Prólogo

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—Jodete, no haré algo como eso. —

Sus palabras fueron claras y directas mientras negaba y miraba con enfado a su supuesto mejor amigo.

—Oh, vamos. Karen. No cuesta nada. —Insistió Alistair, quien tenía el título de mejor amigo.

—¿No cuesta nada? Son mis primeras experiencias. ¡Ni siquiera he besado! —

A sus dieciséis años de edad, Karen se consideraba virgen en todos los sentidos. Y ahora, mediante una apuesta que Alistair quiere realizar, podría estar a punto de perder todo aquello que la hace físicamente pura.

—En ese caso. Si yo gano. Tú... Tú ¡Tendrás sexo con un hombre y lo grabarás! — Exclamó como último recurso.

—Eso jamás. —

—Entonces no apostaré. —

—Lo que sea menos eso. —

Sonrió victoriosa mientras su amigo mascullaba entre dientes. Estaba sólo a unos pasos de que él quitara esa opción.

—Entonces no te entregaré mis primeras experiencias. —  Sus brazos se cruzaron alrededor de su cintura, a la espera de que él descartara aquella posibilidad. Miró como los ojos de Alistair mostraban una seguridad y decisión que nunca había visto, en ese entonces... Tragó con dificultad.

—Trato hecho. — Él aceptó.

—¿Qué? Pero... Pero, no. — Balbuceó mirándolo aterrada. ¿Dónde estaba la negación? No se suponía que él aceptara.

—Entonces, la apuesta es que si Marine logra obtener una A en su examen de matemáticas, tú ganas y haré lo que dices. Si no la obtiene, y sólo si obtiene C, automáticamente me declaro ganador y seré capaz de tomar cada cosa que no haz hecho y hacertela experimentar. ¿Correcto? —

—Te odio.— Fue lo único que dijo.

Confiaba en su amiga. Había hecho todo lo que podía y le consiguió que el mejor del curso le diera clases extras para tomar por segunda vez dicho examen. Y las dos semanas de esfuerzo debieron valer la pena. ¿Cierto? Sino era así, se iba a asegurar de no dejar rastro de aquel cadáver.

—Que bueno que lo dices. — Levantó la mirada hacia su amigo, quién señalaba hacia un lado. —Allí viene Marine. —

De inmediato, y sin que ella llegara a donde estaba, cortó la distancia cuando corrió , vociferando su nombre y preguntando cosas que nadie entendió.

—Dime que te fue bien. Por favor —entrelazó sus dedos, mirándola suplicante.

—Oh, ¡Por supuesto que me fue bien! ¡Mejor que en todas las materias! — Musitó totalmente feliz, pegando uno que otro chillido emocionada.

—¡Ja! Tenía esperanzas en ti. ¡Eres la mejor! —Señaló a Alistair — Tú. Mejor ve buscando la cámara. —Rió con gracia bajo la mirada analizadora de Alistair.

—Espera un momento. —

—¿Qué? No hay nada que esperar. ¿No escuchaste que le fue mejor que en todas las materias? —

Él simplemente le pasó a un lado ignorándola —¿Cuánto sacaste, Marine? —

Oh. Se había olvidado de ese detalle. Miró a la, en ese momento, pelirroja, no la iba a decepcionar. Gastó incluso dinero para aquella prueba, ya qué, nada es gratis en la vida y menos un tutor como aquel. También se sabía los puntos de examen que iban a salir, por eso, se cruzó de brazos y sonrió. Ya estaba ansiosa por ver aquel vídeo, incluso lo iba a subir a internet y buscar venganza por todo lo que él le ha hecho pasar, sólo tenía que escuchar la respuesta para celebrar la mejor apuesta de su vid...

—¡C+! — Chilló contenta, enseñando la hoja de examen.

—¿Qué?— De su boca no salió nada más, ni siquiera podía moverse.

Lo único que logró captar fue cuando Alistair se detuvo a su lado, y se acercó a su oído para susurrar unas palabras que la hicieron temblar.

—Ve preparándote completa. —

Luego de eso, él se fue. Unos segundos más tardes se encontraba acumulando su enfado para echarlo contra su tonta amiga.

Eso significaba... Que ella ¿Hasta tendría sexo con él?

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Y hasta aquí el inicio. Ojalá sea de su agrado y les den una oportunidad a éstos dos jóvenes.

Eso es todo. Gracias por leer.

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⏰ Última actualización: Jun 07, 2017 ⏰

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