Deleiteme _KaiSooMin [One Shot]

Deleitame...

Las gotillas de sudor bajan por su frente, cuello y pecho. Sus manos se aferran con fuerza a la cabecera, gimotea cuando el moreno le introduce su miembro con brío. Está a punto de correrse y el corazón le palpita con rapidez, bombeando más sangre con cada pulsación, atestando sus venas que presionan contra su cráneo. Siente su cabeza estallar mientras está a punto de experimentar el mayor placer de su mediocre vida.

Taemin se queja a punto de correrse y Kai a sabiendas, se detiene.

El rubio no puede creérselo, su culo se siente vacío sin el miembro del moreno. Se balancea hacia atrás y abre más sus piernas. Se restriega la polla dura y caliente contra su orificio, necesita el contacto. Liberarse, deshacer ese cosquilleo en el bajo vientre, la excitación en su cuerpo y el pequeño dolor en sus partes íntimas.

Y mientras Taemin es víctima del desasosiego, Kai sonríe al frente y KyungSoo le devuelve la mueca ampliamente. Se lame los labios con gusto y camina hacia ellos. El de cabello negro toma a Taemin de las caderas y lo hala hacia atrás con brusquedad, el chico se queja. Las ataduras le lastiman las muñecas, el dolor le recorre cada uno de los nervios de su indefenso cuerpo y sólo lo hacen más perceptivo a las sensaciones que lo invaden.

KyungSoo sube a la cama, se coloca justo al frente de Taemin y lo toma del cabello. Lo mira, es un chico bastante lindo y carismático y a él en especial le gustan sus ojos, el brillo que tienen... Entretanto, el rubio restriega la punta de su miembro contra la cama, ya que Kai no le toca y sus manos están atadas.

-¿Quieres que Kai te toque? -pregunta KyungSoo, su voz cargada de lujuria y expectación. Taemin asiente efusivo.

-Sí, por favor -ruega. Su cabello pegado a la frente y la boca entreabierta. KyungSoo se quita los boxer, la única prenda que lo cubre y tira con más fuerza de la cabellera de Taemin.

-Es muy injusto que sólo ustedes disfruten... - así que, tomando con su mano su miembro ya duro por la pasada sesión de sexo entre Kai y Taemin, lo dirigió a los rosados labios del rubio.

-Chupalo -le ordena.

Taemin lo mira por unos cuantos segundos y duda, pero Kai acomete contra él de una estocada limpia, abre sus ojos con sorpresa. También su boca, exhalando el aire contenido, emitiendo un gemido que es ahogado con rapidez por la longitud de KyungSoo. La pareja se mueve sin tregua, uno entra y el otro sale con un ritmo afín y tortuoso, a Taemin le cuesta respirar, tiene los nudillos blancos aprisionando las sábanas y todo el cuerpo tenso. Jamás se ha sentido así.

Kai se siente frenético, el culo de Taemin le aprisiona de una manera exquisita y la imagen de KyungSoo, gozando con el chico lo tiene eufórico.

-Deleitame, KyungSoo... -el aludido abre sus ojos y lo mira, mientras se adentra en la tibia boca de Taemin con insistencia -hazlo... ya... -gruñe.

El pelirrojo asiente y deja de moverse, Taemin respira con fuerza y se limpia los labios descaradamente. KyungSoo desata las cuerdas de la cabecera y los rodea. Kai levanta el pecho del rubio y este deja ir su cabeza contra su hombro, siente la incomodidad de sus hombros y brazos hacia atrás, pero Kai a su espalda, entrando y saliendo con parsimonia le despista de su malestar.

Está expuesto, Taemin se siente extraño bajo la mirada de KyungSoo, aún así se obliga a serenarse. Sólo es sexo, el mejor sexo de su puta vida, pero sexo a fin de cuentas. KyungSoo brica a la cama y se pone de rodillas, ambos se miran, hay duda en los acaramelados ojos de Taemin y fascinación en la mirada oscura de KyungSoo.

Siente como Kai se aleja y luego, su vista se oscurece por un segundo, el moreno desliza el pañuelo por su rostro y tira de las puntas, el trapo le lastima la boca y las mejillas y él se retuerce, le duele. Su mente queda en blanco cuando observa con horror como KyungSoo juguetea con una navaja, la pasa de una mano a otra y la hace girar entre sus dedos. El pánico lo invade.

Solloza y grita, pero el pañuelo y la fuerza de Kai lo callan. KyungSoo casi puede saborear su desesperación y eso lo ama. Porque ahí estaba ese chico, tan joven y lleno de energía y vitalidad, a punto de perderlo todo por su mano. La ansia lo golpea, desliza la navaja por el muslo desnudo del rubio y sonríe. Su rostro tierno y dulce se distorsiona para dar paso a una mueca sardónica y perturbada. Se carcajea cuando Taemin llora con desconsuelo, sabe que va a morir.

El pelirrojo se acerca al cuerpo tembloroso del chico y desliza la navaja una y otra vez por su pecho. Inserta lento y tranquilo la navaja en el vientre de su víctima y la desliza con rapidez hacia arriba. Kai lo mira con adoración cuando, sin mucho preámbulo, le corta el cuello de una manera limpia y fría, concluyendo su labor.

La sangre brota y recorre el blanquecino pecho del rubio, en sus últimos espasmos, la sangre salpica el rostro de KyungSoo y Kai suelta el laxo cuerpo del chico, ya sin vida. Acuna el rostro de su pareja y le besa los labios suaves y en forma de corazón que tanto adora, limpia con sus manos la sangre del rostro del pelirrojo y lo abraza. Se siente feliz, extasiado y satisfecho de ver a su pareja complacida con lo anterior. Su KyungSoo a vuelto a ser él mismo una vez más y Kai está dispuesto a hacer lo que sea para presenciarlo de nuevo, cuantas veces sean necesarias.

Sin embargo, aún falta algo. Sus cuerpos se contienen, esperan la liberación física y anhelan el contacto del otro. Kai lame la mejilla de KyungSoo y saborea la mezcla de sudor y sangre. Se sienta al otro lado de la cama, con las piernas abiertas y la polla apuntando al cielo, KyungSoo se manosea y se coloca de cuclillas, abre sus nalgas y se deja ir. Kai lo taladra con rapidez y gusto mientras KyungSoo se masturba con fuerza, sus manos inquietas viajan por todo su cuerpo y por el de Kai. Se besan con maña, sus lenguas luchan por el control y en una certera estocada por parte de Kai, el otro se corre. El moreno sigue con su faena mientras el pelirrojo es invadido por los espasmos del orgasmo, contrayendo su culo, logrando así que Kai explote.

Ahora KyungSoo le besa tiernamente, mientras mira su obra... y evoca el recuerdo de Taemin, la luz extinta de sus ojos y la vida que acaba de tomar.

-¿Repetimos?