Una mente inquietante

El sitema es una mierda

El sistema es una mierda, aqui estoy las 12:28 am de mayo del 2017, no puedo dormir, como en la mayoría de veces, pero en esta situación me siento una mierda, la vida es una mierda, todo es una mierda!!!.  Como el sistema convierte las ganas de vivir a ganar de no querer respirar, porque el mundo está lleno de injusticia. Claro Tu justicia tal vez no es Mi justicia, eso dice la filosofía y ...... Es verdad pero Porque no vivir en de una mejor forma?, porque en el sistema educativo te enseñan muchas cosas que tal vez ni necesites?.

Porque no enseñan mejor a como manejar nuestros sentimientos en situaciones difíciles de la vida?, a una persona con problemas de ira o con deficiencia de atención o con dislexia les dan la misma atención que a personas que no tienen ese problema, si hay escuelas ahora especiales o también padres que se dan cuenta de que su hijo-hija tienen esas dificultades y los llevan a especialistas pero..... Y si no? ese niño- niña tiene que luchar contra eso día tras día, dándole así el sistema educativo y social golpe tras golpe.

Tal vez solo tal vez un %20 de ellos pueda ser alguien en la vida a través de adaptarse al sistema o de las ayudas que reciben desde pequeños, otro %15 puede ser alguien rompiendo algunas reglas que las persona ordinarias ven como inmunes, pero y el por ciento que queda, que pasa con ellos?, yo no lo se pero te aseguro que terminan suicidándose por no sentirse parte de algo o haciendo cosas dañinas tanto a ellos mismos con a los demás, en las calles, en las cárceles o con una vida en la que no son felices y se crean una fantasía para poder buscarle sentido a su existencia.
Solo pido que sea tu, se escuchará cliché pero...... has lo que sientas, lo que amas,busca lo que necesites, supera, logra, llora, ignora las cosas que sabes que son innecesarias, conocete, viaja, come, disfruta los pequeños momentos.

Pd:  si te das cuenta muchos estamos viviendo como si no fuéramos a morir, no lo digo de forma de que hacemos locuras, sino de que no vivimos exactamente disfrutando esos pequeños momentos que son tan simples como respirar.