Dos semanas después de terapia intensiva, ir a grupos de rehabilitación para gente deprimida que no le encuentra sentido a la vida y muchas otras cosas poco divertidas más logre deshacerme de la silla de ruedas, no me fastidia que tener que pedir ayuda de mi mama, pero ya se volvía algo fastidioso estar siempre sentada y quién lo diría. Sí, yo Sofía Kim otra vez quería estar de pie, cosa que es poco común con la flojera que siempre llevo conmigo.
Oí la alarma y extendí mi brazo lo más rápido posible para lograr apagarla, en un intento de no caer de la cama tontamente me puse de pie y mientras lograba volver en mi misma organice mi habitación, mi madre entro en el cuarto y me saludo con una alegre sonrisa en el rostro.
- Por lo visto el accidente ayudo en algo –dijo papa asomándose detrás de mama-.
- Oye, no juegues con eso –soltó mama-.
- Está bien, lo siento jefa –dijo mientras le daba un beso en la mejilla a mi madre- será mejor que te metas al baño rápido si no quieres llegar tarde a tu primer día de clases.
- Está bien capitán, ¿ahora podrían salir de mi habitación por favor?
- Como ordene secretaria –dijo eso y se fue seguido de mama.
Entre al baño y abrí el grifo del lavabo, tome mi cepillo de dientes y cepille mis dientes mientras me miraba en el espejo. Hola vieja amiga, hace mucho que no nos vemos ¿con que hoy tendrás tu primer día de escuela? Pues asegúrate de que no te hagan puré de patatas otra vez –me dije a mi misma- una vez que termine de cepillarme entre a la regadera y tome una ducha rápida, después de media hora salí del baño y vi como el reloj con forma de gato en la pared marcaba las 7.30 –joder solo tienes 3 minutos Sofía- dije entre dientes mientras abría las puertas del armario y sacaba cualquier cosa que pintara bien.
al final termine usando un cardigan beige, una camiseta blanca, un par pantalones negros y mis viejas zapatillas blancas -en serio las extrañaba, ¿ya menciones que me encantan las cosas viejas?-. como era el primer día de clases era de esperarse que mi lindo padre no me iba a dejar irme en el metro, no señores, así que como ya podrán notar estoy en el carro de papa -yupi!!- aunque no lo veía hace un mes no sentía gran emoción y las pocas palabras que cruzábamos ya se volvían en acertijos con respuestas obvias.
una vez llegamos a la universidad, dejo el carro en el estacionamiento que esta siendo vigilado por lo que parecía un guardia de seguridad con sobrepeso y amor por las donas -tranquilo amigo te apoyo, también me encantan esas delicias con azúcar y forma de esfera- subimos las escaleras y nos quedamos unos instantes petrificados ante el inmenso portón de metal oscuro. arriba de el en letras cursivas se leía: University of California, Berkeley . trague saliva y mire a papa a los ojos.
- A patear traseros
- ¿Como siempre los has hecho?
- exacto -recibí un beso de papá en la frente. pidió al vigilante que abriera la puerta y este presiono un botón desde la cabina en que se encontraba, una vez abierto el portón me dio un pequeño empujón ayudándome a atravesarla y se despidió agitando su mano en el aire, se dio media vuelta y se fue.
Mire al frente intentando pensar en cómo solucionaría esto ahora, recordaba mi graduación, recordaba la ceremonia donde recibí la beca... no, ahora que lo pienso nunca termine la escuela, entonces... ¿Por qué estoy aquí? ¿No es ilegal eso?
Un hombre de un metro 80 se acercó a mi dirigiéndome la palabra, al principio no lo creí ya que habían más personas a mi alrededor y pensé que tal vez solo sería una vaga idea que estaba haciendo en mi cabeza.
- ¿Hola? Te estoy hablando
Por fin pude confirmar mis dudas
- ¿Eres nueva verdad?
- ¿Qué harás si te digo que sí?
- Wow cálmate mujer, no pretendo hacerte algo malo, ¿tengo pinta de asesino en serie?
- Tal vez
- Mi nombre es Nicolás
¿Nicolás? El mismo chico bonito que solía ser mi amigo, como es posible que ahora no me recuerde, ¿sería incomodo si le pregunto ahora mismo si me recuerda? ¿Si sabe algo de Alicia? Mi mundo se vino abajo, el corazón me dio un vuelco y quede como un papel: en blanco.
- mi nombre es Sofía
- ohh lindo nombre –dijo sonriendo, mostrando su blanca dentadura perfecta.
¿Lindo nombre? Vamos amigo se el nombre de todas las novias que tuviste, la primera vez que en Mors high school te dieron una paliza, se cuándo perdiste tu virginidad y tú ¿no te acuerdas de mí? Eso sin duda alguna es muy cruel y no tiene precio –y tú que lees si estás pensando que cruel es bueno, pues no, no lo es- dime porque ¿Por qué eres así conmigo?
- ¿Entramos ya? –dijo Nicolás algo impaciente.
- Si, por cierto ¿en qué año estamos?
- 2017 ¿Por qué preguntas algo como eso? –dijo mordiéndose el labio inferior, ese gesto en el me mata, pero ahora no es momento de eso
- Si me accidente hace un mes ¿por qué tú no recuerdas mi nombre ni que fuimos amigos?
- ¿perdón? –sus cejas se torcieron reaccionando junto con las expresiones de su rostro que indicaban no saber nada de lo que estaba hablando.
- ¿E-estaba diciendo algo? Lo siento–otra vez yo divagando-, será mejor que lo ignores. Entonces... ¿entramos ya?
- Si... será lo mejor
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hola amores míos
lo prometido es deuda y sin mas preámbulos ...
!Declaro la semana de actualizaciones inaugurada¡
que comiencen los juegos del hambre (? AHRE :V
PD: se vienen las teorías así que vayan comenzando a hacer sus análisis ¿por que creen que Nicolas no recuerda a sofia? ¿en serio no la recuerda o la esta evitando? ¿que creen?
C : muchas cosas, wuuuuuu!
M :consciencia no interrumpa
C :lo que diga joven
M :ok, sigo
PD: Se me olvidaba decirles que soy la madre de la psicología inversa
disfruten :)
adiosito!
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Just Remember
Teen FictionLuego de sufrir un accidente Sofía se encuentra tendida en la cama de un hospital tratando de traer a la mente los últimos recuerdos acerca de quien la salvó. ¿Mentira o verdad? ¿Miedo o valentía? ¿Amor o traición? Tantas cosas que pensar con sola u...