My Sweet Bodyguard

Una declaracion de Guerra

Me encontraba en el despacho de mi padre a la primera. hora tratando de cambiar a ese tipo que seria mi guardaespaldas.

- Papa, no hay manera de que cambies a Subaru o a Brian conmigo en vez de Daniel.

- La desicion ya fue tomada, aceptala.

- Pero...

Se escucho un golpeteo en la puerta

- Pase - Dijo mi padre

Daniel asomo la cabeza, al verlo solo gire los ojos y me volvi hacia mi padre.

- Señor

-Digame

- Queria ver si... me cambiaria de puesto

- ¡Vez! Anda, cambialo, el quiero y yo quiero. Todos Felices

- Lo siento, no les puedo cumplir un capricho a ninguno de los 2.

Daniel bajo la cabeza, mientras que yo solo dije:

- ¡ESTO ES INJUSTO!

Sali de la habitacion echa una furia y azote la puerta, me encerre en mi habitacion por varias horas ni siquiera deje que Ana entrara a dejarme el desayuno.

- Toc - Toc

- Largo

- ¡Oh! vamos no vas a decir ¿Quien es?

- Para que si ya se que eres tu

- No seas Aguafiestas - Dijo Daniel recargandose en la pared

Se quedo todo en silencio

- Se que no te agrado... y pues tu a mi tampoco me caes tan bien...

- Que alentador - dije en tono sarcastico

- Pero... Hay que tratarnos de llevar bien, hable con tu padre...

- Me di cuenta

- Me dijo que la razon por la cual no me cambiaria era porque necesitabas a alguien que te llevara la contraria.

- Y tu eres el indicado ¿No?

- Porque eres una niña mimada

Me levante enojada de mi cama, no iba a dejar que nadie y mucho menos este me llamara niña mimada.

- Y TU QUIEN TE...

Cuando me di cuenta Daniel tenia su brazo recargado en la pared mientras que yo sali imaginando que estaba de espaldas. Quedamos de Frente, el solo se sonrojo, pero no era un sonrojo de manera morboso si no uno de verguenza.

- P- perdon, te asuste - dijo Daniel mientras se alejaba de mi

- No es nada - baje la cabeza un poco apenada

Regrese a mi habitacion, posiblemente Daniel ya se habia ido, preferi no arriesgarme a verlo.

Mire mi telefono era las 9 cuando me llego un mensaje de mi amiga.

De: Karla

Para: Hikari

Hey, hoy hay una fiesta en casa de Samuel te esperamos, prohibido faltar :3

Genial!!, habria algo para despejarme un rato ademas de que veria a Samuel, Samuel es el chico mas lindo de la escuela. Rubio, alto y unos ojos tan verdes, era la perfeccion.

Para mala suerte mia hoy era Domingo, Papa no me dejaba salir despues de las 8.

-¿Como le hare?, si Daniel esta haya afuera me va a echar de cabeza y me preguntara ¿Porque tan arreglada? idiota. Pero, si consigo escaparme, Papa se vera forzado a despedirlo Si!!!

Tal y como en las peliculas que he visto amarre mis sabanas al balcon y me empeze a deslizar para fortuna mia la mayoria no estaba.

Cuando al fin toque el piso me escondi entre los arbustos por cualquier cosa.

- Bien, no hay moros en la costa

Sali disparada hacia el porton de la casa, no me faltaba mucho cuando tropeze.

Daniel iba pasando, solo se me quedo mirando acto seguido comenzo a reirse de mi.

- Callate y ayudame a pararme - le dije enojada

Solo extendio su mano, la agarre y me pare, estaba dispuesta a regresar a mi habitacion pero Daniel me jalo del brazo.

- ¿A donde ibas?

- No es de tu incumbencia, ademas quien te dijo que me puedes tutear

- Me tome la libertad, Hikari

- Callate, no le vayas a decir a mi padre

- Y porque no he de hacerlo

- Porque si lo haces hare de tu estadia aqui un infierno

- Tan solo verte es irritante

- Ash! solo sueltame

- Lindo vestido

- Lo se, es ZARA original

Me solto, me encamine hacia la casa sin tomar en cuenta que me habia escapado, cuando abri la puerta papa iba bajando las escaleras.

Ohhh No

- ¿Que hacias haya afuera? y ¿Asi vestida?

- Bueno yo...

- Se iba a escapar señor...

MALDITO SEAS, MALDITO SEAS...

- La detuve antes de que pudiera

- Muy bien joven Daniel le subire el sueldo, en cuanto a ti Hikari estas castigada.

- Pero...

- Nada de peros, a tu habitacion

Voltee hacia Daniel, el solo se reia.

Esto fue una declaracion de Guerra, no creas que no me vengare...