4. Hair Styler

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- Vaya, vaya, ¿qué tenemos aquí? - el nuevo akuma debía admitir que tenía un estilo ¿peculiar? Su cabello un lado azul y el otro turquesa caía como cascadas a ambos lados de su cara; su traje azul rey, similar al mío pero con pequeñas tijeras negras al lugar de motas y un cinturón en su cadera con prensas para el cabello y una secadora-. Hora de que Hair Styler comience a darle un nuevo look a París.

- ¿Otra vez una situación peluda?-podría intentar contar cuántas veces Chat hace que ruede los ojos o golpee mi cara con la palma de la mano- Definitivamente me quedo con la secadora gigante de Evillustrador, esa no parece ser una amenaza.

Un aplauso para Chat Noir y su habilidad para hacer enojar a los akumas.

La secadora no era inofensiva en absoluto, con solo un botón, un rayo impactó directamente en el pelo de Chat Noir. Ahora estaba verde, el mismo verde que sus ojos.

- Debes admitir que combina con tus ojos- le dije riendo al ver su cara mientras observa su imagen en el báculo.

Tuve que concentrarme en la pelea de nuevo, las personas estaban siendo perseguidas por tijeras que buscaban cambiar el estilo del cabello por peinados extravagantes. Las tijeras de su traje se materializaban en tijeras reales.

Varias tijeras se dirigían a Chat Noir, perseguían a la chica quien hacía lo posible por no dejar que se acercaran. Había extendido su báculo para golpearlas.

El cable de la secadora se acercaba hasta donde estaba yo, estaba apunto de atraparme.

- ¿No quieres un cambio, Lordbug? Tu estilo es muy anticuado, los lunares pasaron de moda hace años- miró despectivamente mi traje- Bueno, no años, décadas.

- Hablas mucho Styler, creo que es momento de acabar con esto- la secadora me tenía atrapada no fui capaz de detenerla con mi yo-yo. ¡Perfecto! Ahora estaba siendo arrastrada por todo París por una maniática del pelo.

Terminamos encima del Arco del Triunfo. Traté de resistirme todo lo que pude.

- Claro que sí, Hawk Moth- la chica hablaba con alguien. Se acercaba cada vez más a mí y tocaba mis aretes con sus dedos- Eres presa fácil Lordbug, ¿sabías? Estos Miraculous serán míos, pero necesito primero que cierta gata aparezca para salvar a su bicho.

Una tijera salió de su traje y apuntaba directamente en mi frente.

- Cualquier movimiento y no querrás ver de lo que soy capaz, ¿oíste?- estaba intentando zafarme pero ahora estaba en una encrucijada. No quería que Chat llegara pero tampoco quería que mi cabeza fuera atravesada por una, muy filosa, tijera.

- ¿En dónde se habrá metido esa gata escurridiza?- Kitty, creo que será más fácil acostumbrarme si la llamo así, se acercaba lo más sigilosa posible por detrás.

Su vara se dividió en dos, una de sus partes impactó a la tijera que me apuntaba y la otra le dio a Hair Styler en la espalda. La akumatizada se distrajo y pude soltarme de su secadora. Podría tener una idea de donde estaba el akuma.

Kitty extendió su vara hasta la barbilla de la chica quien arrugaba la cara tras el impacto en su espalda.

- Te queda poco tiempo y si esto no se arregla rápido tendré que ir donde Jean Claude decía Kitty agitando su verde cabello.

La chica iba retrocediendo conforme Kitty avanzaba hasta quedar al borde del famoso monumento de París. Una tijera salió del traje rozando la pierna de Kitty, un hilo de sangre salía lentamente.

- Kitty, ¿estás bien?

- Sí, mi lord. Acabemos con esto de una vez por todas.

Comenzamos a luchar. Era bastante rápida, teníamos que evitar que los rayos impactaran contra nosotros. Kitty la distrajo para poder usar mi Lucky Charm, ya era demasiado tiempo y ocupaba curar la pierna de cierta gatita.

Hair Styler había bajado.

- Kitty usa tu Cataclysm contra el poste- mientras saltaba lo tocó, justo en el momento para dejar a la chica inmóvil.

- ¡Lucky Charm!- tiré mi yo-yo, irónicamente unas tijeras moteadas aperecieron en mis manos.

- ¿Nadie te dijo que no hay que correr con tijeras?- bromeó Kitty.

Salté del monumento y caí cerca de Hair Styler, quien se resistía. Tomé su secadora y corté el cable, la secadora de cabello que estaba volando aterrorizando a los ciudadanos cayó. La tomé y la tiré sobre el suelo. El akuma salió y lo capturé.

- Adiós mariposita - la mariposa blanca salió con rumbo desconocido -. Ladybug milagrosa.

Todo volvió a la normalidad, ayudamos a la chica y nuestros Miraculous comenzaron a sonar.

- Nos vemos en Notre Dame en unas horas Kitty- le dije a mi fiel compañera-. Ya tengo la información que necesitamos. Me gustaba más tu pelo verde- dije riéndome.

- Me lo teñiré si te parezco más irresistible - movió sus cejas y puso sus manos en las caderas. Mis clases habían funcionado.

Estiré mi yo-yo y salí del lugar.

***

- Llegas tempano, chatonne - me senté a su lado de nuevo en el campanario.

- No quería hacer esperar a mi Lord- estaba completamente inmerso en la ciudad- París es realmente hermoso, ¿no lo crees Ladybug?

- Sí que lo es Chat, sí que lo es- dirigí mi vista a donde Chat veía- Es hermoso cuando no hay akumas atacando- rió un poco.

Dejé que el silencio reinara un momento. Fue un día pesado para ambos y ocupaba acomodar toda la información para que Chat me ayudara. Tenía tantas esperanzas de que Rainbow o la nueva villana aparecieran, pero al parecer ninguna dio señales hoy.

Bufé.

- ¿Sucede algo bugaboo?- Chat salió de su trance.

- Realmente esperaba ver a Rainbow hoy...

- Yo también, pero, ¿tienes alguna idea de qué hacer?

Asentí. Inhalé un poco de aire fresco y le conté a Chat lo que Tikki me dijo esta mañana.

- Tenemos que buscar al Guardián de los Miraculous

- ¿El Guardian de los Miraculous?

- Sí- dije molesta. Chat y su costumbre de interrumpir- Al parecer es la persona que nos entregó los Miraculous, él o ella tiene conocimientos de todo lo que necesitamos saber y es momento de pedirle ayuda.

- ¿Cómo lo encontraremos?- preguntó.

- Curiosamente sé cómo encontrarlo, una vez me ayudó a curar a mi kwami...

- ¿Los kwamis se enferman?- al parecer el kwami de Chat no da mucha información, debo preguntarle a Tikki qué clase de kwami es.

- Sí- sonreí- Creo que podemos vernos el viernes al mediodía en la punta de la Torre Eiffel, de ahí te indicaré a dónde ir, ¿te parece?

Kitty asintió. Me puse de pie. La rubia me tomó de la muñeca.

- Gracias por la ayuda, Marin es realmente agradable- me dijo. «Lo sé, soy un completo amor», pensé y de nuevo fue inevitable reír, a lo que recibí una mirada de confusión de parte de la minina-. Yo espero que podamos volver a la normalidad pronto Ladybug.

- Yo también Chat- revolví su pelo un poco- Buenas noches- lo solté y me perdí en la bella ciudad del amor.

[PAUSADA] Ahora soy...¿Marin?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora