Estaba recién levantado, mirando al vacío en mi habitación. Aún no podía entender lo que había sucedido la noche anterior. Tenía que ir a la comisaría, no podía quedarme tranquilo esperando resultados. La cafetería de Hydra había explotado a espaldas mias y de Hydra. Además habíamos encontrado un cuerpo de un hombre, en la parte de atrás de la cafetería. Sé que todo está conectado, es increíble. No, no podía quedarme de manos atadas, debía ir a la comisaría. Continúe con mis pensamientos, mientras me preparaba para dirigirme hacia mi trabajo.
Tenía que avisarle a Hydra, y no me gustaba para nada despertarla, quería que descansara. Había pasado una horrible noche, primero la cafetería estallaba y luego el muerto.
-¿Hydra?- Me encontraba llamándole y tocando la puerta de la habitación en la que se estaba quedando. Que abría de repente en esos momentos, mostrándome a una Hydra con grandes ojeras en sus maravillosos ojos café.
- Lamentó haberte despertado.-Me disculpe mientras continuaba, embelesado observándola.
-Ah, no no te preocupes, estaba despierta, casi no pude conciliar el sueño.- Comentó, dedicándome una sonrisa cansada.
-¿Que sucede, te vas a trabajar ya?- Continuó, observando mi traje para trabajar.
-Así es...Quería avisarte de que me iba a trabajar.- Informe, a la vez que me ponía mi típica chaqueta gris.
-Oh, bueno está bien.- Dijo ella, mientras me continuaba observando.
-Sabes que puedes tomar lo que quieras de la cocina... O de lo que sea. Bien, nos vemos o llegaré tarde al trabajó.- Me despedí dándole un beso en su mejilla.
-No te preocupes, está bien.- Menciono, siguiéndome hasta la entrada y despidiéndose así finalmente, hasta que me monte en el auto y emprendí marcha hacia la comisaría.
Dando así comienzo a mi día laboral, estando en la vía principal aérea, me decidí en tomar un desvío e ir al lugar donde se supone estuviera la cafetería, echa ahora una ruina. Estaba rodeada de la típica cinta amarilla, para evitar intrusos. Pasando esta cinta llegue al lugar donde había sido descubierto el cadáver y comencé a observar y mover escombros. Hasta que encontré algo extraño, era un pedazo de algún tipo de pantalla con la mitad de unos cables. Opté por guardarlo y al llegar a la comisaría se lo entregaría a uno de los muchachos para que investigarán de que se trataba.
{$}={$}={$}={$}={$}={$}={$}={$}Al llegar a la comisaría fui recibido rápidamente por mi androide "A125".
-Buenos días, jefe, deseo informarle primeramente, que lamento mucho lo ocurrido anoche y segundo creo que le interesará ver lo que están dando justo en estos momentos los noticiarios.- Termino su informe el androide, deteniéndonos así justo frente a una multitud de personas paradas frente a un cristal gigante en el cual se podía visualizar a un hombre engalanado hablando sobre uno de los más grandes mafiosos del mundo Anfiretres Serpens.
-"A125" ten lleva esto al laboratorio y cuando lo terminen de analizar que me lo devuelvan.- Ordene a la vez que buscaba en el bolsillo de mi pantalón la pantalla negra mientras continuaba mirando el noticiero.
-Si señor.- Acató mis órdenes el "125" para luego irse.
-*Según las fuentes de información, se dice que al mafioso, se le encontró en la mañana con una grave herida en su cabeza y contusiones en la zona del cuello. En estos momentos la policía se encuentra investigando, lo acontecido.*-
-No lo puedo creer...- Murmuró Heze, dejando de mirar hacia la gran pantalla y volviéndose a mi.
-Sabes que es lo mejor, que nos toca a nosotros el caso, se cree que está conectado con lo otros crímenes grandes que han ocurrido en la ciudad.- Continuó este, mirando fijamente a Mercurio, sacando un cigarro.
-¿El cuerpo ya a llegado?- Pregunte aún atónito por lo que acababa de escuchar.
