Enciendo un cigarrillo bajo el delicado rocío de la noche, camino en soledad mientras veo a todos rebasarme, hoy tendría los suficientes motivos para ser feliz sin embargo siento que algo falta dentro de esta cabeza rota, veo a Melissa tan feliz, a Sam tan alegre, a Maria tan sonriente y a ti tan distante, no se si sea envidia alver a antiguos amores viviendo tan felices y yo aquí tan imdiferente para ti, hermosa criatura no puedo describirte la falta que me haces, sin embargo tengo que aceptar que la vida siempre a de seguir.
Aspiro una gran bocanada de ese tan nocivo como placentero humo, que me relaja en mi triste andar,
–Ohhhh niña lo que daría hoy por tenerte entre mis brazos –
Decía la nube de humo proveniente de mi garganta , esa que un día se rasgo por tanto gritar tu nombre, hoy veo un alegre futuro el cual veo tan cerca y tan lejos como si este colgará del anzuelo de una caña de pescar amarrada a mi espalda.
Soy libre si, pero soy como aquel simio que se encuentra libre en la luna, libre pero sin ningún árbol en el cual balancearse, solitario en un enorme desierto con la lejana mirada de las estrellas en el cielo.
Mi cigarro va a la mitad, saboreo ese dulce sabor que me deja en los labios el saborizado de clavo, un dulce que no puedo compartir con nadie , la ceniza cae poco a poco sobre las calles mojadas de la ciudad, e llegado a la conclusión de que me hace daño estar solo, pues al estarlo no hago más que pensar en ti, solo quiero llegar a casa, donde encontrare el consuelo que tanto espero, en una buena familia donde entre abuelos tíos y primos me olvido por un momento de que existes.
Uhhh si me vieran fumando, que escándalo el próximo joven universitario,
¡el primer nieto de en llegar a estudiar una carrera metido en vicios!
!Que escándalo¡
–como si me importa–
Dijo el uno de tabaco que salía de mi boca, solo quiero estar tranquilo, y estar un rato a solas, no puedo evitar sentir este sentimiento de tristeza, pero tampoco puedo quedarme a contemplar el pasado solo dedicaré este cigarrillo a tu memoria y me iré, total ya falta poco para dejar de verte, eso espero aunque no quiero, solo queda el olvido y el recuerdo de un intento fallido, y aunque es larga la lista de mis derrotas, esta es la más dolorosa, por que al final, tu a pagaste tu cigarrillo justo en mi corazón.