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Llegaron las nueve y cuarto de la noche y me preparé para salir de el apartamento. West me informó que se iba a quedar unas semanas en Seattle, y que necesitaba un sitio dónde estar. Cogí todas mis pertenencias y me despedí de él, saliendo por la puerta. La casa de Ray no estaba muy lejos de la mía, así que no tomaría el bus. Llegué al portal y estaban las tres chicas esperándome de brazos cruzados.


– Bueno bueno, ya están aquí. –saludé con un pequeño grito ahogado.

– Empecemos la diversión. –respondió Ana.


Todas asentimos y subimos hacia el cuarto de Ray, dónde habían papeles de libreta cortados y doblados en pequeñas partes. Nos sentamos en círculo y Emma metió todos los papelitos en una bolsa de plástico, removiéndolos con energía.


– No hace falta que levantes pesas, Emm –sugerí riendo– .Te vas a dislocar un brazo.

– ¡Serias, mujeres! –ordenó Ray con voz firme, aunque todas soltamos una risa al oírla.

– Bien, este año empezaremos con Ana, tienes que elegir tres papeles de las tres bolsas que tiene Emma. – las señaló y Ana asintió– Bien, la personalidad.


Quedamos todas expectantes ante la expresión de Ana.


– Estudiante. –respondió ella.

– Color de ojos. –dijo ahora Emm.

– Verdes. –asentimos.

– Y por último, pelo. –anunció Ray.

– Negro. –joder, ahora tenía más posibilidades del pelo azul.


Las tres siguientes fueron más rápidas, a Emm le tocó un chico deportista, ojos grises y pelo marrón; a Ray otro que fuese divertido, ojos negros y pelo azul, y finalmente, tocó mi turno.


– Debb, te toca. –musitó Eme con una sonrisa pícara.


Estiré la mano en la primera bolsa, abriendo el papel.


– ¿Qué? –dijeron las tres a la vez. Reí inconscientemente y me aclaré la garganta.

– Malote (pero sexy) –susurré poniendo los ojos en blanco– . ¿En serio, Emma?


Ella comenzó a reír como si no hubiera un mañana. Continué con la otra bolsa.


– Pelo rubio...–suspiré y metí la mano en la última bolsa– Ojos caramelo.

– ¡Esa fue mi idea! –chilló Ray.

Bien, ahora tendría que encontrarlo, pero ¿dónde?

Bad Influence. | jb Donde viven las historias. Descúbrelo ahora