1/1

678 103 70
                                    

🍦


- ¡Im Jaebum!

- Mmm ¿sí?, ¿sí?, diga - respondió aquel joven despertando de su ensoñación y siendo así la atención de toda la clase.

- ¿Puede usted decirme cuál es la respuesta del problema? 

- No sé ¿un ocho quizá?

- No, incorrecto...cómo siempre. - le dijo su maestro haciendo reír a toda la clase y avergonzando al joven aunque claro, este ya estaba más que acostumbrado a ese tipo de situaciones, gracias al destino y a la preciada campana aquel bochornoso momento termino.

- Tu comportamiento no hace más que hacerme quedar en vergüenza- le comentó su mejor amigo, Mark.

- Oh vamos, sé que te gusta - y era así, Mark había disfrutado de cada uno de los momentos vergonzosos de Jaebum, desde el primer momento en el que se dirigieron palabras supieron que aquella amistad duraría para siempre y hasta el momento, así era.

Por fin las clases del día habían terminado y con ellas todo su martirio, parándose de su taburete se dispuso a llamar su mejor amigo para después dirigirse a la salida, pero deteniéndose al notar la presencia de su peor pesadilla quién cómo ya se sabe llevaba nombre y apellido "Choi Youngjae", ese chico le hacia la vida imposible, cuando entro a la universidad pensó que sería una experiencia tranquila y relajante, siempre quiso pasar desapercibido por sus compañeros exceptuando a Mark claro pero con lo que no contaba era que repentinamente se vería acosado por un joven de alocada y peculiar risa. 

- Hola Jaebum - le saludo este de manera tímida pero cómo siempre con una sonrisa en la cara, lo que más odiaba Jaebum, ugh   ¿qué es lo que lo hacía tan feliz? parecía un demente, siempre trato de alejarse de ese tipo de personas pero el destino no había hecho más que jugar en su contra. 

- Hey Youngjae! - Mark siempre solía llevarse bien con todos y a pesar de que Jaebum le advirtió diciendo que dejaría de ser su amigo sí mantenía contacto con el chico, este...lo ignoró.- ¿qué haces por aquí pensé qué estabas en clase de canto? 

- Pues sí - le respondía más alegre.- es que tenía un encargo de mamá para Jaebum.

-  No lo quiero - ya tenía suficiente con aceptar su sola existencia cómo para que ahora debía de aceptar "recargos de su queridísima madre"

- Pero Jae...

- Para ya Youngjae, estoy harto de ti y de tus estúpidos sentimientos, no me gustas, eres inatractivo para mí y ni que decir de tu molesta personalidad, aléjate Youngjae, tú y toda tu basura. - finalizó Jaebum para tomar entre sus manos aquellos alimentos preparados que solía traerle Youngjae porque "Estás en el equipo de fútbol Jae y necesitas fuerzas, eres el capitán" simplemente no lo soportaba. 

-  ¡Jaebum! - escucho el grito de Mark atrás suyo. - ¿estás imbécil o qué? me he tenido que disculpar con el pobre Youngjae por la estupidez que has cometido, ¿sabes cuántas personas quisieran recibir todo el cariño que él te da?, definitivamente siempre estás avergonzándome.

 - Vamos Mark...espera ¿adonde vas? - genial, su amigo lo había dejado sólo en aquel lugar, Choi Youngjae no hacía más que traer desgracias a su vida y sí lo que quería era que tuviera un sentimiento hacía él pues lo había conseguido, lo odiaba.  


Al pasar los días Jaebum notó un cambio en su vida, él primero de que Mark lo ignoraba terriblemente, él pensó que aquella pelea no pasaría a más de dos días pero ya iba por la segunda semana en que este no le dirigía palabra, ni el saludo! y ni que decir de Youngjae quién al igual que Mark se había dedicado a ignorarlo olímpicamente, la furia incontenible de la que se llenó al enterarse de que su mejor amigo había decidido entablar una amistad con el otro, se supone que él era el afectado, el debía de ponerse en ese plan, todo era terrible, así que decidiendo tomar cartas en el asunto pensó en cómo reclamar aquella amistad que por derecho le pertenecía, no dejaría ir a su media papaya,estaba dicho.

ERROR // 2JAEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora