llena de trabajos de la universidad, y un pequeño libro... su titulo era "futuro" la primera pagina era una foto mía del anuario, mi sonrisa más sincera la había tenido en esa foto, fue la vez en la que sakakibara subió hasta el tejado de la escuela... las lagrimas cubrían su rostro después de una absurda pelea que tuvimos. Esa tarde me abrazó con fuerza y me dijo cuanto le dolía mi indiferencia, lo mucho que extrañaba estar a mi lado... esa tarde lo perdoné, la amistad volvió a tomar vida y mi alegría interior era algo indescriptible... nada me hacía más feliz en ese entonces que su compañía...

La siguiente pagina estaba llena de fotos mías que no sabían que existían, sentada bajo ese árbol... en la azotea... en el salón de clases, muchas de ellas eran fotos desprevenidas, menos una, una en la que me encontraba mirando directamente la cámara soltando una enorme carcajada... esa foto era especial... debajo de cada foto estaba l fecha... 18 de junio... día de la graduación, era la inscripción que tenía esa bella foto... el día en que mi mundo de vino al piso... en el que estaba tan decidida a morir... sakakibara me había escrito un poema hacía apenas un mes antes de ese día... era tan bello aquel poema... él nunca supo cuando me di cuenta que lo escribió, lo tome inconscientemente de su maleta para al final notar la pequeña inscripción que tenía mi nombre " para mi doncella misaki mei" creí que en cualquier momento me confesaría sus sentimientos, mi mundo se llenaba de alegría... algo realmente indescriptible...

Aun recuerdo lo que pasó esa tarde, era el último día de clases, Izumi había muerto el día anterior... las cosas en el colegio y con sakakibara no andaban bien, quise confesarle mis sentimientos a sakakibara, había practicado toda la coche mis absurdas palabras... "se que no es lo más adecuado, que siempre eh sido tan distante y fría... pero esto es algo que ya no puedo mantener oculto... te amo sakakibara-kun, te amo demasiado..." llena de nervios me acerqué a el en la biblioteca, se veía con su fría expresión sentado en aquella mesa leyendo, hasta que entró Naoya... "ya supéralo viejo, encontrarás mejores chicas, ¡ya verás!" Su fría expresión solo simbolizaba el odio puro... "¡ERA EL AMOR DE MI VIDA!" gritó... las lagrimas salían sin parar de mis ojos, mi mirada encontró la de Naoya, cuando eché a correr a la azotea... es todo... era una mentira, sakakibara había estado jugando conmigo y con mis sentimientos... había afectado de sobremanera mi autoestima, mis sentimientos, mis sueños...

Bajo aquella foto pude notar un pedazo de papel arrugado con aroma a aquella fragancia "the one" que yo solía usar, su contenido no era más que las palabras que había ensayado esa noche... esta tenía una respuesta bajo mi nota con la letra de sakakibara. "yo también te amo Misaki, por favor, no te vayas" la fecha de la inscripción era el mismo 18 de junio... el me lo dijo... mis sentimientos habían sido extrañamente correspondidos...

-te debo una disculpa mei... -una voz interrumpe mis pensamientos y me doy cuenta que estoy frente a la casa de sakakibara. Este abre el auto y se sienta a mi lado con lágrimas en los ojos. Su mirada cargada de dolor penetraba en mi alma y no me dejaba más alternativa que la compasión.

-Naoya lo dejó todo y Salió de la biblioteca gritando tu nombre. Mei... te vi irte... vi como corrías desesperada y sin rumbo por todo el lugar, no sabía que pensar en ese momento, la perdida de Izumi... te juro que no sabía cómo reaccionar, después de todo tenía el titulo de mi novia. Recuerdo que dejaste caer un papel al piso al marcharte, tropecé con él en el intento en seguirte, cuando leí su contenido no sabía cómo reaccionar... Mei... era lo único que necesitaba oír en ese momento, salí a la azotea pero no estabas allí, creí que te irías y dejé esa carta en tu casillero, pero fue tarde, te habías marchado en el último día de clases, guardé esta carta hasta ahora... nunca dije nada al respecto, pero... dios mei... moría por tenerte. Fui hasta tu casa, no estabas, decidí que lo mejor era dejarte en paz, no había rastro de ti y por un momento temí que me odiaras, no era consciente de que me escuchabas cuando dije lo que dije, lo hice por impulso... No lo sentía, no la amaba, te amaba a ti... sigo amándote como loco, no existe nada en esta tierra que cambie ese sentimiento. –dice sakakibara entre lagrimas.

Su tímida y tierna expresión hacia que simplemente mi corazón se encogiera y se llenara de amor. –Koichi-kun... lo siento mucho... -digo al final.

-todo está perdonado. Sabía sobre el error que cometía al dejarte sola, quería convencerme que en estos dos años te darías cuenta que no podemos vivir el uno sin el otro, me di cuenta de que no era así, las cosas no son tan sencillas, dios... ¡vas a casarte en dos semanas! Estoy muriendo lentamente... lamento todo, lo juro... creí que nunca tendría una oportunidad con la chica más fría e inexpresiva del planeta... cuando en realidad ella moría por mi... te aseguro mei que extraño a esa chica de la secundaría la cual se sonrojaba con mi mirada, huía de sus sentimientos y moría de amor por mí. Ojalá pudieras... volverte a enamorar de mí. –sus lagrimas se intensifican y no sé cómo responder a su petición...

-sakakibara-kun yo... estoy enamora de ti... -dicho eso me saqué el cinturón de seguridad y lo besé en los labios. La primera vez que besaba a alguien por mi cuenta...

Puso una cara de sorpresa enorme, me miraba como si no pudiera creer que lo había besado. Era la verdad, me tenía loca, celosa, muchas veces enojada, alegre... viva...

-dios sakakibara... yo te amo... -por fin lo había dicho... sin más temores, sin más sufrimiento... solo amor.

Sakakibara lleno de sorpresa tapó su rostro con las manos durante unos segundos hasta que me miró nuevamente con deseo. Me tomó en brazos y me llevó hacia su asiento y me puso encima de él. –cuatro años... esperé cuatro años para volver a escuchar esas palabras... -luego de eso me besó... ¡lo hizo tan apasionadamente! No podía negarme... abracé fuertemente a sakakibara mientras el profundizaba el beso. Entonces recordé... esa tarde en la escuela cuando probé su comida por primera vez... ese día estaba tan nerviosa... miré a sakakibara a los ojos y no pude evitar sentir ganas de besarlo, si esos labios sabían tan bien como ese takoyaki...

-porque... ¿Por qué tu diario dice futuro y está mi foto en él? –pregunto pegada a su pecho.

-porque tú eres mi futuro... no quiero imaginar a otra mujer a mi lado por toda mi vida. Solo tú.

Me sonrojé inmediatamente. –abrí mi bolso y saqué una pequeña fotografía que conservaba de él.

-la tengo desde hace tres años... sabes? Ah sido mi saco de lágrimas, lloro cada vez que la veo, lloré cuando pasó lo de izumi y la guardé, algún día mis hijos se darían cuenta de tu existencia...

-y como no se van a dar cuenta misaki... de la existencia de su padre... -dice antes de besarme apasionadamente.

-¡USTEDES DOS! ¡FUERA DEL AUTO! ¡¡¡AHORAAAA!!! –gritó una voz detrás de mí.

Naoya...