El universo que hay en mi

Sobre la felicidad

Me gustaría empezar disiendo que en el pasado no fui feliz y si me preguntaran la razón no sabría dar una respuesta coherente. Es que no tenía problemas, pero por alguna razón no era feliz y me sentía deprimida. Cuando a los quince años me mudé de ciudad me empecé a sentir mucho peor que antes y comencé a extrañar el lugar en donde vivía, lo extrañaba, porque para mí en ese lugar era feliz y libre. Creí que solo en ese lugar fui feliz. Un día encontré un diario, que empecé a escribir desde los once años y al leer las paginas me di cuenta que en cada línea que leía, a pesar de que era una niña cuando escribí eso solo decía que estaba triste y que me sentía fatal. Cuando leí aquello mi alma se rompió, porque me di cuenta, que el único momento de mi vida en que recordaba haber sido feliz era falso. Nunca había sido feliz, todo fue un invento de mi imaginación. Sin embargo, hoy con diecinueve años por fin puedo decir que soy feliz, sin la necesidad de tener a alguien a mi lado u obtener algo material y me siento en paz y de todo lo que tengo saber que soy feliz es lo que más orgullosa me hace sentir. Hace solo un par de meses que la felicidad llegó a mí y lo hizo de repente y sin previo aviso, solo llegó y lo mejor de todo es que se ha quedado por mucho tiempo. El secreto para mantenerla es no preocuparse por cosas que tienen solución, si reprobaste una materia no importa, la puedes tomar el próximo semestre. Si ustedes están en busca de la felicidad y no pueden encontrarla les diré un secreto, que les hará más fácil la búsqueda: encuentren su pasión en la vida, eso que de verdad los hace felices. Si haces algo y crees que eso es lo que te gusta, pero no te hace sentir pleno y con ganas de hacerlo siempre, sigue buscando, porque aunque no lo creas eso no es lo tuyo. Todo lo que digo es por experiencia propia la felicidad plena no llegó a mi hasta que no encontré esa actividad que me apasiona y me da un motivo y una meta que perseguir.