Antes de leer les advierto que es un lemon, hay escenas super hot(ok..no tanto).
Pero es un regalo de una amiga por mi cumpleaños, se los dejo asi lo lean...y si les gusta voten por favor.
El nombre de la historia lo elegi yo...ya que amo a Seo EunKwang de BTOB.
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Señora Seo
"Todas las noches lo soñé...Con ir al altar vestida de blanco....Y que tú tomaras mi mano...."
-Puede besar a la novia-dijo el cura.
Me preparé para el momento más esperado...
Había pasado más de un mes desde la última vez que tuvimos algún tipo de contacto...
La boda tan esperada había llegado... Mi boda con Seo Eunkwang, el hombre de mi vida...
Al que tanto amaba....
Anhelé tanto este maravilloso día. Y lo extrañaba... necesitaba ver su rostro de niño pequeño... su hermosa sonrisa que alegraba mis días... Su famoso aeygo, que sus amigos odiaban pero yo lo amaba, me hacía reír mucho.
Su voz al teléfono me acompañaba todas las noches, preguntándome como fue mi día, con quién estuve almorzando... y si ese acompañante fue un hombre. Mi EunKwang es muy celoso...
El trabaja en una de las empresas más importantes de Corea, y era una de las razones por la que viajaba muy seguido y más un mes antes de nuestra boda, quería terminar todo lo antes posible así podría pasar tiempo conmigo... y más en nuestra luna de miel.
"Depositando en mí, tus cálidos labios....Que iluminaron mi ser...En este día tan esperado"
Eunkwang me tomó suavemente de la cintura y con su mano libre tomó mi rostro depositando en mis labios el beso tan esperado.
Fue solo un rose, aunque no tardó en abrir más su boca y tratar de profundizarlo, a lo que me separé con una sonrisa.
Los invitados comenzaron a aplaudir muy fuerte, a nosotros los recién casados.
-EunKwang...te dije que el beso tendría que ser dulce... algo simple, para la foto- le reproché en un susurro mientras lo abrazaba.
-Lo intenté... pero tus labios son muy... tentadores-me contestó mientras reía.
Todos los invitados se acercaron a saludarnos, y de mala gana di el primer paso para separarme de EunKwang, pero tomó mi mano entrelazando nuestros dedos.
-Quédate cerca y no me sueltes... ya te tuve lejos un mes...
Un mes que me pareció un año...-oo-
El lugar era el más grande que encontramos en todo Seúl... La organizadora se encargó de toda la decoración... desde las luces, la música y los murales con nuestras fotos.
Todos los invitados se encontraban ubicados en sus respectivas mesas, adornadas con delicados manteles azul marino, las sillas forradas del mismo color con un delicado lazo.
Me separé de EunKwang, mientras él saludaba a los invitados yo aprovecharía el momento para cambiarme el vestido por uno más cómodo.
Me dirigí hacia el cambiador saludando en el camino a mis amigas.
-Luces tan linda- me dijo una de ellas-Y tu esposo... está tan...mmm
-¿Irresistible...? –Le pregunté mientras le daba una mirada a EunKwang, mi hombre perfecto... que no tardó en devolverme la mirada y sonreírme-Debo cambiarme chicas..., dentro de un rato vuelvo...
Llegué a paso rápido a la habitación, cuando me disponía a cerrar la puerta, aparece EunKwang tomándome de la cintura y con su pié cerrando la puerta.
-Shhh- me hace callar-Necesito que estemos a solas... solo unos minutos- y se aventuró a tomar por sorpresa mis labios.
Sentí como sus manos viajaban hasta mi cintura, acariciándome suavemente en ese lugar.
Adentró su lengua de a poco en mi boca y exploró en ella... un deseo en mi creció... La abrí mucho más, invitándolo por más.
Envolví mis brazos en su cuello y acaricié su pelo.
-EunKwang...-susurré entre besos- Necesito... cambiarme... Ya! Déja...me
Se separó un poco y sonrió para volverme a besar, a lo que no me resistí... Al segundo decidí separarme y agarrar mi vestido celeste que estaba colgado en el mini placar.
Me di media vuelta y vi a EunKwang con un gran brillo en sus ojos y su pecho subía y bajaba.
Reprimí las ganas de reír que tenía... Si bien había pasado un mes desde la última vez que estuvimos juntos... aunque quisiera... este no era el momento adecuado... y más si los invitados nos esperaban.
Dejé el vestido en el sillón y me volví hacia mi esposo.
-¿Me ayudas con el cierre?-le pregunté señalándole mi espalda-Y después... te vas...
Sin decir una palabra se acercó a mí, me corrió el cabello a un lado y bajo muy lentamente el cierre.
-Gracias-le dije sonriendo-Ahora te tienes que....
No me dejó terminar, me abrazó por detrás y depositó un beso en mi cuello.
-EunKwang...
Me abrazó por detrás y un camino de besos se extendió desde mi lóbulo el cual mordisqueó y volvió a bajar hasta mi cuello.
-No...podemos- suspiré del placer que me estaba provocando- Puede...entrar...alguien...
-Que entren...-me susurró sin dejar mi cuello.
Y en ese momento escuchamos en golpe en la puerta. Intenté separarme de él, pero no me dejó, no me quedó de otra que preguntar quién era.
-¿Si?
-Soy Sungjae! ¿Sabes dónde puede estar Eunkwang?
-No!-negué rápidamente.
-Ah! Hace un buen rato que no lo veo... Nuna! No lo tendrás escondido...
-No... me estoy cambiando de vestido Sungjae...-EunKwang cortó mis palabras al volver a besar mi cuello.
-¿Nuna?-preguntaron del otro lado de la puerta.
-EunKwang...detente...-le susurré.
Me llevó con él hacia el sillón, sentándome en su regazo... y bajando mi vestido en el acto.
Una suave risa se escuchó de Sungjae, seguida de una tos.
-No importa Nuna... ya sé donde puede estar-y volvió a reírse... como si no lo escuchara-Nos vemos Hyung- y se retiró.
-EunKwang! -Le grité enojada- ¿Por qué haces esto?
Sonrió tomando mis mejillas con sus manos.
-¿Hacer qué? ¿Esto?- y depositó un beso en mi boca- No te enojes... te ves aun más linda cuando lo haces... y me hace querer secuestrarte...
Intenté levantarme antes de que EunKwang intentara algo que yo no me podría resistir. Tomé su mano y lo encaminé hacia la puerta.
-Vete...Sungjae ya nos descubrió.
-¿Y? Ya no es un niño... Sigamos...-dijo sonriendo y haciendo cara de niño pequeño.
-No...-coloqué mi mano en su pecho impidiendo que se acercara-Necesito cambiarme de vestido... Así que te veo en la fiesta.
-Ok...-me reprochó frustrado saliendo de la habitación.
5 minutos fueron los que tardé en cambiarme, abrí la puerta y EunKwang ya se encontraba parado dándome una de sus cálidas miradas.
-Te tardaste mucho-tomó mi mano y comenzamos a caminar por el lado contrario a los invitados.
-Eunkwang... ¿A dónde vamos?-le pegunté inquieta- La fiesta es para el otro lado.
Acercó sus labios hasta mi odio y con voz seductora me dijo:
-Quiero... nuestra propia fiesta privada...
-EunKwang...no podemos...
-Quiero hacer...el amor.
Me giré y le di una mirada de sorpresa y deseo... Hace un mes que no teníamos ningún tipo de contacto físico, necesitaba tenerlo conmigo.
-¿Ahora?
-Si... Ahora-y rozó sus labios en mi mejilla- Ven...
Al otro lado de la salida había una puerta... La abrió y encendió la luz que estaba a un costado, había muchos productos de limpieza, nos adentramos y cerró la puerta con seguro.
-¿Por qué hay un seguro en un cuarto de limpieza?-le pregunté extrañada.
-Mmm... para que la señora de limpieza... ¿Tenga privacidad?- tomó mi cintura pegándome a su cuerpo, rodeé su cuello y acerqué mis labios a su oído.
-No creo que la señora de limpieza tenga sexo aquí...
-Nunca sabes lo que haría la señora de limpieza... a parte ni la conoces... y yo tampoco... ¿Por qué nos ponemos a hablar de la señora de limpieza?
-Tú sacaste el tema EunKwang -le dije sonriendo- Y ahora... en qué estábamos...
Él me devolvió la sonrisa y me acercó más cerca de él.
-Me costó tanto... este último mes estar lejos de ti...-dijo mirándome a los ojos-Nunca más quiero que nos separemos...
"Con simples palabras llenaste mi corazón...El mismo corazón que llenaste con tu dulce amor..."
-Quiero hacerte el amor....
-Hazlo...-
Su boca devoró la mía en cuestión de segundos. Me había vuelto adicta a sus labios... su sabor era como una droga que me hacía querer mas y perder la cabeza. Adentró su lengua en mi cavidad haciéndome suspirar y querer mucho más.
Con su mano libre tomó mi muslo masajeándolo... y me subió hasta sus caderas, enrollando mis piernas en él, sin parar en ningún momento el beso.
Me pegó contra la pared y su mano fue lentamente adentrándose en mi vestido, pasando por mi muslo hasta mi cintura, subiendo y bajando.
Con su otra mano tomó el cierre de mi vestido y lo fue bajando rápidamente.
Su boca dejó la mía dando besitos en mi cuello.
Fue subiendo mi vestido y lo sacó por la cabeza, tirándolo al piso.
Saqué su saco y desprendí su camisa blanca, la abrí y recorrí con mis manos su torso, bajé hasta su abdomen. Desabroché su cinturón y cuando iba bajando su cierre, él tomó mi mano.
-Aún no...- me susurró entrecortadamente sonriendo y desabrochó ágilmente mi sostén, liberando mis senos, y no tardó en apoderarse de uno de ellos con su boca y el otro masajeándolo con su mano. Lo mordió y chupó dulcemente logrando suspiros por parte de mí.
-Eun...ahh
Sentí humedecerme, ya que su entrepierna rozaba mi intimidad y notaba su miembro muy hinchado.
Dejó mis senos para tomar mis bragas a lo que sentimos pasos acercándose al lugar en donde nos encontrábamos.
Me bajé de mi esposo y rápidamente nos comenzamos a poner la ropa.
-Maldición...-susurró EunKwang.
Al segundo golpearon la puerta.
-Hyung...Nuna...-se escuchó-Dejen de hacer cochinadas ahí! Sus gemidos se escuchan fuertes... muy fuertes...-rió Sungjae
Eunkwang me dio una mirada avergonzada.
-Esperemos... a nuestra luna de miel...-le dije dándole un beso en la mejilla.