"Se ha suspendido​"

491 41 0
                                    

Aquélla fue sin duda la noche más larga para el profesor al verse en mucha posiciones sexuales.
Era su suplicar para que el menor lo tomase una y otra vez.
Samuel haría lo que el mayor le decía pero no como una orden, más bien como dejar que el mayor de sintiese bien.
El sol no salía cuando Guillermo se dejó vencer por el cansancio. Aquél cuerpo no paraba de percibir el placer y las caricias de Samuel.
La alarma sonaría pero antes de darse cuenta de la hora en sí abriría el mensaje.
-El colegio ha sufrido daños por la lluvía. La luz ha regresado en unos sectores pero no en la zona escolar por lo que se dictamina que por este jueves y viernes se suspenden las clases por fuerzas mayores.
La luz ya ha regresado en la casa del profesor.
Samuel pasó su mano por debajo de las sábanas para tomar al profesor en un abrazo del cuál sería complicado zafarse.
Al ver la hora indicaban las seis de la mañana, cuánto tiempo ha pasado desde que el profesor no ha dormido entre semana más de la hora normal.
Sabía que era un error y el fuerte sonar de los truenos en la tormenta que era insistente l decía con voz alta.
Hacerle caso pasó por su cabeza y se alejó por lo que el rozar de su piel haría con la del menor.
Se dejaría abrazar, tomar en aquellos brazos sabiendo que es un maldito error que a más de costarle la libertad de ejercer como profesor es esa libertad que acusa con meterlo en la cárcel.
Guillermo dejó que dormir se diese pues le era muy difícil estar despierto ya que el dolor de cuerpo se daría y la falta de energía harían que sus párpados noble permitan pensar en otra cosa que fuese dormir.
El móvil vibra, en aquel momento como odiaba y le pareció odioso que ocurriera.
-Ire a tu casa dentro de poco. Necesito de tu ayuda, soy Luzu.
-En cuanto llegarás?
-Media hora.
Al ver la hora en el móvil Guillermo quiso despertar a Samuel pero al verlo tan cansado y la tormenta que seguía le fue imposible hacer tal maldad.
Sin embargo si daría la advertencia del que el profesor de educación física iría a la casa dentro de poco.
-Quieres que me vaya?
Se escucharía a in Samuel adormilado.
-No, solo quédate en la habitación y no salgas hasta que te avise.
Samuel en tendía elnpekigroben el que lo podría meter por un descuido.
-Ire al bar de la esquina esperar a que me avise. Solo no se olvide que no quiero que le pase nada.
El profesor comprendía que era su vida en juego al meterse por una fantasía​.
El tartamudeo se daría al acto que hizo Samuel, un​ beso.
-De... De acuerdo...
Samuel se meteira a la ducha, no demoró en ello por lo que Guillermo aprovechó para prepararle un jugo y unos panecillos.
Al salir de la ducha Guillermo recibió la llamada de Luzu que estaba en el semáforo antes de llegar a su casa.

Por la prisa Guillermo le prestaría lo primero que encontró.
Una sudadera negra, un bermuda y ésos zapatos converse color amarillo.
Samuel tomó el juego y el dinero que que le dio Guillermo pues no tiene idea de lo que busca Luzu.
-Ire pronto o te llamaré.
-Recuerde que no puedo ir a casa. Mis padres no han dejado llaves y les da igual que me quedase donde sea.
Guillermo sabía que era cierto.
-Descuida, prometo que iré por ti.
-Y profesor...
-Si
-Respire, que he sido yo el que ha aprovechado la situación.

Era gracioso pensó el mayor pues él pensaba diferente , es claro que quién sea juzgará al adulto y no al menor.
Samuel seguiría su camino esperando por cada paso que daba que realmente el profesor se acuerde de ir por él.

Do-Re-Mío...  (Wigetta)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora