“Nuestro lugar secreto”
Ese día en la mañana Justin había acomodado su habitación e incluso la casa entera para causar una buena impresión a Melody, incluso le dijo a Jazzy y Jaxon que sí se portaban bien les regalaría un juguete a cada uno.
Volteo a ver a Melody, se veía muy hermosa y sencilla con lo que llevaba puesto, un lindo crop top holgado blanco con flores rosas y azul aguamarina con unos jeans azules claro y unos tacones color rosa, su cabello estaba como siempre, lo que la hacía aún más única de las demás, no le importaba llevar el mismo peinado todos los días, eso era lo que le encantaba a Justin.
Estaciono el coche enfrente de la casa y le abrió la puerta caballerosamente a Melody, ella le agradeció con una tímida sonrisa y camino a su lado para abrir la puerta.
La castaña abrió la boca sorprendida la ver la hermosa y lujosa casa en la que se encontraba, llevo una mano a su boca sorprendida y Justin río.
—¿te gusta?
—tu casa es hermosa, Justin—dijo ella sonriendo
—es bueno saberlo—dijo el riendo, ella lo acompaño ya que ella dijo lo mismo cuando Justin fue por primera vez a su casa—tenía una pregunta para ti
—¿cuál?
—¿te gusta la música?—cuestiono con una sonrisa amplia
«Se ve hermosa sonriendo» Negó levemente para quitar ese pensamiento y sin que Melody se diera cuenta.
—si, ¿por qué?
—tengo una sorpresa para ti—ambos sonrieron.
Sus miradas estuvieron conectadas varios segundos hasta que Melody se separó “incomoda” más bien, avergonzada.
—deberíamos comenzar para darte tu sorpresa a tiempo—sonrió—ven, arriba está el cuarto de estudio.
Justin tomo tiernamente la mano de Melody para guiarla por las escaleras al dichoso cuarto de estudio, entraron y manos se sentaron. Justin comenzó a explicarle los ejercicios del día de ayer y hoy, los explico y puso a Melody a resolverlos. Justin sonrió enamorado, Melody era inteligente, y si se aplicaba podría llegar a ser igual de inteligente que el, solamente que se distrae con cualquier cosa, puede pasar un avión de papel y Melody lo ve como si fuera la cosa más interesante del planeta, por esa misma razón se retrasaban y Justin se enamoraba más de ella.
«¿Enamorar? No, ni loco»
Cuando terminaron Justin amarro un lindo listón en los ojos de Melody para mantener mas interesante la sorpresa, manejo tratando de evitar las preguntas de Melody hacia dónde iban y de qué trataba, no le quedaba de otra mas que reír ante la inocencia de su chica.
«Mi chica, que lindo suena eso» sonrió.
—¿ya?—Justin sonrió
—si, bonita, ya llegamos—estaciono el coche y bajó para abrir la puerta de Melody.
Tomo su mano y tiernamente enlazo sus dedos con los de ella para guiarla a la sorpresa, Melody sonrió. La guió y cuando llegaron se coloco detrás de ella.
—sorpresa...—susurro quitando la venda.
Melody abrió sus ojos y sonrió emocionada. Era un estudio de graduación con todos los instrumentos musicales posibles, sonrió y abrazo fuerte a Justin que se sintió enternecido por la acción de la castaña.
—será nuestro lugar secreto—soltó la mano de Melody y coloco una llave con un llavero con una M plateado y con brillantes rosados—es tu llave, para que vengas cuando tu quieras o necesites cantar—sonrió y Melody lo abrazo fuerte—es nuestro secreto—sonrió.
—¿puedo tocar el piano?
—adelante—dijo mientras se sentaba en una silla frente a los controles.
La castaña entro a la cabina y se sentó en el banco del piano, y comenzó a tocar hermosas melodías, Justin sonrió.
«Melodías como Melody, ya entiendo»
Coloco los controles de manera que el pudiera escuchar lo que ella cantara dentro de la cabina, se quedo anonadado y a la vez enamorado de su voz, sonrió al verla tan centrada cantando mientras tocaba el piano. Se levantó se la silla y entro a la cabina, se sentó junto a ella y comenzó a tocar una alegre melodía, Melody río, quiso tocar una y la instante su mano hizo contacto con la de el haciendo que Justin sonriera y su corazón palpitara tan rápido que creería que rompería su caja torácica.
«Creo que me he enamorado» Admitió mentalmente con una sonrisa.
“¿Celoso?”
El viernes en la escuela Melody llego con una amplia sonrisa a la escuela, había estado toda la semana viendo a Justin y escondida en el estudio de grabación. “Su lugar secreto”.
Abrió su casillero y se vio al pequeño espejo de la puerta, para haber escogido algo sencillo se veía hermosa.
—¡Mel!—se incorporó al escuchar la voz de Jai del otro lado del pasillo llamándola, no estaba sólo. Luke la saludo—¿qué onda? Te mande un mensaje ayer y no contestaste, fuimos a tu casa y tu mama dijo que habías salido
Recordó el estudio y las palabras de Justin, “será nuestro secreto”, sonrió inmediatamente.
—Fui a recorrer Stratford—mintió.
—Hubieras llamado y te acompañaríamos
—a la próxima—cerro su casillero y camino junto a los gemelos
—últimamente has pasado mucho tiempo con Bieber
«¿Celoso?»
—¿celoso, Jai?—pregunto Luke bromeando, Melody río
—¿Qué? Claro qué no, sólo que, nosotros nos hicimos amigos tuyos antes y...
—ella puede tener los amigos que quiera, hermano—dijo Luke riendo—sólo que cuidado con Bieber, no queremos que te lastime
—tendré cuidado—dijo Melody sonriendo y entro a la clase de Literatura sonriendo.
Justin sonrió ampliamente al ver a Melody entrar al aula sonriendo con esos adorables hoyuelos y tan tierna como siempre con su linda blusa y su falda dejando al descubierto sus lindas y delgadas piernas que la hacían ver alta con esos tacones color beige.
—hola, Justin—sonrió
—bonita—saludo—¿cómo estas?
—estupendo—sonrió ampliamente—gracias por lo de ayer, saque bien el ejercicio de Álgebra
—eso me agrada—le guiñó el ojo y Melody sonrió tímidamente—¿lista para hoy?
—¡más que lista! Sólo que hay un problema—jugo con sus dedos inocentemente—Soy pésima jugando bolos, sólo he jugado una vez en mi vida y creo que no se jugar muy bien
—eso se arregla—sonrió coqueto—yo te ayudare
—¿eso no será trampa?
—no—sonrió—sólo te ayudare
—bien
—por cierto, estoy leyendo ese libro que me haz recomendado, es fascinante—Melody sonrió
—¿te esta gustando?
—si, es demasiado...
—jóvenes, ¿algo que quieran compartir con la clase?—dijo la maestra interrumpiendo su conversación y todos se voltearon a ver a los adolescentes.
—no, señorita
—entonces guarden silencio—Melody sonrió y Justin le guiñó el ojo riendo levemente.
«Esos ojos cafés serán mi perdición, ¿y qué con los hoyuelos? Con ganas de besar esos lindos cachetes» Pensó Justin cómicamente.