Alter Ego +18

I∵Te percataste de mi presencia

Dedicado a: Elizabethjdvj

Resumiré una historia muy larga...

Dos chicas. Tan mejores amigas que dicen ser gemelas.

Por cosas de la vida, el destino las separa por largos períodos... Pero ni tan siquiera eso es rival para su eterna amistad.

Tantos años pasaron juntas, jugaban, compartían e incluso lloraban. Dándose apoyo mutuo...

Pero un día una de ellas, la más joven, se enteró de algo extraño.

-¿Quién...? -La pregunta de la castaña quedó en el aire pero en su mente ocurría algo muy distinto.

-No te asustes... Siempre he estado contigo.

La chica sonrió, claro que ella ya sabía de su existencia. Su hermano de batalla, su compañero de juego, su cómplice de cosas malvadas; pero sobre todo, su guerrero contra la soledad de su hogar.

Su otro yo.

Su alter ego. Aquel que la hacía fuerte, valiente y la protegía de posibles daños.

Su nacimiento prometía muchas cosas buenas para la joven chica. Mas había un problema:

-Eres un maldito pervertido, Danniel. -bufó la muchacha mientras dibujaba la forma de su alter ego.

-Yo solo decía: ¡no me pongas bigote! No es justo Daiana. -Se cruzó de brazos.

-No seas nena, nunca dije que te iba a poner bigote.

-¿Entonces?

-Te voy a poner un poquito de barba.

-¿¡Barba!? No me jodas. Aunque... Sería bueno para las chicas. -La jovencita quebró la punta del lápiz por la presión ejercida.

-¡Ni creas que te dejaré ser atrevido! ¿Acaso no te das cuenta que usas mi cuerpo como puente para tus acciones perversas?

-Algún día, seré capáz de separarme de ti e iré a por todas esas chicas a las que me has ayudado a coquetear... -el joven hombre pone una cara perversa.

-¡No le pondrás el dedo a ninguna!

-Solo estaba bromeando, bella.

-Estamos unidos, idiota, sé que es mentira.

-¡Mierda! No te confíes Daiana... -el sujeto llevó su mano al mentón y pensó -¿No se hace tarde para ver a tú "gemela"?

La chica se levantó de golpe dejando la libreta sobre la mesa.

-¡Cierto! Vamos antes de que se enfade por llegar tarde.

-¿Aunque ella no sea puntual?

-Tsk, cállate... -Tomó su maleta y abrió la puerta saliendo de su casa.

Entonces en el parque...

Una joven de cabello castaño hasta las caderas, caminaba coqueta en el lugar que marcaba el centro del pequeño pueblo donde vivía.

Mientras veía que la persona que esperaba se tardaba optó por sentarse sobre una silla;  suspiró con pesadez y comenzó a textear en su teléfono.

-¡Vale! ¡Háblanos otro día! -gritó una chica castaña de rizos rebeldes antes de girarse ante la joven sentada sobre la banca. -¡Hola Annah!