Desnudando al Alma

La de Iris Café y Felicidad Introvertida

Ella es misterio, enigma e intriga.

Ella es calma, quietud e impasibilidad.

Ella es suave, agradable y apacible.

Ella es muchas cosas, pero si algo no es, nunca, es lo que parece.

La forma de mirarla es fácil, pero no sencilla, para verla de verdad no tienes que ser un detallista profesional, ni rebuscar es su mente o corazón, no tienes que dedicarle años de trabajo ni noches sin descanso, solo debes tener suerte, porque pasa aleatoriamente, no cuando menos te lo esperas, ni cuando no lo estas buscando, pasa como el caos, sin razón, sin motivo, pasa porque así funciona el universo.

En realidad lo único que debes tener es suerte, la suerte de estar con ella, de voltearte en el momento indicado, y de no perderte en su ojos cuando pase, es algo increíble, su inexistente sonrisa surge de la nada como un depredador que esperaba su presa, de un momento a otro su expresión, antes pacifica y serena, se vuelve un mar, un río, una corriente desatada donde en lugar de agua fluyen emociones.

Verla feliz es un evento difícil de explicar en palabras, su alegría normalmente esta escondida, tímida, renuente a salir a flote, y cuando lo hace provoca emociones que se te escapan de las manos, ella no lo puede controlar, no sabe como, y nunca debería hacerlo, porque esconder esa sonrisa del mundo debería ser un crimen internacional.

Intentando envolverla en una linea de tiempo podría empezar por sus ojos, oscuros, enigmáticos, del color de los deleites de la vida, del color del café y del chocolate, llenos de una expresión que no se deja descifrar, suelen ser los primeros en ocultarse, generalmente brillan, y luego se van, se cierran, no son necesarios para lo que viene, pero en ese momento ya sabes que estas por presenciarlo.

Luego, su cara, una sobrecarga de sangre la pinta de un rojo excepcional, pero no hay tiempo de observarlo pues su sonrisa ya esta allí, describirla es un arte en si, esa sonrisa es una explosión de felicidad que te llena de calor y te contagia, es una invitación a darte cuenta de su verdadera esencia, esa que por motivos desconocidos oculta bajo su silencio y moderación, es una explicación de eso que creías ver en ella y que te perdía en su mirada, es una resolución a mantenerte atrapado por sus encantos solo para observala de nuevo, es un punto de quiebre, donde el único resultado es quedar embelesado de ella.