Esta historia trata de un pequeño grupo de adolescentes que pocos días antes de halloween se empezaron a interesar por lo paranormal y sin pensarlo comenzaron a jugar con este tema. Pocos días después decidieron ir a un pueblo abandonado a 10Km de...
Estaba durmiendo despreocupada mente cuando de repente comenzaron a llamar a la puerta. Yo no abrí la puerta porque pensaba que se cansarían pero lo que no sabía es que el no abrirle la puerta seria peor. Esa persona evolucionó con unas alas gigantes de murciélagos. Se asomó a mi ventana. Era bastante grande así que(la ventana) se le podía ver todo el cuerpo y las alas. De un momento para otro se comenzaron a oír ruidos por el techo. Yo comencé a asustarme. Así que lo que hice fue darle los 5$ del vodka lila. Esa persona no lo aceptó y en venganza propia comenzaron a entrar por la puerta, romper cosas, robar objetos... Al principio sentía ira, pero después comencé a pasar un poco de eso. Me fui a la cocina a por un poco de agua. Cogí un vaso mientras una de esas personas me miraba. Llene el vaso de agua, y al acercármelo a la boca esa persona me lo tira. Cogí otro vaso e ice lo mismo, y como no la persona también lo tiró al suelo. Y así con 3 vasos mas. En ese momento cogí un vaso, y esta vez no lo llené de agua, si no que lo rompí y con un cristal roto le corte en la cara. Yo tranquilamente, comencé a beber mientras veía como se retorcía. Cuando me terminé el agua le dí una patada y me volví a la cama. Cuando ellos vieron que yo no hacia nada se fueron. Me dejaron la casa destrozada. Por suerte tenia el dinero suficiente para una casa nueva, esta casa no aguantaba mucho mas en pie. Me dolía abandonarla pero es lo que tenia que hacer. Cogí mi ropa tirada en el suelo, los zapatos tirados por la casa, mis cosas y las puse en mi maleta. Cogí mis peluches, mi pc y mi móvil(con los cargadores) y mis cosas de aseo, las metí en una mochila pequeña y por un tiempo me quedaría en la casa de Yuko o Mitsu. Ví el disfraz en el suelo y me sentó muy mal. Vete a saber cuanto les costó a esas chicas eso. Eran las 11:11pm. Me fui a acostar a mi cama medio destrozada, se estaba incomodo. Daba vueltas hacia un lado, hacia el otro, y nada, seguía sin poder dormir.
Me fuí a la cocina para coger un vaso de leche pero se llevaron todo lo de la nevera menos la comida de gato. Suponía que al yo ser medio gato no me haría efectos. Solo noté varios cambios:
1- Los colmillos mas afilados.
2- El pelo mas fino.
3- Orejas de gato en la cabeza.
4- Cara mas fina y delicada.
5-Me gustaban los juguetes de gatos.
6- Cada 4 horas necesitaba una lata de gatos.
7- Los maullidos me salían mas finos.
Al principio no le dí importancia, y luego tampoco. Yo estaba encantada por ser así. Pero el problema era la vuelta a clases. Eran las 4:19am, seguí intentando dormir. Al final opté por coger mis cascos y poner a escuchar rap. Quería olvidar todo lo malo que no me dejaban caminar bien. Cogí alcohol y mis cascos. Escapé de mi realidad pero por 1 hora. Cuando se terminó seguí bebiendo y con mas música, así me quedé dormida. Otra solución para escapar de estos incordio de problemas. Se sentía tan bien. No quería volver a la realidad. En el otro mundo tenia a la persona que yo misma sabía que no iba a ser nunca mía. Me quedé dormida hasta las 7:52pm, me desperté gracias a mi oído. Me levanté y con silencio comencé a observar que era. Eran unos niños de 13 años. Cogí mi vestido blanco y me lo puse en silencio. Me puse mi peluca negra y fui a asustar a esos niños. Cuando se fueron seguí durmiendo, y así dormí durante 4 horas mas.
Cogí mi pc y me puse a ver casas de mi pueblo modernas y grandes. La mejor casa de todas era de 9.560$. Así que la compre. Venia con muebles y todo. Estaba feliz, pero esa casa tenia algo que me inquietaba. Al principio no le dí mucha importancia pero lo que no sabia es que el día de halloween esta casa es diferente a las otras. Hay una puerta donde por nada en el mundo hay que abrir. Una vez la abres ya le puedes decir adiós a tu vida.
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Yo al llegar allí lo coloque todo, la ropa en su lado. La nevera con al menos 35 latas de comida. El baño con sus cosas. Abrí el congelador para activarlo y ahí dentro habían dos cuerpos. Uno de un chico. Abrí la bolsa para verle la cara y no me lo podía creer. Era Hichiko. Creía que solo era un ser de mi imaginación, y al lado de Hichiko había uno que parecía de un bebé de 3 meses. El bebe comenzó a llorar. Yo sin creérmelo vi que el bebé estaba vivo. Lo cogí en brazos. Era realmente tierno. Lo balancee en mis brazos durante 30 segundos, y el bebé paró de llorar. Me fui a una habitación, la que tenia un estilo mas infantil. Ese lugar estaba realmente bonito. Peró había una cosa que me incomodaba. Era una muñeca grande de porcelana blanca como la nieve. Dejé al niño en la cuna y le canté la nana de futaba. Me encantaba de pequeña, y ahora ese niño era como mio. Aunque no era mio del todo. Era como mi hijo. Se quedó dormido enseguida. Le miraba mientras el dormía, era realmente kawaii. Le encendí la luz de noche para espantar a los monstruos. Aunque no era mio, si le pasaba algo no me lo iba a perdonar. Tambien puse algo de incienso para aullentar malos espíritus y un atrapa sueños encima de la cuna. Ese niño era lo mas importante de mi vida. Ahora entendía como se sentía mi madre al perder a mi padre. Esperaba que ese niño creciera sana y fuerte. Me fui a la cama para intentar dormir. Al final pude dormir tranquilamente cuando a mitad sueño reparador comencé a oír al niño llorar...
