▶Boca de Lobo◀ *Historia Kookmin*

Capítulo 1

12/07/19
11:54 p.m.
Seúl, Corea del Sur.

Hoy es el día, en el que una compañera, amiga y acompañante de toda la vida, cumple años. Todos los chicos de la preparatoria decidimos organizar una fiesta sorpresa en su propio dormitorio. Las amigas que compartían cuarto con ella, estaban muy entusiasmadas y emocionadas, esperando su llegada.
Compramos decoraciones, botana y algunos regalos que ella siempre había deseado. Faltaban 6 minutos para que ella regresará, y disfrutará su cumpleaños número 16. Casi toda la escuela fue invitada a este evento, aún cuando no convivieramos mucho con ellos; No todos cabíamos en el pequeño dormitorio en el que ella dormía, los restantes tendrían que esperar afuera a escondidas, para cuando ella regresara recibiera estas grandes felicitaciones. Cuando sucediera ésto, todos nos iríamos al plantel escolar, para ahí disfrutar de la fiesta.

Llegó el momento en el que Jessica llegaría.
Todos nos escondímos y guardamos silencio; no se oía nada más que los grillos y unas cuantas respiraciones. Alguien abrió la puerta. Todos salimos con un salto que ella nunca se esperaba, y le gritamos "¡Feliz Cumpleaños!". Al principio se había asustado mucho pero después reaccionó y se sorprendió. Quedó impactada con esta sorpresa, todos fuimos a abrazarla y le dimos todos los regalos que los invitados le habían dado.
Salió de una parte del cuarto, Yoongi, (mi mejor amigo, a parte que su dormitorio está a un lado del mio) con un pastel de Zanahoria en las dos manos y unas velas en éste. Todos esperábamos que ella apagara las velas y lo hizo; después V (compañero de clase, es muy imperactivo) aventó la cabeza de Jessica hacia el pastel embarrándola en toda la cara. Todos le gritamos a Tae, (también llamado así) regañándolo, mientras que Jessica solo se reía, le ofrecí una cervilleta para que se limpiara la cara, ella la aceptó y se limpió. Una de las amigas de Jessica, Maggie, gritó; Bueno, ¡Qué empiece la fiesta!

Casi toda la escuela salió al plantel y empezaron a poner música y luces, significando que ya todo había empezado. Cuando todos salieron, yo seguía en el dormitorio junto con Jessica, estábamos solos. Le dí un abrazo súper fuerte y la felicité ya que es una de las mejores personas que pudo haber aparecido en mi vida.

Hace mucho que conocí a Jessica, fue cuando estábamos en primero de primaria. Ella siempre me apoyaba y me ayudaba cuando más lo necesitaba. Cuando salimos de la primaria hicimos una fiesta todo el grupo, porque ya íbamos a salir de curso.
Varios días después, entramos a la secundaria, nos tocó grupos separados pero nosotros siempre seguíamos unidos. En esa época, Jessica tuvo un montón de pretendientes, pero ella nunca les aceptaba sus solicitudes, ya que no les gustaba su forma de ser o porque sólo la utilizaban por su rostro bonito. Hubo una ocasión en la ella decidió tener novio, se llamaba Jeon (nunca supe cuál era su nombre principal). Al principio se veía que él la quería mucho, le compraba flores, le dedicaba canciones, hasta llegó al punto de invitarla a conocer a uno de sus cantantes favoritos (él siempre ha sido muy popular y muy rico por parte de su familia). En ocasiones, Jessica me acompañaba a la biblioteca a hacer las tareas, y al parecer su novio empezó a sentir celos y rencor. A partir de eso, no volvió a ser el mismo de antes. Cuando ellos salían de la escuela, él la empujaba o le jalaba el cabello, siempre la maltrataba y le hablaba mal; Todo eso me lo contaba ella cuando salíamos juntos. Yo trataba de ayudarla pero no podía. Sus padres pidieron que expulsaran de la escuela a ese alumno (el novio de Jessica), ellos le explicaron al director el por qué.
Éste mando a llamar a Jeon y lo empezó a cuestionar en frente de los papás de ella; cuando le preguntaban, él respondía honestamente; era algo impresionante. Pasaron varios días y él ya no estudiaba en esta escuela, lo que me daba más tiempo de estar con Jessica.
Varios años después entramos a la preparatoria, nuestros padres decidieron meternos a la misma escuela, pero ésta es como un internado, ya que los únicos días que podemos salir con nuestra familia y divertirnos afuera, son los Sábados y Domingos. Durante nuestro proceso ahí, estuvo increíble, conocímos a nuevas personas y también la escuela es genial con todos los servicios que tiene. Nos la pasamos muy bien.