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Disclaimer: La historia es de mi pertenencia, en ella sólo utilizo sin ningúnfin de lucro, a los personajes de Naruto, cuyo creador es Masashi Kishimoto.Está prohibido re-suban esta o cualquier otra de mis historias, o adaptarlas.

Paris
[In the Rain]

Quatre

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Sakura tenía razón en cuanto a esa casa. Sasuke, quién siempre había vivido ahí, sabía que el lugar ‒ mansión ‒ era una con historia, siempre perteneciente a la rama principal de su familia. Pero en muchas ocasiones sólo era eso: una simple estructura. Nunca le había llamado hogar.

Demasiado grande para una pequeña familia. Demasiado eco en los pasillos, habitaciones enormes y vacías. Jardines extensos y salas de estar.
¿Dónde estaba la calidez? Aquella con la que se describe al hogar...

Cuando Sasuke fue un adolescente y tenía más libertad de su tiempo libre, solía encerrarse en el salón de música del segundo piso y tocar el piano, justo como ahora.

No era algo que le encantara hacer –poco común, en realidad, pero tampoco le disgustaba. Lo hacía más por costumbre–, pero ese día era diferente. Sus dígitos pasaban por las teclas tan rápido, tan fuerte. Tocaba frenéticamente, su aliento atorado y la furia en su acto.

Su hermano, que había entrado sin ser notado, le miraba. Ante los ojos de Itachi Uchiha su pequeño hermano no era consciente de las emociones que dejaba a relucir mientras ejecutaba esas piezas en el instrumento. No había armonía, sólo sentimientos muy fuertes, emociones que por tanto había embotellado. Porque Sasuke era orgulloso, era fuerte y... él se negaba a dejar salir lo que de verdad sentía y pensaba, prefiriendo afrontar sin más palabras lo que la vida le fuera a asignar. Pero Itachi podía escucharle; dolor, confusión, impotencia y frustración. Algo que Sasuke nunca demostraba en público.

Itachi nunca lo interrumpió, dejó que terminara de tocar cualquier interpretación que su mente y corazón proyectaba. Cuando el silencio retomó su estadía en ese cuarto y sólo la respiración acelerada, creada por la frustración y explosión de su hermano menor era lo único que se trasmitía, él habló:

—Tienes visitas.

Sasuke no hizo movimiento de haber escuchado, sólo se concentró en inhalar y exhalar aire para sus pulmones pesados. Su mente estaba hecha un caos. La notificación que se le dio ese día más temprano, el silencio expectante de sus padres y el sentir como el piso se rompía a sus pies y el aire dejaba de ser de utilidad, que toda su libertad se veía en conflicto con sus verdaderos deseos. Siempre supo que ese momento llegaría, pero no así. No debía dejar que Sa-

—La señorita Haruno está esperando en tu habitación, como de costumbre.

El anuncio de Itachi fue sólo otra bomba destruyendo la estabilidad del segundo hijo de la familia.

Fue un reflejo violento el cómo Sasuke se levantó tan rápido y exaltado, ocasionado que el banquillo en el que estaba sentado rechinara de manera tan horrible contra el mármol del piso. No había necesidad que Itachi diera explicaciones, Sasuke no se cuestionaba el porqué su hermano le dio entrada libre a la joven, más aún a su propia recámara sin supervisión. Por muchos o pocos a quienes pudiera llamar amigos, Sasuke no tenía una relación tan cercana con alguien que no fuera Sakura.

No había alguien fuera de su familia que pudiera pasar tan libremente a su habitación más que ella.

El conocimiento de su presencia, de que ni siquiera él podía controlar su pensar en ese momento sólo era un cúmulo de emociones erráticas en su mente. Se sentía perdido.

—Es posible que ella haya escuchado...?

No, no, no... Sasuke necesitaba tiempo. Necesitaba-

—La encontré sentada en la sala principal, yo mismo le pedí te esperara en tu habitación.

—¿Ella escuchó?— insistió. Porque su mundo se desmoronaba, pero ella se estaba convirtiendo en su principal dilema.

Itachi suspiró un poco, su hermano era tan intenso.

—Sí—. Qué más quisiera Itachi que darle un poco de paz, aunque fuera mintiéndole, pero Sasuke no era ingenuo, y con toda su vida en esa casa sabía que si tocaba a un volumen muy alto, se lograría escuchar hasta la sala.

Sin decir nada, su hermano salió de aquella sala, sin mover la vista del frente y reuniendo la fuerza para recuperar la indiferencia como mascara predilecta. Itachi sólo se recargó contra la puerta, mirando el piano que su hermano había estado usando hace unos momentos. No necesitaba preguntar para saber la situación que le había afectado a tal medida. Él mismo, como primer hijo, era informado de todo antes que su hermano, y más aún, cuando su padre tomaba una decisión que involucraba a Sasuke.

Itachi quería a su hermano, no había nadie más importante para él, y a pesar de que por toda su vida había tratado de apoyarle a encontrar su propio camino y que fuera libre, Sasuke se empeñaba a vivir así; como la vida le había dispuesto. No replicaba, no cuestionaba y no se negaba ante lo mínimo que su padre le ordenara. Mucha responsabilidad sentía él, sabiendo que Sasuke siempre ha intentado salir de la sombra  del mismo Itachi, siempre anhelando el reconocimiento de su padre. Siempre actuando por el bien de la familia y no el propio. En esta ocasión, y a pesar de que Itachi quisiera ayudarle, no debía entrometerse, pues esto era pura decisión de Sasuke, y debía elegir bien las acciones a tomar porque sabía que su felicidad dependía de ello.

Sin embargo no quería hacerse de mucha ilusión, pues ya no sólo era cuestión de Sasuke, sino de la chica que siempre estaba con él. Haruno Sakura, aquella chiquilla ambiciosa y tan comprometida con su propia familia.

Ya no había elección. Cualquier decisión que ambos tomaran podría lastimar al otro.
Porque les conocía, y dudaba que alguno plantara pie firme y se revelara ante sus familias.

Itachi de verdad deseaba equivocarse.

PARIS [In the Rain]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora