Traición

Capitulo Uno

Dazai veía la escena que pasaba al frente de sus ojos y no lo podía creer. Nunca, en toda su vida se había esperado encontrarse con esta escena, ni menos que quién lo protagonizara seria Chuuya.

Su pequeño y adorable Chuuya.

Nunca se había imaginado que él lo traicionaría de esta manera.

No, se negaba a creerlo.

Lo más probable es que Chuuya lo estuviera acariciando, abrazando y besando por venganza a todas las bromas y situaciones incomodas que le hubiera hecho pasar durante toda su niñez y adolescencia.

Era una venganza perfecta.

Pero aun así Dazai negó, lo que estaba haciendo Chuuya no podía ser idea suya, tal vez Kouyou lo había convencido de hacer eso. Su perchero cascarrabias juraba odiarlo y que algún día lo mataría, pero aun así había aceptado ser su pareja hace casi un año atrás.

Aún en un estado de negación, Dazai miro a Chuuya y con voz que rozaba la delgada línea entre la cordura y la locura, dijo;

-Chuuya, tienes tres minutos para explicar esto.

El pelirrojo desvió la mirada, intimidado por el extraño tono que estaba utilizando su novio. No lo entiende, no debería desviar la mirada, no ha hecho nada malo.

-El tiempo corre Chuuya~

Tragando pesadamente, murmuro una breve respuesta.

-E-estaba solo...

Dazai mira fijamente al pelirrojo, sabía que la mayor parte del tiempo no era sincero con su perchero, pero entre las pocas personas que lo conocían, Chuuya encabezaba la lista de personas con las cuales intentaba ser más abierto. Así que pensó que era suficiente para que el pelirrojo nunca se atreviera a engañarlo.

Pero, sorprendentemente, se había equivocado.

Chuuya lo dejo pasar a su casa.

Su Chuuya le estaba prestando más atención a Él que a su momia suicida favorita.

SU Chuuya incluso lo estaba besando a ÉL, al frente SUYO.

Dazai nunca espero que su pequeño perchero lo traicionara de esa forma...

-¡Eso no es excusa para traerlo a tu casa!

...con un maldito perro.

-Dazai, solo es un perro.

El moreno iba a objetar cuando una voz hablo detrás de él.

-Si Dazai, solo es un perro, no es como que valla a robarte a Chuuya ¿Verdad cariño~?

-S-si Anee-san...

-Cállate vieja bruja, lo más probable es que esto sea tu culpa...-pensó Dazai, sin embargo lo que hizo fue sonreírle a la recién llegada y hablar con la voz más meloso que tenía y el cual sabía que la mujer odiaba.- Por supuesto que no Anee-san~ simplemente pensaba que ese perro al ser de raza no debería estar aquí, su dueño debería de estar buscándolo.

La verdad el moreno le hubiera gustado decirle algo que hiriera el orgullo de la estoica mujer, sin embargo era muy consciente de que Chuuya se alzaría a la defensa de Anee-san, y como estaba la situación, era mejor no enojar al pelirrojo.

-Bueno,- se consoló Dazai- apenas es un cachorro y es de raza, muy pronto vendrá alguien a buscarlo.

****

Cuando Chuuya le pidió que pegara los carteles en donde aparecía la foto del feo animal, junto con su descripción y número de teléfono, Dazai no dudo ningún minuto en aceptar, poniendo los carteles en puntos estratégicos donde gente que tendría ese tipo de perro estaría.

Pero su plan fracaso, nadie vino a reclamar al perro en los siguientes seis meses. Tiempo suficiente para que Chuuya decidiera quedarse con el perro.

Cabe decir que el día que el pelirrojo le dio esa noticia al moreno, este no dudo en tirarse del puente, pero desgraciadamente como siempre no murió, y lo peor, fue encontrado por el saco de pulgas que Chuuya había adoptado.

Fin del Capitulo Uno

¡Hola! ¿Que tal?

Yo aquí, con otra historia Soukoku, esperando que le guste y si es posible, que se rían (?). Y bueno, los dejo con datos curiosos que se que ignoran, pero que aun así me gusta poner. 

Datos Curiosos de Azuki: 

-El perro que encontró Chuuya, es un Lebrel Escocés. Es un galgo de tamaño gigante, que en los tiempos antiguos se usaba para cazar ciervos. (La razón por la cual en la portada no aparece el perro, es porque fue la única imagen que encontré a un Chuuya cariñoso y un Dazai molesto)

-La historia tendrá aproximadamente tres capítulos.