Un chico con secretos

Capítulo 1

La mañana era tibia. Algunos rayos de luz se colaban por la persiana del cuarto de Sharon y daban directamente en sus ojos, sin embargo, eso no le impedía seguir durmiendo. La tranquilidad en su habitación era muy reconfortante y la incitaba a seguir durmiendo mucho más.

Un molesto pitido se escuchó al lado de su cama. Era su reloj despertador.

-Maldita sea...- Pensó, despertándose poco a poco.

El pitido continuaba constante en sus tímpanos y aseguraba no dejar de sonar hasta que Sharon lo frenara. Así que se levantó y apagó el reloj. Acto seguido se desperezó y frotó sus ojos para quitar las legañas. Estos, aún adormilados, trataban de mirar fijamente a una parte para mantenerse abiertos, pero sólo lograban cerrase o perderse en el infinito. Realmente estaba cansada. Su traslado de Los Ángeles a París no había resultado para nada relajante y emocionante como cualquiera pensaría.

Todo el trámite del avión, trasladar las cosas y encontrar su nuevo apartamento había sido exhaustivo. No pudo ubicarse con facilidad por las calles, y las clases de francés parecieron inútiles en momentos en los que preguntaba dónde quedaba una calle o lugar (le había sido muchísimo más útil hablar en inglés o simplemente hacer señas para tratar de decir algo).

Luego de haberse perdido y dar vueltas en círculo por más de media hora, por fin había conseguido llegar a su pequeño pero acogedor nuevo hogar; una pequeña casa en la esquina de la intersección de la Avenida Silvestre de Sacy y la Avenue Elisée Reclus. Era algo moderna pero conservaba aspectos de arquitectura victoriana. Sus pilares de mármol blanco contrastaban drásticamente con las ventanas de vidrio polarizado y sus marcos de acero dorado. La puerta era negra y se abría con una tarjeta eléctrica, y se cerraba con la huella de su dedo índice.

Todos los electrodomésticos en ese lugar estaban tan modernizados que ni siquiera tenía que mover un solo dedo para preparar café. La máquina a control de voz, lo hacía al pronunciar Au chocolat. Era algo extravagante para Sharon, sin embargo, le encantaba. Además, la casa conservaba en ciertos sentidos su aspecto victoriano de hacía (seguramente) unos 50 años, así que eso le hacía un justo balance.

Sharon miró el reloj casi sin ganas y al ver la hora, se dio cuenta de que se le hacía tarde para llegar a la escuela. Trató de arreglarse lo mejor que pudo y salió corriendo con una tostada francesa en la boca por las calles de París.

La escuela Françoise Dupont, era un lugar grande y excéntrico. Con sus paredes color crema y sus grandes ventanales exhibidos por todo lado. Los pilares de aspecto victoriano se desplegaban imponentes entre las esquinas del lugar y el suelo pulcro relucía con cada paso que Sharon daba.

Aunque le hubiese gustado seguir admirando la belleza de la que sería su nueva escuela, Sharon rápidamente se dirigió hacia su aula y, con el apuro que llevaba sin querer se llevó por delante a una chica que también entraba corriendo. Sharon solía ser algo torpe a veces y casi nunca prestaba atención a lo que le rodeaba, por eso era algo común para ella ir tropezándose o estrellando a cualquier cosa que se le atravesara. Ambas cayeron al suelo en un gran estruendo y toda la clase volteó a verlas.

-¡Hey!-Gritó la chica al sentir el frío suelo en su espalda-. ¡Ten más cuidado!

- Perdón- Dijo Sharon, poniéndose en pie rápidamente para ayudar a la chica. Extendió la mano hacia ella y ambas caminaron hacia sus asientos avergonzadas por las miradas de todos. Unas de burla y otras de confusión.

Sharon se sentía como una alienígena entre todos esos chicos nuevos. En Los Ángeles también había tenido amigos, buenos amigos. De hecho, aún seguía hablando con ellos, pero no era lo mismo mandarse un mensaje que tenerlos cerca en carne y hueso. No era lo mismo llamarlos que hablar con ellos cara a cara, poder divertirse juntos y comer... Todas esas cosas que los amigos hacían, no eran lo mismo sin ellos, y eso le causaba tristeza y le hacía sentirse sola. Sin darse cuenta, Sharon logró sentarse en un asiento al final de la clase al lado de un chico de cabello rojo largo y ojos zafiro, él estaba dibujando y parecía realmente concentrado, sin embargo Sharon pensó que sería demasiado grosero no saludarlo el primer día si iban a compartir asiento todo el año.

-Hola- Le dijo sonriendo y colocándose de medio lado, dirigiendo la mitad de su cuerpo a él.

-Hola...-Murmuró el chico, distraído. Pasaron unos segundos de silencio hasta que él se dio cuenta de que realmente había alguien a su lado y, al hacerlo, rápidamente escondió los dibujos en su mochila y trató de sonreír calmado. Fue un intento fallido-. Soy Nathaniel Kurtzberg, un gusto.

-Soy Sharon Alamel- Respondió ella, ofreciéndole la mano izquierda-. Un placer.

Él miró su mano y sonrió, esta vez de forma sincera. Se la estrechó con delicadeza y la movió de arriba abajo. Luego, se giró hacia la pizarra.

-El placer es mío- Dijo, aun sonriendo y recostando su mejilla en la mano derecha.

Sharon también sonrió y sacó su cuaderno de apuntes de su mochila. Nath, pensó alegre, sin duda él sería su primer amigo en la escuela. Espero no le moleste que lo llame así.

La maestra llegó unos diez minutos después y las típicas presentaciones de principio de año empezaron.  

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.NOTA IMPORTANTE. LEER CON ATENCIÓN SI ERES SEGUIDOR DE ESTA HISTORIA.

Sé que van a querer matarme y créanme que yo también quiero hacerlo... Sin embargo, no me sentía para nada cómoda con esta historia, así que prefiero empezar a volver a hacerla de cero y editarla muchísimo mejor con el tiempo y la atención que se merece.

La empecé hace casi tres años y la verdad, nunca le dediqué el tiempo que merecía (valga la redundancia). Pensaba que por ser un fanfic podría hacer cualquier ridiculez y a ustedes les iba a gustar, puede que a algunos si, puede que a otros no, pero en lo personal, yo odiaba la forma en que trabajaba esta historia. 

Me puse a leerla con cautela y me di cuenta de que en muchos capítulos dejaba cabos sin atar o ponía cosas demasiado irrelevantes o ridículas para leer. En muchas ocasiones me dio pereza leer y casi ni puse atención a lo que decía. ¿Eso les causaba a ustedes? ¿O tal vez otro tipo de sentimiento? (Déjenmelo en los comentarios). Es por eso que he decidido hacer grandes cambios a la historia:

-Ya no será una historia de ____ y Adrien, sino que la protagonista tendrá un nombre. 

-Como se pudieron dar cuenta en este capítulo, también añadí más descripciones geográficas y un mayor enfoque en los sentimientos de los personajes. 

-Cambié el narrador de protagonista a omnisciente y traté de hacer el capítulo más largo. 

¡Así es como debería haber sido siempre! No tienen idea lo infeliz que me sentía con esta historia con tantas cosas por corregir y quitar. Desde hace muchísimo tiempo que lo sabía, pero el miedo de que ustedes dejaran de leer la historia y la resaca inspiracional me detuvieron cantidad de veces. Pero ya no será así. Les prometo que de ahora en adelante la historia estará mejor trabajada y será más agradable para leer. Soy una persona muy perfeccionista y por eso me gusta que todo tenga un orden y un hilo (y sobre todo buena redacción y ortografía en las historias). Lo único que no puedo prometerles en este momento es que publicaré los capítulos con regularidad. No tendré horario o les diré qué día publicaré nuevos capítulos... Simplemente empezaré a editar muchísimo y conforme vea los capítulos y estos me gusten, los iré publicando. Perdón si esto no les gusta, pero en este momento soy incapaz de darles otra forma de leer la historia (A propósito, también cambiaré el título de la historia, así que si tienes alguna idea en mente no se te olvide dejarla en los comentarios).

De verdad lamento muchísimo hacerles esto, y pido disculpas sobre todo a aquellos que me siguen desde que empecé esta cuenta. Los quiero muchísimo mis lectores y gracias por seguirme a pesar de todos los cambios que sufre esta cuenta constantemente. En lo posible, trataré de no hacer más cambios.

Información de otras historias la daré en su respectivo primer capítulo. 

No olvides darle me gusta si te gustó el capítulo y si tienes dudas o preguntas, puedes dejarlas en la cajita de comentarios

♥¡Nos vemos en el próximo capítulo!♥