Camilo
La había besado nuevamente.
Otra vez había estropeado todo, ¿Por qué era tan impulsivo? Claro,es que sus labios rosados eran tan provocativos...
Se me escapó de los brazos y entró a la cocina como si nada,dejandome inmovil en el lugar,retomando como había metido la pata bien en el fondo.
-Disculpenme,pero se está haciendo tarde. Creo que debo dejarlos por hoy...-Dije entrando en la cocina,agarrando mi chaqueta.
-Oh,por favor. Quedate un rato más,apenas tocaste tu pizza.-Dijo George,con cara apenada. Viejo,me voy porque en cualquier momento me tiro a tu hija en esta misma mesa.
-No,en serio. Se está haciendo tarde. Ya sabes como está de jodida la zona hoy en día...-Dije mirando para otro lado que no sea a Jaz. Escuché como ella bufó; se había dado cuenta de mi mentira del año.
-Oh,si. Es mejor que te vayas,la calle está tan fea de noche.....-Dijo Jaz sarcastica,pero su padre y su hermano no se dierón cuenta. Mierda,quiero quedarme contigo, maldita sea.
-Tienes razón. Te acompañaré a la puerta-Dijo George algo desilucionado. ¿Este viejo cree que estoy aquí por él? Pz,patán sin vida social.
-Nos vemos pronto,bro.-Dijo Brandon. ¿¡QUE!? ¿¡ACABA DE LLAMARME 《BRO》!?
-Adios,Jaz. Espero verte luego.-Dije ahora mirando a la chica que me tenía por las nubes.
-Si,hasta luego.-Dijo seca mirando el trozo de pizza que estaba en su plato.
No la ví comer en toda la noche,ahora entendía por qué estaba tan flaca. Tenía un cuerpo diminuto,aunque para su edad,la estatura que tenía era muy bonita. Tal vez era yo el hombre gigante que mide más de 1.95
-¡Oh,oh! ¡Se que pueden hacer mañana!-Dijo George agarrando del cuello a su hija,haciendo lo mismo conmigo.-Milo, ¿quieres ir a buscar a Jaz al instituo? Podrías llevarla al taller si es que vas para allí. Claro,si no te importa.-Claramente, ¡AMABA A MI FUTURO SUEGRO! De acuerdo,tal vez agrandé un poquito la situación,pero podría ver a mi china salir del colegio,la vería con uniforme,debe verse espectacular. ¡CAMILO! es solo una pequeñita.
-No,no,no y no. De ninguna manera,padre. Puedo ir caminando,o tomar un taxi.-Dijo Jaz desesperada. Me hacía sentir mal escuchar esas palabras,no quería verme. Tengo que ir a buscarla mañana de alguna manera.
-¡Si! Me encantaría,George. Mañana pasame la dirección del colegio por mensaje, y a que hora tengo que ir a recogerla.-Dije con una sonrisa exparzida por todo mi rostro.
-¡Está decidido! Mañana irá por tí Milo a buscarte al instituto.-Dijo George tranquilamente. Ví como Jaz se levantó de su asiento y se fue corriendo hacia su cuarto. Unos segundos después,se escuchó un portazo cerrar la habitación de Jazmín.
Todo esto me lo merecía. No sé como pude tratarla así cuando la ví por primera vez en el taller,siempre funcionaba con las mujeres,solo queria estar con ella una noche,pero ahora era diferente. Mañana debo solucionar todo. Mañana con simples palabras haré que confiara en mí.
O eso espero...Lunes, ¡Por fín! No pude pegar un ojo en toda la maldita noche por pensar en como podría pedirle perdón a Jaz.
Pero pensandolo bien...¿Desde cuando pido perdón? ¡No,Camilo,Concentrate! Debo pedirle una disculpa.A las 09:00 AM tenía que estar en el gimnasio. Hoy me tocaba practicar boxeo.
Vale,pensarán por qué me llamé "novato" en la primera carrera. Un hombre de solo 21 años no puede aparecer así de la nada misma siendo el mejor. Jamás tuve un instructor; mis mentores eran los corredores de picadas a las 04:00 de la madrugada. Pisé un acelerador cuando tenía apenas 13 años,esto podía hacerlo con los ojos cerrados. Todo lo tenía calculado,iban a pensar que solo era un niñito más,y cuando vieran mi victoria,todos quedarían con las bocas abiertas y las mujeres solo me darían sus números telefonicos. ¡Y asi fue! ,solo que una nena de papá se metió en mi camino.
