Karkat no podía creerse aún el lío en el que estaba metido, su monótona mañana se había convertido en un enredo amoroso del cual tenía que salir cuanto antes. Trataba de no matarse con el teclado de su pc pero el saber que su nickname en trollian era "HadaAmorosa" le hacía vomitar la gloriosa comida de Kanaya.
Golpeteó los dedos contra el escritorio esperando al citado ser que se contactaría con "ella", cuando de pronto sonó lo esperado, un "bloom" acompañado con un zumbido le alarmó los sentidos, era un curioso mensaje en su bandeja de entrada de un tal "DarkClown".
Sin siquiera abrir la ventana supo al instante que el único troll que conocía con semejante apodo oculto era su mejor amigo, Gamzee. No estaba tan preocupado por ahora, había sido su consejero desde hace mucho tiempo, era un tanto extraño escuchar las paranoias del capricornio, pero estaba bien, al menos podía conectarse más a fondo con él.
Dio un pequeño clic en la ventana para poder comenzar a leer.
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Karkat no pudo evitar sacar una risa al intento de estar en cubierto de su amigo, era bastante obvio que se trataba de él, su escritura, el bocinazo e inclusive los insultos eran tan típicos de él. Posó sus dedos en el teclado para responder a su mensaje haciéndole saber que estaba presente, Gamz─ Es decir, Dark Clown empezó a escribir de manera pausada como si estuviera muy nervioso, lo que hacía al canceriano ponerse curioso. Leía sus líneas con detenimiento, le estaba contando sobre sus emociones, el hecho de que hace mucho tiempo empezó a sentirse molestado por dentro, como si un montón de bichos quisieran salir de él, era nauseabundo, tétrico y muy Jodidamente raro para él, le explicaba que su corazón latía a mil por segundo cuando escuchaba la voz de alguien.
"Te lo digo, hada, es una impotencia más que un sentimiento agradable. No me refiero a que odie a cierta persona, no, yo nunca odiaría a un hermano, es más . . . como esas cosas que suelen estar en los libros de mi cool hermano Karkat, donde los protagonistas vuelan en un cielo de rosas cuando tienen enfrente a su otra mitad.
Es jodidamente estúpido, estoy seguro de lo que siento pero no puedo hacer algo, él y yo somos grandes amigos y nuestra amistad es un maldito milagro, no deseo para nada que se separe de mi.
Voy a decirte algo . . ."
Cuando Vantas leyó esa línea se quedó estático, a pesar de los ciclos que tenían como mejores amigos, no sabía que le gustaba alguien o peor aún, que estaba ENAMORADO.
Antes de volver a teclear miró nuevamente el mensaje, quizá podía olvidarse que hacía tal labor con odio y darle un buen consejo a su amigo de todo corazón. Sin escribir absolutamente nada, optó por mandarle un sticker de una carita feliz indicándole que estaba listo para escuchar lo que tuviese que decir.
Entonces Makara respondió:
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