El Club Anti Jungkook & NamJin ✎ BTS (YoonMin)

Capítulo 23: A comer piña

Jimin

Había sido la pijamada más extraña hasta el momento, y eso que estuve cuando Carry, InSoo, Dona y Namkyu usaron botargas de comida mientras bailaban War of love de VTC. Claro que las fotos en donde una zanahoria, cupcake, dona y taco están durmiendo en el suelo y con la baba escurriéndoles por la boca siguen siendo la mejor opción para ver cuando estoy algo desanimado.

Igualmente no se compara al hecho que estuviéramos todos reunidos con el "enemigo" en una pijamada en la que dejó de importar si Jungkook estaba ahí o no, comenzaba a hacerme a la idea de olvidarlo todo de una vez, mi hermana lo estaba haciendo y después de encararlo me sentía mejor, más libre. Mientras no jugara sucio o intentara hacer algo indebido, por mí estaba bien que estuviera cerca.

Decidí mejor subir a Yoongi a mi cuarto porque no parecía muy feliz de dormir en el piso, así que le iba a dar mi cama, sin embargo la cosa se tornó diferente cuando estuvimos en mi cuarto a sola. Habrá sido la emoción de verle en el escenario con una faceta nueva o qué, pero en cuanto la puerta se cerró no pude evitar besarle.

Él correspondió rápidamente a mis besos, enredó sus brazos en mi cuello con fuerza y comenzamos a caminar hacia mi cama, caí sentado en ella y él se subió en mi regazó. Estando ahí viendo su rostro que era tan hermoso, comencé a preguntarme qué es lo que seguía. Podía ver cómo su pecho subía y bajaba por la agitada respiración y aunque Yoongi era un tanto más delgado que yo, seguía viéndose varonil.

—Debemos parar — murmuró pegando su frente a la mía.

—¿Por qué? — Era obvio que deseaba continuar, podía sentirlo en sus manos que me acariciaban con firmeza y necesidad.

—Es muy pronto, hace unos días estabas temblando por un beso — sonrió burlón y yo también lo hice.

—Extrañamente me siento motivo y con ganas de hacerlo — agarré sus muslos que seguían en mis costados y pasé su trasero por mi erección.

—Oh no, Park Jimin, yo no seré tu pasivo — empezó a decir levantándose y negando con la cabeza — Y menos con ese trasero que te cargas, sería un pecado

—¿Qué? — Comencé a reírme, era la primera vez que me comentaba aquello.

—Sí, se ve redondito y suavecito, sólo Dios sabe cuánto deseo tocarlo — la expresión que Yoongi puso me mató de la risa, jamás pensé que hablando de eso podría ser más expresivo que nunca.

Y es que había hecho un gesto de sabroseo digno de mi hermana cuando ve a Namjoon.

—Realmente no sabría decir si soy pasivo o activo, supongo que todavía tengo que experimentar — comenté sobándome el cuello, él se había sentado a mi lado en la cama.

—Tienes razón, todavía te falta mucho por vivir — suspiró — en unos meses seré mayor de edad y será ilegal que esté contigo

—Cállate, como si te importara eso — se encogió de hombros.

—Te dije que iría a tu ritmo, no perdamos la compostura — tomó mi mano para enlazarla con la suya.

Nos quedamos así, sentados en la cama viendo hacia la puerta de mi habitación en silencio, todo estaba bastante bien hasta que escuchamos unos pasos.

—¿No quieres ver la película? — Esa era la voz de Namjoon.

—Nah, prefiero hacer otras cosas — y esa era la voz de mi caliente hermana.

Ambos sin quererlo prestamos atención a lo que estaban haciendo, cerraron la puerta del cuarto de alado y escuché los pasos apresurarse a la cama, se me pusieron rojas las orejas de imaginarme lo que harían. Luego la cama empezó a crujir, en señal que ahí estaban, tronaron los besos y volteé a ver a Yoongi que también estaba escuchando lo mismo que yo.