Fuí hasta mi saco de boxeo y solo golpeé por dos horas,sacando todo lo que tenía acumulado desde que ví a una nena que me dejó A MI con la boca abierta desde el viernes.
Jazmín Lynch era linda, ¿que digo linda? ¡Hermosa! Su cabello era demasiado extraño,tenía capas de colores,pero se veía que era natural. Tenía un cuerpo que muy pocas veces se vé ahora en la sociedad; no tenía grandes pechos,lo cual es raro; hoy en dia,las mujeres están más que operadas. Pero sí un buen trasero. Supongo que hacía alguna actividad fisica. Lo que me molestaba de su cuerpo,era que demasiado flaca,pequeña. Cuando sea mía,trataré de rellenar toda la grasa que la falta en ese cuerpo, y no solo con comida...
Su timidez y su inocencía era lo que más me enloquecía. Tambien su revoleada de ojos sarcasticamente al verme,claro. Hablando de ojos...¡Sus ojos! ¡maravillosos! Quisiera hacerla sonreir,así podría verla achinar sus ojos y quedar como una niña,o más de lo que parecía.
Me estaba metiendo en terreno sagrado,siempre me he acostado con mujeres de mi edad. Ellas sí que con solo una guiñada de ojos se arrojaban a mi cuerpo.
Pero no pude encender eso en Jazmín,no pude ser arrogante para que se me tirara. Con ella no quería "solo una noche de sexo",quería hacerla mía,que sea mía. Así podría ver esos hermosos ojos achinados cuando se me plazca la gana en el maldito día.
-¡ESTUPIDO!, ¡IMBECIL!, ¡IDIOTA!-Me gritaba cuando golpeaba cada vez más fuerte el saco de boxeo. Los puños me empezarón a doler,pero no me importó. Lo merecía,no podía jugar con un alma inocente de solo 16 años.Cuando terminé,fuí hacia las duchas del gimnasio para prepararme,así iría a recoger a Jaz como una persona descente. El agua caliente hizo que mis musculos se relajaran,dandome un tiempo para pensar más tranquilo.
Llegó la hora. Estaba hace media hora esperando en el auto frente a la puerta del instituto fumando un cigarrillo para poder relajarme,cuando la ví. Tenía el pelo amarrado en una media cola de caballo,dejando mejor vista de su rostro. Llevaba una camisa blanca con una corbata azul,dando a juego con un pollera,se veía tan sexy vestida así. Salió sonriendo con un tipo que le llevaba una cabeza de estatura. Duagh,sentí un gusto amargo en la lengua. Mejor por su bien que no meterse con mi pequeña china.
Al verme,borró su sonrisa y miró hacia el suelo. Ví como sus mejillas se teñian de un rosa suave. Era demasiado tierna. Se estaba acercando a mí. Respira Milo,respira.
-H...hola. puedo ir en taxi,no te preocupes.-Dijo mirando aún al suelo. ¿Le temblaba la voz de miedo? Mierda.
-Hola china,sube al auto,llegaremos en solo unos cinco minutos.-Me gustó que escucharan algunas personas como apodaba a Jaz; me hizo sentir con poder sobre ella.Los dos estabamos en el auto. Puse la radio como para tranquilizar un ambiente. Quedó una canción de un cantante conocido,Jaz la sabía,porque empezó a susurrarla. Su voz era tan finita que me hacía sentir angeles cantandome en los oídos.
Apagué la radio para mirarla a los ojos. Ambos estabamos tensos,era hora de decirle perdón por lo estupido que fuí al comportarme con ella de tal manera.
-China, tenemos que hablar...-Dije cortando el silencio. Ví como abrío los ojos como platos mirandome; no me estaba dando la confianza que debería tener ahora.
ESTÁS LEYENDO
A Toda Velocidad
RomanceCamilo Brown,un chico soñado de ojos azules y cabello negro. Pero no tan soñado cuando destapas sus secretos...o cuando él te lo hace a tí. ¿Como caí en sus encantos? Simple,nuestras vidas iban a toda velocidad. A ella solo le gusta bailar clasico y...