Frases sin concluir...

La farsa terminó

Hoy estoy sentado afuera de la casa; he entendido que no debo esperar nada de nadie, he entendido que las palabras son lo más doloroso, pero puede hacer que las personas lleguen creer; más cuando son mentira.

Era hora de terminar con todo puesto que las mentiras ya habían llegado muy lejos y que solo seguían creciendo con tal de saber lo que de verdad había ahí; al final lo descubrí por otra persona: nada.

Le regalé su libro favorito envuelto en un bonito papel para regalo, era obvio que me preguntaría porqué lo hacía, sin embargo, no le diría nada y solo le dije que es lo que siempre había querido y que le gustaría leerlo. Ella me abrazo y me dijo lo mucho que me quería. Le di un abrazo y le dije adiós, me preguntó si me quedaría a lo cual solo respondí con un adiós.

Lo que escribí en la carta era lo siguiente, espero la haya leído porque de igual manera no volveré.

¨A quien corresponda: hoy será la última vez que te dirija la palabra; me he dado cuenta de lo mucho que había mentido para poder saber qué era lo que de verdad había aquí, o sea, nada. Eso había. Entonces, la espera se acabó, estuve aquí y es hora de que me vaya y jamás vuelva. Considero que eres una basura de persona, considero que tu forma de ser es lo peor del mundo y espero sigas siendo así, porque es lo que te da vida, hazlo, sigue y encontrarás tu camino, pero no a verdaderas personas, quizá lo creas, pero te equivocas.

¿Entiendes la razón de todo esto? Si no lo haces te la puedo explicar: si pudieras cambiar un poco tendrías personas más sinceras en tu vida, pero ¿Qué has obtenido? Personas que te buscan por cosas que no son correctas, sigues ese camino creyendo que encontraras lo mismo sin cambiar. Crees que el hecho de que todo el mundo se entere de lo que haces es lo mejor de todo. Solo entienden que es fácil llegar contigo.

Claro, te llegué a apreciar cómo no tienes idea, pero jamás te disté cuenta de lo que de verdad sentía. Llegaste a ser la mejor persona dentro de mi vida, pero noté lo mucho que mentías y decidí ver qué tan lejos llegarías, cambié mi cariño por mentiras porque me di cuenta de todo. Me dolió cambiar así, pero ¿Qué más podía hacer? Sólo quería saber la verdad y la encontré. ¿Me gustó? Quién sabe. No lo haré una vez más, es un hasta nunca. ¨

No le di gracias por nada y nunca lo haré. Fue de lo peor que me había pasado, me hizo pensar muchas cosas y creer que eran verdad y al final no lo eras. Todo fue un juego y es aquí donde debo decir: Nada es verdad, todo está permitido.