nuevas decisiones, nueva vida

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15 de octubre del 2014

Han pasado 12 años del accidente de mis padres, 2 desde que Esteban me dejo la carta despidiéndose y 1 año desde que termine todos mis estudios, ahora que ya estoy libre yo me hago cargo de las empresas de mis padres, no tengo intensiones de enamorarme, no es que no crea en esas cosas es solo que pierdo siempre a las personas que amo... y no pienso pasar por lo mismo.

Me he sentido sola y me ha costado bastante acostumbrarme a estar así, quisiera que nadie se metiera en mis asuntos. Todos somos muy diferentes. No quisiera ir por la vida como muchos lo hacen dejando atrás a las personas que los ayudan a triunfar, es preferible caer mil y una vez; antes de traicionar a las personas que siempre estuvieron a nuestro lado en los momentos más críticos de la vida.

He convocado una junta con algunos accionistas de la empresa para saber quiénes está de acuerdo para que yo salga del país e ir a España a invertir en nuevas empresas pequeñas, y hacer de las mías más grande, sin contar que aprovechare el viaje para ver al señor Iñaki Miller Cavalcanti, espero que no sea de esas personas difíciles de tratar, que se creen la gran cosa y que pueden hacer lo que se les da la gana.

Deberías quedarte aquí en Rusia, tu presencia es importante para Fischer Kozlov corporation (la empresa) tu padre... ­­­­­­­­­­— llama la atención de todo los accionistas ­—

— Mi padre fue una persona de unas ideas buenas, pero yo soy Ibikó y ahora esta empresa me pertenece, si no le gusta, abuelo puede retirarse ­— lo miro desafiándolo ­— primero iré Alemania aquí se quedara Alex, se hará cargo de informarme cualquier cosa y si algo está mal tengan por seguro que ustedes se quedaran en la ruina ­— los miro a todos antes de retirarme ­—

Los años aquí en Rusia cada día son más fríos y tristes, así como los de Alemania. Las cosas han cambiado no pienso quedarme en un lugar donde perdí a mis padres ni a mi primer amor. Todo me los recuerda, si voy Alemania siempre término en el lago donde mis padres me llevaban después de cada evento importante que asistíamos, en la heladería donde me felicitaron por mis excelentes calificaciones, el quiosco donde me contaban de cómo se conocieron, en la pista de hielo donde me dieron el cariño y su tiempo sin interrupciones alguna, si estoy en Rusia recuerdo a Esteban de cuando nos conocimos, llego a los arboles caídos y recuerdo nuestro primer beso, cada abrazo y palabras de aliento, estos lugares me dan tanta melancolía que no puedo respirar, no me deja soñar, vivir o inclusive seguir con mi vida, sin contar que todos los días son duros cuando voy a Fischer Kozlov corporation, las discusiones con el abuelo cada día aumentan pero no pienso ceder ante él, yo soy una chica que va hacer con la compañía lo que creo que sea necesario, Rusia y Alemana me sofocan me entristecen por eso me quiero ir a España yo sé que Alex es una gran persona y que puedo contar con él, solo espero que también me pueda apoyar en esto.

— Sí, Alex, tú serás el que se encargue de aquí mientras yo esté en España, bueno es si quieres, cada cierto tiempo yo vendré a ver cómo están las cosas por acá y Alemania — lo miro a los ojos — tu sueldo aumentara, y...

— Acepto, no es por el acenso ni el aumento, es porque yo he sido testigo de cómo te pones cuando entras en esa oficina — me dedica una sonrisa tierna y llena de cariño — podrás ser muy dura y fría a veces, señorita Fischer, pero tiene un gran corazón cómo sus padres, le deseo lo mejor y que encentre la felicidad y cariño que busca — me sonríe y se va a su oficina —

IbikóWhere stories live. Discover now