Durante mi toda mi vida he pensado, planeado y soñado cada cosa que quiero en ella, y de la misma manera como me gustaría lograrlo; soñadora me dirán, pero la verdad anhelo mucho y aún asi me conformaría con tan poco; un buen hogar y una buena comida y no solo para mi, si no para todos en mi familia.
Extraño esos días en los que me preocupaba por la ropa que usaria en Diciembre, y no en lo que pasaria en el pais durante estos tiempos de protesta.
Extraño que los profesores de la Universidad nos motivaran a echar para adelante, que nos dieran unas simples palabras, y no como ahora que nos dicen vagos o terroristas solo por no poder acudir a la Universidad.
Hoy estoy melancólica, pero espero volver a soñar como lo solía hacer.
Siempre creí que los sueños van más allá de un simple hecho irreal, sean buenos o hasta una pesadilla que te sacuda la cabeza, los sueños están allí por algo y estoy segura que su propósito es contarnos algo que no podemos ver en la cotidianidad, por las cosas que hacemos en las mismas, enfocar nuestra mente en una sola tarea dia a dia. Los sueños están para mostrarnos partes de nuestras vidas, cosas que sucedieron alguna vez, que quizás hemos olvidado, o hasta visiones de nuestro futuro.
Y siempre he escuchado que el tiempo todo lo cura.
Que con el tiempo todo lo malo se perdona.
Pero nunca he escuche de que el tiempo olvida.
El tiempo tiene memorias de sus vivencias.
El tiempo puede ser tan maravilloso y a la vez ser tan corto, como también tan maldito y tan largo.
Y esta dedicatoria simplemente es para el tiempo, porque gracias al tiempo aprendí a valorarte y también con el tiempo comencé a amarte.
