~Capítulo 15 ~
Si, leyeron bien. ;) Ian POV
Ian.¡Mierda! Me duele todo el maldito cuerpo, hago mi mayor esfuerzo por levantarme de la cama pero la cabeza me va a explotar. ¿Como llegué hasta aquí?
- ¿Ian? - escucho dos suaves golpes en mi puerta antes de que Rosa entre con una bandeja donde se encuentra un vaso con agua y una pastilla para el dolor de cabeza.
- Gracias - le digo después de que me la tomo - ¿A qué horas llegué a noche?
Ella me observó y negó con la cabeza.
- Llegó a las cuatro de la mañana, está volviendo a sus viejos hábitos ¿Qué está ocurriendo? - ella se sentó cerca mío y me observó, Rosa era como una segunda madre para mí, a pesar de que no llevo una mala relación con mi madre, ella se ha encargado de criarme desde que tengo memoria.
No podía mentirle, pero no quería aceptar las cosas.
- Nada Rosa, por lo menos nada de que preocuparse.
- Tengo que hacerlo, niño Ian hace más de ocho años que dejó el alcohol y me alegro por ello, pero se está dejando llevar de nuevo. ¿Por qué? Hace dos semanas lo vi en este estado, está es la segunda vez que lo veo así...
- Rosa - la interrumpo - no quiero hablar de eso, necesito ir a trabajar. Podría hacerme el desayuno ¿Por favor?
Ella suspiró y salió. Al levantarme de la cama no pude evitar el leve mareo por lo que tuve que volver a sentarme para recuperar la estabilidad, una vez más intenté dirigirme al baño para ducharme y quitarme este olor a alcohol que tenía encima.
Bajo las gotas de agua, cerré los ojos con fuerza tratando de recordar lo que hice anoche. Solo podía verla a ella y a nadie más, ella bailando, ella sonriendo, ella besándome. Tengo que controlar esto.
Ayer no pude evitar sentirme culpable por dejar a Emily en el estacionamiento del bar, la besé nuevamente y la dejé. Soy un idiota, pero soy aún más un cobarde. No puedo aceptar la realidad, aún no es tiempo, no lo merezco, no merezco a esa mujer.
Una vez con el desayuno que Rosa preparó para mí, lo devoré en menos de un segundo, mi estómago estaba reclamando comida.
- ¿Es por ella? - preguntó Rosa.
- ¿Qué?
- Vamos niño Ian, soy vieja pero aún soy capaz de entender las cosas. Y solo tengo que decirte que tienes que superar el pasado para vivir el presente y poder crear un futuro, las personas no esperan para siempre, la espera desgasta Ian. No alejes a las personas que intentan acercarse a ti o se irán de tu lado sin que te des cuenta y cuando lo hagas ya será muy tarde para recuperarlas.
- Rosa, no quiero hablar de eso. No sé de qué estás hablando pero no hay nada malo conmigo, solo estoy un poco confundido es todo.
- No estas confundido, solo estás negándote a las cosas.
- Me voy.
Sin decir nada más salgo de mi casa para dirigirme a mi empresa, necesitaba estar solo por lo que le dije a mi conductor que se tomará el día libre. En el trayecto enciendo el radio para distraerme un poco, pero no lo logró, todos mis putos pensamientos se dirigen hacia ella ¿Por qué? No puedo sentirme de esta manera, no puedo permitírmelo.
Al llegar a mi empresa, aún con pensamientos confusos intento con mi mayor esfuerzo por apartarlos y poner toda mi concentración en lo importante, el trabajo. Al llegar al último piso, con todo el profesionalismo del mundo saludo al personal, incluyéndola. Sé que me está observando, puedo sentir su mirada sobre mí, pero no soy capaz de devolvérsela.
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Mi perdición eres tú
RomanceSinopsis: Emily toda su vida ha crecido sin una figura paterna, ya que su padre abandonó a su madre, a ella y a su hermana menor que a causa de un accidente la dejó postrada en una silla de ruedas cuándo Emily tenía 10 años de edad, debido a ésto el...