Naruto aun recordaba, como si hubiera sido ayer cuantas veces había añorado en su tierna infancia, que su madre entrara a su habitación, le despertara con un grito, un almohadazo, un beso y que tras desayunar en familia él y su padre fueran a entrenar. Lo que hubiera dado por que Minato le hubiera explicado todos los cambios que su cuerpo tendría al ir creciendo, que le enseñara a rasurarse, sus mejores técnicas ninjas o como conquistar chicas...
Pero no podía llorar sobre la leche derramada así que todo lo que su padre no pudo hacer con él, puesto que había dado su vida por él, Naruto lo haría con su hijo...
Pero nunca pensó que llegaría a estos extremos...
Boruto a sus 17 años estaba ya más alto que él, su hijo tenía un cuerpo fibroso, joven, atlético y para cerrar con broche de oro muy sensible... tan sensible como el suyo...
-eh... no será mejor que... ¿esperes a que salga?- cuestiono abochornado, con las mejillas rojas y un tono nada varonil ni con autoridad paterna.
-¿Por qué?- cuestiono el joven, abriendo más las piernas y pegando a su pecho la espalda de su adoradisimo padre. –de niño siempre me bañaba así contigo... pero como ahora eres más pequeño que yo... pues te toca a ti estar adelante... estamos ahorrando agua y estrechando mucho nuestra relación padre-hijo-
Naruto pensaba que "estrechando" se estaba quedando corto... podía sentir con claridad en sus nalgas, la firme erección de su hijo adolescente y hormonal y su cuerpo estaba reaccionando ante la cercanía del cuerpo, olvidando por completo que detrás suyo era su hijo el que le estaba rozando.
-¿el tío Sasuke y tú alguna vez se bañaron juntos?-
Bañarse quedaba muy corto en la lista de cosas que él y Sasuke hacían, despues de dos hijos con Hinata, unos años más de casados, finalmente los dos habían puesto las cartas sobre la mesa... los dos se querían mucho por los momentos bonitos de su niñez y los lazos formados durante la gran guerra ninja, pero ninguno amaba al otro como suponía hacerlo.
Himawari estaba con su madre y Boruto con su padre... Sasuke seguía en sus largos viajes y era normal que despues de meses de que no le tocara, el cuerpo de Naruto reaccionara como lo estaba haciendo al sentir el cuerpo adolescente a sus espaldas.
-¿estás bien? – la respuesta ingenua no tenía nada de inocente... y aún menos inocencia tenían las manos que habían comenzado a acariciar su pecho y los morenos pezones sensibles...
Naruto se resistió un poquito pero Boruto fácilmente logro someterle a más caricias por su parte.
-los he escuchado... aunque el tío Sasuke siempre pide que guardes silencio me he dado cuenta que no puedes hacerlo...- tras usar un tono casi confidente, un suave besito en el cuello y un mordisquito en la oreja de manera juguetona fueron dados por el adolescente.
Un largo y sonoro gemido se escurrió de la boca del padre, cuando el adolescente deslizo su mano por el vientre, acaricio la mata de bellos rubios y sujeto gentilmente la carne dura.
-eres muy sensible... mira... si toco tus costados te da un escalofrío... si toco entre tus muslos no te puedes aguantar y gimes... ¿Qué pasara si...?-
La pregunta quedo a medias... pero solo la pregunta, por que las acciones continuaron y Boruto comenzó a masturbarle lenta y rítmicamente.
La conciencia de Naruto se fue al gorro.
Su cuerpo se derritió como mantequilla en los fuertes brazos de su hijo y se dejó hacer, era inútil que tratara de detenerlo, tenía meses de abstinencia por la estúpida culpa de su estúpido auto exiliado amante...
El chapoteo en el agua de la tina comenzó a ser más sonoro, Naruto empujo más fuerte sus caderas contra la mano que le estaba dando placer y de pronto... todo fue oscuridad...
-¿estás bien papá?-
Apenas Naruto abrió los ojos se vio vestido con un ligero yukata, en su habitación, Sasuke le miraba expectante, con aquel frio rostro, recargado en la puerta.
Boruto se veía realmente preocupado.
-¿Qué paso?-
-te caíste en el baño y te golpeaste contra la tina... llevas desmayado 3 horas...-
-me duele la cabeza...- acepto Naruto, confundido, cansado y adolorido.
-tu cabeza está bien, la tina fue la que se rompió...- dijo con sorna Sasuke, pero Naruto pudo ver la ligera preocupación brillando en sus ojos.
-ni en sueños te dejo en paz... estabas soñando conmigo papa...-
La enorme sonrisa de su hijo podría iluminar toda la aldea de la hoja sin problema alguno... y Naruto recordó el contexto del sueño y se sintió el padre más enfermo del mundo.
-vamos a comer ya...- les urgió Sasuke... tenía un par de horas que había regresado de uno de sus eternos viajes y los 3 solían siempre compartir las horas de la comida.
- si...- acepto el rubio abochornado por su vergonzoso sueño... pero...
-tranquilo pa... no se dio cuenta... - dijo con tono juguetón Boruto, rodeándolo por los hombros como si fueran dos viejos compadres.
Are... Había sido un sueño ¿no?
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este mini one shot es a peticion de Anya Meyer, que despues de ver una imagen de estos dos le gano la tentacion xD
muchas gracias por participar! espero que te guste linda
la imagen la podran encontrar en la pagina ffyaoiverse, la intente subir aca pero no puedo ;o; wattpad me sabotea...
