"La venganza de Laura Palmer"

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Después me levanté y mis amigos también. Por fin había hablado desde que fui al hospital.

-Estaré bien, al menos estaré descansando en paz con que mi madre ya no se autolesciona-

-¿Te tomarás libre el día?- dijo Dan.

-No, estoy bien. Ese inútil de mi padre ni siquiera piensa que su ex esposa está muerta. Era de esperar-

En seguida sonó la campana de receso y fuimos a caminar por el patio de la escuela, reíamos, después Skay agarró mi brazo y lo puso al rededor de su cuello, Dan no tardó ni un segundo para molestarnos.

-Ya debería besarse o por lo menos hacerse novios-

-Skay, ¿Tienes planes para hoy en la tarde?- le pregunté.

-Supongo qué no-

Le susurré algo a Skay, lamentablemente ella es más chaparra que yo, ella mide 1.70m, tenía que agacharme y ella ponerse de puntillas para poder susurrarle algo, después a Skay se le ocurrió una idea después de lo que le dije.

-Oye Dan, ¿no te gustaría saber cómo es nuestro trabajo?- dijo Skay.

Dan tenía cara de asustado pero aceptó ir con nosotros para ver nuestro "trabajo".

-Okey chicos, nuestro plan para el día de hoy se llama "La venganza de Laura Palmer"- no logré explicar el plan ya que cierta persona me interrumpió.

-Wow! Detente ahí! A caso vas a involucrarme en todo esto de las torturas y asesinos que sueltes llamar "Trabajo"-

Yo solo moví mi cabeza para decir tal vez; lo cuál hizo que Dan se molestara un poco. Cuando terminaron las clases fuimos a mi casa, ahora literalmente era mía ya que mi padre no estaba y mi madre había muerto; lo primero que hicieron Skay y Dan fue ayudarme a guardar todas las cosas de mi madre y subirlas al sótano, acomodamos ciertos muebles para que no se notara los espacios vacíos donde se encontraban las cosas de mi madre. Finalmente terminamos y Dan se quiso ir ya que le daba miedo de cómo pensábamos Skay y yo sobre la muerte, pero sé que en algún momento el va a querer saber que se siente al torturar y matar a alguien.

-Realmente no sé si quedarme o irme desde lo que pasó- Dijo Skay.

-Lamento haberle dicho lo que pasó a Dan pero realmente estaba algo confundido- respondí.

-Bueno, supongo que todos merecemos una segunda oportunidad-

-Oye, tengo una grandiosa idea, subimos a mi cuarto?-

Skay asintió y subimos a mi cuarto. Tenia una mesa grande donde realizaba mis historias y dibujos, tomé un papel bon blanco que tenía en mi closet y empecé a escribir y a dibujar un plan que tenía. El plan se llamaría "La venganza de Laura Palmer" pronto descubrirán el por qué se llamó así el plan. Sabia dibujar ya que ese era el pasatiempo favorito de mi madre y ella me enseñó, debo aceptarlo, lo aprendí de la mejor. Dibuje cada paso el plan y en mi pared, como tenía pintura de pizarrón, en ella escribía Skay todos los pasos, tiene una hermosa letra y escribía lo demasiado rápido para que yo solo hablara y ella lo apuntara.

-Me parece una grandiosa idea- Miró el pizarrón Skay mientras ponía el plumón entre sus dedos y recargado en sus labios.

-Bueno, pero cuándo lo pondríamos en acción?-

-Qué tal el 24 de diciembre, es nochebuena y ella no volverán a casa para ver a sus familiares, por eso será como el doble de sufrimiento.- dijo mirándome con aquellos ojos tan hermosos de colo azul.

Yo solo asentí y me levanté de mi silla de escritorio, la miré a los ojos y con un solo abrir y cerrar de ojos, estábamos lo suficientemente cerca que nuestros labios rozaban, estaba nervioso y en eso tocaron el timbre, estaba a la vez un poco aliviado, pero no de lo absoluto. me separé un poco de ella nervioso y solamente dije.

-Debo abrir la puerta- con todos los nervios que tenía bajé y abrí la puerta, la persona detrás de esa puerta no era alguien que me encantaba ver.


No Todas Las Historias Tienen Un Final FelizDonde viven las historias. Descúbrelo ahora