Noches de verano.

Capítulo 6.

Aquella semana, solo la podia definir como agotadora, llena de entrevistas, sesiones de fotos, y actos con fans.
Había sido divertido, y me encantó, ya que pude vivir lo que es la cara de Morat que no vemos los fans.
Esos momentos en que les ves echando en falta a sus familias, sus novias y en general su Colombia.
Pude verles concentrados componiendo, canciones que podrían ser su próximo éxito.
Cada día les conocía más, y podría decir que eramos muy amigos... al menos con Martín, Isaza y Villa, por qué con Simón era muy raro todo.

Cada noche, Simón y yo quedabamos a leer en la terraza, acompañados de una bebida fría... era curioso, apenas hablabamos ya que las miradas decían lo que nosotros no eramos capaces. Amaba cuando lo miraba y lo pillaba observándome fijamente, y aunque a veces apartaba la mirada y volvía a su libro, otras se me quedaba mirando a los ojos, y en ese instante yo quería morirme o que me besara.

Hoy era sábado, y también el primer día de descanso, aunque mañana ya nos íbamos para Barcelona, los chicos tenían concierto.
Así que estaba liada, hablando con los organizadores del concierto, concretando cosas con algunos fans que iban a venir para estar un rato con los chicos después de la actuación,y además estaba soportando a mi madre, ya que decía que estaba muy ocupada y que apenas me acordaba de ella.

-¿Estás bien? -me pregunta Villa que entra a mi habitación.

-Estoy estresada.

Él me quita el móvil, y se lo guarda en el bolsillo.

-Listo... hoy es tu día libre, aprovéchalo, mañana tienes tiempo en la furgo de estresarte lo que quieras. -bromea, y yo le doy un buen abrazo.

Y es que con Villa, era de todos con quien más había conectado.
Desde el primer momento, me había tratado muy bien, era un amor conmigo. Además teníamos un carácter algo parecido, dramáticos y con un humor muy malo.

-Y bueno, ¿me necesitas para algo? —Le pregunto ya que no sé el motivo de su visita.

-Si... mi novia volvió a enfadarse conmigo... y no sé que hacer. —me responde preocupado, sentándose a mi lado en la cama.

Otra cosa por la cual Villa y yo nos llevábamos tan bien, era que los dos estábamos pasando por un momento amoroso raro. Él con su novia, ya que no dejaban de discutir, ya que ella se ponía celosa por todo... Y yo con Simón, que no entendía bien que pasaba entre nosotros.

-Villa... ¿quieres que hable yo con ella? -le digo por milésima vez, ya que parte de los enfados de esa chica, eran celos que tenía hacia mi.

-No sé si será lo mejor... le caes mal.

-Toda mujer que se acerca a ti le cae mal, tu novia está loca... Además sabes que a mi me gusta otra persona.

-¿Quien te gusta? -pregunta Isaza que acaba de entrar al cuarto.

-Nadie... -le miento, pero por su cara sabe que no es así.

-Isaza no seas chismoso. -le dice Villa.

-Bueno, viendo a Simón tampoco hace falta chismosear mucho. —dice riéndose, y es que sé que no son tontos y también los demás se han dado cuenta de que entre Simón y yo hay algo.

-¡Calla! -le digo y le tiro un cojín.

-Love is in the air... -canturrea Isaza mientras ríe.

-¿Bueno y a que has venido? -le pregunta Villa, porqué sabe que me incomoda hablar del tema.

-A deciros que vamos a ir a dar una vuelta, y a tomar algo, que si os apuntáis.

-Si claro. -contestamos Villa y yo, y Juan Pablo se va de la habitación.