Esta Tarde

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Sangwoo estaba volviendo a casa desde el centro comercial, a donde había ido a comprarle un regalo a Bum por estar con él dos meses ya.

Al llegar, se encontró la puerta principal rota con muchos agujeros enormes. Cuando entró, llamó el nombre de Bum y nadie respondió.

Al fijarse en el suelo, vio varios charcos pequeños de sangre. Volvió a gritar, y pasó lo mismo. Pensar que se había escapado lo estaba poniendo histérico, se gastó dinero en comprarle un regalo a un ******, para que luego se escapase.

Rápidamente fue hacia la habitación o cobertizo, pegado a la casa por detrás, en donde guardaba los ordenadores que estaban conectados a las cámaras del interior que grababan lo que ocurría cuando él no estaba. Dentro y acomodado en su silla giratoria, puso el último vídeo grabado.

(VÍDEO)

"Todo estaba normal, hasta que se escucharon golpes en la puerta desde fuera. Bum llegó lo más rápido que pudo, aunque le pareció raro que Sangwoo tocara porque él siempre abría con el código.

Preguntó quién era, y alguien respondió que era un amigo del propietario de la casa. Y le pidió que le dejase entrar. Éste se negó, no quería imaginar lo que le haría Sangwoo si lo llega a hacer. La voz de fuera se lo volvió a pedir, y Bum seguía negándose.

Cuando pensó que se había ido el tipo y se disponía a volver al sótano, de repente, vió como un hacha atravesaba la puerta por un agujero, hecho con la herramienta. No sabía porqué, pero no se podía mover, sólo miraba como hacía más agujeros grandes, y aparecían más personas por ellos.

Cuando los cuatro que estaban fuera entraron, Bum recuperó un poco la respiración e intentó huir, pero el del hacha lo agarró con fuerza y le golpeó en todas las partes en donde veía vendas o moretones. Bum medio aturdido dejó de resistirse y el chico lo cargó en un hombro con facilidad y subieron todos hacia el piso de arriba..."

Sangwoo observaba por la pantalla cómo hacían todo sin expresión ni pensamiento alguno.

"Tiraron a Bum al suelo duro y frío de la habitación. Aunque no se podía ver bien, se distinguían algunas sombras; dos de ellos eran un poco robustos y altos, uno que no paraba de reírse, bajo y muy delgado y el último quien cargó a Bum, tenía una figura parecida a la de Sangwoo.

Entre ellos desvistieron a Bum que poco a poco iba reconociendo las caras que sí podía ver.

-Acabaremos lo que no pudimos terminar aquel día.

¡Eran los chicos que intentaron violarlo en el ejército! Que no pudieron gracias a Sangwoo.

Sin decir nada más lo violaron entre los cuatro..."

Sangwoo seguía viendo el vídeo, y escuchaba las súplicas inservibles, jadeos y gritos de Bum, hasta que se cansó y apagó el monitor. Giró su cabeza hacia la que estaba grabando en directo esa misma habitación, y pudo ver que sí seguía vivo.

Sangwoo se veía muy indiferente, pero por dentro se estaba muriendo de placer pensando en mil maneras de acabar con los cuatro -intrusos-.

Una Tarde (KILLING STALKING) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora