Pheromones ➳ ; KookMin •Oneshot•

Estudio

—Y bien, ¿Repasamos?

Jungkook había acordado una tarde de estudios con Jimin. Lo necesitaba ya que al Omega le iba de maravilla en biología, y él no fue bendecido con tal nivel de compresión como el que Park poseía. Así que cuando el chico más bajo se ofreció a ayudarlo no dudo ni un solo microsegundo.

—Claro, comencemos —Dijo el Alfa, se sentía algo nervioso. No solo aceptó porque en la asignatura le fuese del asco, si no porque el Omega andaba por los rincones de su cabeza desde hace algunas semanas. Llevaban varias horas estudiando, pero el Alfa se perdía las explicaciones solo por estar embelesado en como sus gruesos labios se movían, como sus pequeñas manos iban de un lado a otro velozmente y más aún en sus finas facciones.

—Muy bien, de todo lo que hemos estudiado comenzaré con lo más básico —Jimin hablaba mientras rápidamente acomodaba lápices y cuadernos —Por ejemplo, la diferencia entre haploide y diploide

—... —El azabache no fue capaz de pronunciar ni una sola palabra, solo se quedó estático desviando la mirada

—Tiene que ser una broma... —El enfado dominó el ambiente y ningún solo movimiento existió por parte del Alfa, quién estaba expectante a lo que el Omega haría—¡Llevamos casi toda la puta tarde Jungkook!, ¡Ya es tercera vez y aún no te puedes aprender las putas definiciones!, ¿¡Cómo puedes ser tan jodidamente lerdo!?

—Hey, en primer lugar no me grites, soy un Alfa, deberías de tenerme un poco más de respeto —Jungkook lo miró con el ceño fruncido, él era un Alfa, no tenía porqué estar aguantando una reprimienda, y mucho menos si viene de un simple Omega

—Me estás diciendo, ¿qué no puedo reclamar sobre tu maldita estupidez sólo porque eres un jodido Alfa? —Lo apuntaba mientras las palabras que intentaban ser hirientes salían de su boca —¿Te digo una sola cosa?, me importa una mierda que seas un Alfa. Está es mi habitación, estás en mi casa, bajo mi techo, así que tendrás que aguantar todo lo que yo haga o diga si quieres pasar la puta asignatura con una calificación decente.

Jungkook estaba estupefacto, Jimin le había pasado por encima sin ningún tipo de terror como si ambos pertenecieran al mismo linaje. Sus padres estarían avergonzados si hubiesen visto u escuchado todo lo que el Omega le había dicho. Nunca un Omega lo logró tratar de esa forma tan ofensiva, siempre se dio a respetar, hasta pelear si era necesario, mantener su imagen de líder siempre fue su prioridad. Y que todo eso se fuera al demonio en menos de un segundo gracias al Omega que tenía al frente, no fue algo que le agradara del todo

Jimin sabía intimidar, no mentiría, la forma tan brusca y tan punzante en la que habló lograba dejar muy en claro que no era fácil lidiar con él. Por una parte Jungkook estaba enfadado, pero por otra no le disgustó del todo que Jimin fuese capaz de enfrentar a un Alfa sin la mínima pizca de pavor. No muchos Omegas tenían la valentía de hacer eso

—Hey, cálmate —Esbozó una sutil sonrisa —¿Por qué mejor no intentamos hacer el experimento que hizo el profesor la última clase?

—¿El de las feromonas?

—El mismo —A Jungkook se le acaba de ocurrir una pequeña idea para intentar frenar los malos tratos del Omega, quería ver si tenía la suficiente fuerza de voluntad como para resistir los toques de un Alfa.

—Bueno, el efecto de las feromonas en Alfas y Omegas también entran en el examen, no es mala idea, al parecer no eres tan imbécil como creí —Ambos pasaron de estar en la cama a estar parados al lado de la misma. Se posicionaron frente a frente y comenzaron.

Jimin tenía a su disposición al Alfa más deseado del instituto, los Omegas se arrastraban por él y los Alfas lo envidiaban. Nunca le vio ninguna gracia a Jungkook, solo un matón más del montón que logró tener más fama de lo normal por ser una Alfa de sangre pura, nada más. Pero tenerlo al frente y tan cerca lo puso un poco nervioso, tenía el cuerpo bien trabajado, las venas de sus brazos eran un poco visibles y una cintura algo pequeña; sin olvidar que tenía unas facciones preciosas. Tal vez no se trataba de que Jungkook no tuviese gracia alguna, tal vez solo se trataba de que Jimin no se había tomado el tiempo suficiente de observarlo.