-Si, está en los laboratorios, me tengo que ir el comandante me está llamando.- Se despidió Heze yéndose hacia la oficina del comandante. Mientras yo me dirigía a los laboratorios para ver el cuerpo de Serpens.
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-¿Andromeda, crees que podría pasar a ver el cuerpo de Serpens?- Pregunte a la chica, una vieja amiga que me a acompañado al igual que Hydra en malos momentos y en otros momentos muchos más físicos.
-Claro corazón, solo espera a que Barnard saque un poco de sangre del cuerpo para unos análisis.- Informó Andromeda levantándose de su silla y pasando sus brazos por mi cintura. A decir verdad me molestaba y me incomodaba cada vez que hacía esto en el trabajo, y ella lo sabía muy bien. Al igual que me molestaba que hablara mal de Hydra.
-Andromeda...No por favor, no empieces.- Le dije, mitras tomaba sus manos y las alejaba de mi. A lo que ella se iba a quejar, pero en ese momento salió el otro forense, momento en el que aproveche y entre al laboratorio. Encontrándome, rápidamente con el cuerpo, era impactante ver cómo los asesinó se volvían a la vez unos enfermos. En la cabeza de Serpens había un gran agujero del tamaño de mi puño, y podría incluso decirse que tampoco tenía cerebro, las demás heridas eran tontas, unos hematomas en el cuello y algunos rasguños en las piernas.
-Mercurio, el comandante Almurendi, desea que pases por su oficina.- Me informó Andromeda abriendo un poco la puerta y dejándola así hasta que yo saliera. Dirigiéndome a la oficina, y encontrándome allí a Heze con el comandante.
-Mercurio, que bueno que llegas, es muy importante lo que te tengo que decir respecto a lo de anoche al igual que espero que te lo tomes a bien por ti y tu amiga.- Decía Almurendi, poniéndose así tenso y desesperándome.
-Bien, ya estoy aquí, que es eso importante...- Comente yo observando al comandante que tomaba asiento frente a su escritorio y bajaba su cabeza para luego levantarla y lanzarle una mirada preocupada a Heze que desviaba su mirada del comandante a mi.-
-Mira, Mercurio el comandante cree que es lo mejor para el caso y para tu protección lo que te vamos a decir.- Continuó Heze mirándome fijamente.
-Yo, eh decidido, que tomes un tiempo de vacaciones a lo que se resuelve todo esto, recibirás tu paga como es común.- Hablo el comandante.
-¿¡QUE?! ¡NO PUEDEN HACERME ESTO!- Estaba totalmente enfurecido, no lo podía creer, me sacaban de mis casos. No me había fijado lo molesto que me encontraba, me había acercado y puesto mis manos en el escritorio de Almurendi, mientras continuaba gritando.
-¡Mercurio! Tienes que calmarte, encontramos residuos de la sangre del hombre asesinado detrás de la cafetería en el cuerpo de Serpens, por lo que a nuestro parecer están conectados los casos, así que por tu protección y por qué fuisteis víctima de uno de ellos, te daremos unas vacaciones de tiempo indefinido.- Informó Almurendi, poniéndose de pies y tomando una pose defensiva. Mientras Heze se ponía detrás de mí y me tomaba por el hombro para alejarme. ¡GRAN ERROR! No me gusta que me toquen cuando estoy molesto y menos si se trataba de un idiota como Heze. Luego de haberme puesto a pelear con Heze, pude sentir como algo tocaba mi espalda y comenzaba a darme descarga eléctrica. Por lo que me volteé y vi al comandante con una pistola de descargas eléctricas en sus manos. Al final...caí al suelo, lo que provocó que mi vista se pusiera borrosa hasta que perdí la conciencia. No sin antes escuchar al comandante decirle a Heze que buscará a alguien.
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Megaxia: Hermosa Criatura
Ciencia FicciónA principios de un nuevo milenio, donde la corrupción y el asesinato son la orden del día. Una serie de atroces crímenes fuera de lo normal, son llevados acabo alrededor del mundo. Hydra, la dueña de una cafetería y testigo de un gran crimen. Se un...