Desiciones.

Una gran noticia.

Un extraño ruido me despierta, son unos gritos de felicitación provenientes del otro lado de la casa. No lo pienso dos veces y voy a ver que ocurre, no cabe decir que estaba demasiado dormida.

-¿Qué es todo ese ruido?-pregunto confundida y frotándome la cara.

-¿Recuerdas que siempre hemos querido viajar a un lugar asombroso y lleno de misterio?-Dice Cameron y me toma de las manos, tan entusiasmado que de pronto olvidé que hace menos de dos minutos estaba durmiendo, a veces exageraba mucho.

-Ah...-quedo en silencio viendo que ahí estaba Drew-si, si, claro-vuelvo del trance-¿qué hay con eso?-pregunto confundida.

-Que ahora será posible-mi padre me mira con una enorme sonrisa, realmente era un hombre muy trabajador a lo que respecta, siempre se ha encargado de cuidarnos a mi y a mi hermano cuando mi madre murió, mi hermano era un año mayor que yo.

-No -ellos asienten- ¿A qué se refieren?.

-¡Nos iremos a vivir a Nueva York!.-dice mi padre.

-Se irán-Drew se frota la cabeza-yo solo venia a verlos.-lo dice con una risa nerviosa.

-Esperen, ¡NO!, claro que es un lugar asombroso... pero, ¿¡Pero qué hay de mí!? De mis amistades, de nuestros familiares, de todos, de ti Drew...-lo miré e inmediatamente me senté en el sofá como si fuera el fin del mundo.-todos se miran y luego me miran a mí-¿por qué no me preguntaron antes?, ¿los demás saben de esto?, ¿están consientes de esto?.

-Mira, Alex... sé que es un paso muy grande, pero a ti te queda mucho por vivir, y no quería que te quedaras en este lugar por siempre-Drew interrumpe a mi padre.

-Respecto a mí, lo entiendo al igual que sus familiares y amigos lo harán, no es el fin del mundo vamos.-me sonríe y estira la mano para que lo abrazara pero solo lo observo y lo rechazo.

-Lo... pensaré un poco más. -digo con la voz quebrada y los ojos llorosos.-mi padre, Cameron y Drew se quedan en total silencio mientras yo subía a mi habitación de nuevo para poder pensar tranquilamente, sé que debería de alegrarme por ellos y un poco por mí, pero ¿cómo hacerlo si ya no volveré a ver a Drew?-Vamos, vamos, sé que estás ahí por favor Drew, te acabo de ver, no es posible que no contestes.-tenía la esperanza de poder hablar con él a solas, él y yo nos conocemos básicamente de toda la vida. A los cinco años  fue cuando nos vimos por primera vez, yo me juntaba con mi grupito y él con el suyo, nada distinto, hasta que un día me empezó a molestar, lo hacía siempre, cada vez que podía.

•Flashback 1•

-¡Ya basta Drew!.

-No quiero.

-¡Deja de jalarme el cabello!.

-Espera, déjame pensarlo-puso su mano debajo de su barbilla- tal vez... ¡NO!.

-¡Yaaaa!.-Drew saco algo de su boca, era un chicle, y lo pegó en una de mis coletas.-¡IUK! ¡Mi cabello!-en ese momento aparte de tener siete años y medio (si, fueron dos años los que llevaba molestándome) ya estaba muy triste y me eche a llorar, para mi era lo peor tener un chicle en una de mis coletas. Drew dejo de molestarme y se desapareció al ver que estaba llorando, nunca me había hecho llegar a tal extremo. Yo me paré y fui a lavarme un poco al baño, cuando salí estaba Drew esperándome.-¿Qué haces? ¡Vete de aquí!.-el tenia sus manos atrás como si tratara de ocultar algo y su cara estaba preocupada, como si en verdad le preocupara.

-Toma-detrás de él tenía unas flores que claramente había arrancado del jardín y estaba lleno de lodo.-Perdón.-Después de ese día se empezó portar de una manera mucho mas agradable conmigo.

•Flashback 2•

-¿De qué hablas? No, esto no puede ser.

-Eso fue lo qué pensé pero enserio si puede ser así.-él solo agachaba la mirada y no me volteaba a ver a la cara para nada, se veía tan tierno nervioso a pesar de solo tener doce años.-Me gustas. Siempre trataba de estar cerca de ti, cuando te molestaba... aunque suene absurdo, era para llamar tu atención, para mi siempre has sido una niña muy hermosa.

-No sé que decir...

-Te comprendo si me quieres rechazar, pero por favor entiéndeme Alex.

-¿Entenderte?-pregunto confundida.-¿Por qué?.

-Porque me gustas.

•Fin Flashbacks•

-Alex... -Drew abre la puerta de mi habitación.

-¿Estás bromeando? Llevo muchísimo tiempo tratando de comunicarme contigo.-Le digo enojada, pero con la voz quebrada debido a que había estado llorando.

-Lo siento, había llegado muy temprano y olvidé mi móvil, luego pasé con tu hermano a hacer unas cosas...-lo dice haciendo señas.-pero ya estoy aquí-se acerca con una sonrisa y se sienta a un lado mío, a lo cual yo solo lo miro enojada y con los brazos cruzados.

-¿Sabes?-digo tomando una de las fotos que tenía a un lado mío (eran cartas, fotos, recuerdos de Drew y míos)- te extrañaré mucho. Me duele dejarte, que encuentres a alguien mejor y que se enamoren.-lo abrazo.

-Vamos pequeña, tú también estarás lejos, pero no importa porque yo confío en ti, y sé que no pasará nada malo, así que por favor tú también confía en mi.-me sonríe y sostiene mi mentón.-sé que va a ser duro, te extrañaré más de lo que te imaginas pero valdrá la pena, cuando puedas llegar y tú y yo estemos juntos de nuevo, llevamos desde los siete años juntos, desde que te obsequié esas flores que arranqué del jardín del patio de juegos, y además por dios, si no nos separo la loca Eli, nada lo hará.-ambos reímos, Eli era una niña la cuál estaba obsesionada con Drew desde que tenemos memoria.-ahora dame un beso, amor. Ambos nos besamos, realmente me hizo sentir mejor, era lo que amaba de él, que sólo el me hacía sentir de esa manera, no podía enojarme con él, realmente no podía.-se escuchó un gran trueno-bueno, creo que esto se pondrá feo así que hazme un espacio en tu cama, que será un día largo.

-Claro señor-me río y lo abrazo.-hoy veremos películas, comeremos pizza, nos haremos un poco de chocolate caliente y estaremos todo el día en pijamas, ¿qué dices? ¿te gusta la idea?.

-La simple idea de estar a tu lado por un día completo me fascina como ni te imaginas.-yo me sonrojo-es lo que me gusta de ti, que sigues siendo tan linda como el primer día en el que me enamoré de ti.

-Oye, señor poeta-lo digo en tono burlón-se pasará el día completo si no te paras de ahí.

-Oh créame que no importa bella damisela igual podría quedarme todo el día aquí mirándole... se ve tan linda cuando da ordenes...

-Bastaaa-me pongo aún más roja.-ahora mueve tu trasero y vamos a la cocina.

Al fin logré que Drew se levantara y pasamos todo el día juntos, ordenamos pizza, hicimos chocolate caliente, vimos películas, unas de terror, otras de drama, realmente era un día perfecto, hacía frío, y ¿qué mejor que pasarlo con la persona que amas?.

-Es demasiado linda cuando duerme.-dice Drew entre risas y en un susurro para no despertarme. Pero todavía estaba despierta y aún no lo notaba, él era realmente lo que quería. En verdad extrañaría este tipo de días...