Capítulo 36.- AHORA TÚ

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Era ya casi la hora de cenar cuando más o menos empezó a encontrarse mejor, por lo que habíamos decidido movernos de la cama al sofá. 

Estábamos sentadas cual indio en el sofá. Pensé que ya estaba un poco más calmada y quise preguntar que era lo que había pasado, ya por fin. 

-Alex... ¿te importa si te pregunto algo?

-Ya se lo que quieres saber Malú... Y si, se que tengo que contártelo. 

-Te escucho. 

-Verás... Como ya te había dicho, cuando llegamos aquí vi que Manuel había intentado contactar conmigo así que le pedí que me llamara... Nada más le cogí el teléfono me dijo textualmente 'lo siento Alex, Sofía me ha pedido que te lo cuente yo, que ella no puede hablar ahora' entonces me asusté. Si mi hermana no podía hablar ¿que es lo que ha pasado? Entonces me lo dijo. Me dijo que mi padre había muerto esa misma mañana. Entonces el mundo se me vino encima, por que mientras yo estaba de fiesta contigo, Pedro y demás  mi padre se moría. Y me di cuenta de todo Malú. Me di cuenta de lo poco que había disfrutado de el, me di cuenta de que había perdido a mi padre joder, que a pesar de que no hubiéramos tenido una relación muy buena no dejaba de ser mi padre...- noté como su voz se iba cortando cada vez más y sus ojos se llenaban de lágrimas, pero aún así quiso seguir hablando- Me arrepiento de no haberle dicho que lo quería y de no haberle tratado como a un padre. Pero sobre todo, de no haber podido hacer nada por salvarlo, ya que cuando yo estaba mal él estuvo ahí, y gracias a el sigo aquí... No puedo dejar de sentirme como una hija pésima por no haber estado ahí, tenía que haber estado...- Se echó a llorar y en ese momento yo también. Necesitaba hacerle saber que estaba allí con ella y que pasara lo que pasase, pero no pude hacer otra cosa que abrazarla. Apoyó su cabeza en mi hombro y allí estuvimos un rato hasta que más o menos consiguió calmarse. 

-Estas cosas no las podemos controlar Alex, no ha sido culpa tuya... Se que esto no te ayuda a olvidarte de todo, créeme que lo se, pero solo quiero que sepas que pase lo que pase voy a estar a tu lado, ya lo sabes. Superaremos esto juntas cielo, te lo aseguro.- La besé. Estuvimos un rato abrazadas hasta que finalmente nos decidimos por hacer la cena. Habíamos quedado en coger un avión a Vigo mañana por la mañana para reunirnos con Sofía y Edu así que teníamos que cenar pronto para irnos a dormir y levantarnos temprano mañana. 

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Narra Alex: 

Me desperté a las 8. Los rayos de sol entraban suavemente por la ventana. Hoy era el día de despedir a mi padre y la idea no me hacía especial gracia. 

Miré a mi lado y allí estaba Malú, aún dormida y tan preciosa como siempre.

Acaricié su espalda y le susurré al oído:

-Buenos días mi vida

-Buenos días pequeña

Le di un beso y fui a ducharme. 

Me puse esto:

Cuando estuve lista salí del baño y Malú ya estaba en pie ya vestida. Llevaba unos vaqueros rotos, una camiseta ancha y una chaqueta vaquera. Estaba guapa se pusiera lo que se pusiera. 

Era tarde así que no podíamos desayunar allí. Bajamos al coche, metimos las maletas detrás y nos fuimos camino al aeropuerto. 

Cuando llegamos Malú fue a hacer la cola para pasar el control ya que habíamos llegado justo a tiempo, y mientras yo fui a comprar algunas revistas y chocolatinas. 

Tocaba esperar un rato antes de coger el avión así que fuimos a una cafetería a comprar cafés. 

Cuando por fin subimos al avión ya no quedaba nada para llegar. 1h y 30 min. de viaje y estaríamos allí. 

Lo cierto es que no quería ir. Solo quería despertarme de aquella pesadilla y que todo volviera a ser como antes...

(...)

Llegamos a Vigo y fuimos a donde habíamos acordado con Edu. 

El tanatorio estaba un poco apartado de la ciudad así que nos llevaría algo de tiempo llegar. 

Cuando por fin llegamos lo primero que hice fue ir a verlo. Mirarlo me entristecía, pero aún así sabía que lo necesitaba. Saludé a mis tíos, a mis abuelos y también al que sería mi 'hermanastro' que por lo que supe más tarde estaban muy unidos. 

Saludé a Edu, pero no vi a mi hermana. 

-¿Y Sofía?- dije con la voz entrecortada

-Ha salido a andar. Tiene que estar por ahí, no creo que muy lejos.- me indicó un camino que más bien venía siendo monte. 

-De acuerdo, pues voy a ir a buscarla. 

Empecé a andar por aquel sendero lleno de árboles. No se en que monte estaríamos pero era bonito. 

Al final la vi, sola y con cara de pena. 

-Hey Sofi... ¿que haces aquí sola?

-A mis brazos hermanita...- sin esperar más fui a abrazarla. 

-Aún no me lo creo...

-Yo tampoco... Ahora si que estamos solas Alex, ya no nos queda nadie. 

-No Sofía, solas nunca y lo sabes. Anda, volvamos. 

Volvimos a donde estaban todos. 

Yo ya no podía más. Decidí que lo mejor era irme y así lo hice. Fui a buscar a Malú pero no la encontraba por ningún sitio. ¿Pero ahora donde se supone que está?

THE BIGGEST CHALLENGE OF LIFE IS TO LIVEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora