Un camino a tu corazón

Celos

Después de haberse ausentado un par de días Mika al fin había regresado a la escuela con el único objetivo de ignorar al oji esmeralda y fingir que había olvidado todo lo que sucedió el día en que le visito

– buenos días Mika - le dijo algo tranquilo el moreno o eso intentaba ya que a pesar de su expresión su tono de voz temblaba un poco

– buenos días - le dijo simplemente sin voltear a verlo por la vergüenza que sentías al recordar un poco de lo que sucedió

Las clases se volvieron algo pesadas pues a pesar de estar en el mismo asiento no se dirigían la palabra, mucho menos la mirada
El tiempo seguía corriendo hasta que el sonido de la campana se hizo presente relajando así un poco los nervios de ambos

– Mika ya vine por ti - en la puerta una energética castaña asomaba su cabeza mientras agitaba la cajita de su almuerzo
Yuu al verla no pudo evitar recordar lo sucedido por lo que su mirada hacia ella se volvió fría y de enojo

– voy - tomando sus cosas el rubio no se daba cuenta de las miradas asesinas que intercambiaban la castaña y el azabache

– nos vemos Yuu - dijo la chica mientras tomaba de la mano al rubio alejándolo del lugar

– tsk - fue el único ruido que salió de los labios del azabache, no sabía en realidad por qué se sentía así, era como un nudo en el estomago que le hacía sentir fatal

– sino cuidas a tu conejito será la presa de alguien más Yuu-san - como sino fuera suficiente con las emociones que luchaban en su interior llegaba su prima a molestar más de lo que ya estaba

Mientras tanto en la azotea el trío de amigos comía tranquilamente

– bueno cuéntanos ¿cómo van las cosas con el señor amargado?

– no le llames así, solo pasa por un mal momento

– como sea, ¿ya le dijiste que tus sentimientos son verdaderos a pesar de estar drogado?

– no puedo hacer eso el solo me ve como un amigo, más avance con el no puedo pedir - dijo con un deje triste en su voz que parecía romperse

– como soy una diosa bondadosa te ayudaré aún cuando tú no querías, a pero debes obedecerme y seguir la corriente de todo lo que haga

– está bien que más puedo perder - dijo con resignación

– por ahora debemos terminar de comer ¿les parece? - dijo chihiro con su sonrisa tranquila de siempre

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Bajando las escaleras repasando de nuevo el plan , el rubio pensó que no funcionaría ya que el azabache solo le quería como amigo
Llegando a la puerta del salón la castaña la abrió buscando a una persona en específico, efectivamente se encontraba ahí recostado en su mesa, era perfecto

– bueno Mikita me voy, te veré en la salida - dijo alzando la voz para llamar la atención del renegado que al escucharla solo puso una cara de enfado pero lo que más le molesto fue verla dándole un beso en la mejilla que sonrojo al rubio ante la sorpresa

– está bien te veré después - dijo tocando su mejilla para tomar asiento

De vez en cuando Mika miraba a Yuu por el rabillo del ojo sin poder descifrar su expresión, ¿era enojo? O ¿era desinterés? Realmente no lo sabía, quería preguntarle que sucedía pero su voz simplemente no podía salir, su garganta se cerraba involuntariamente, decidió que cuando al fin estuviera calmado hablaría con el y le aclararía el por qué de su comportamiento que estuvo bajo la influencia de las medicinas.
Las clases habían terminado, aún no estaba listo para hablar y tampoco quería que Yuu le hablase así que como el gran ninja que era trato de escapar pero no funcionó ya que una chica de grandes pechos le detuvo para dar un anuncio en la clase