Mis labios terciopelo

Su sabor

Yeon termino de llorar y se disculpó por poner en esa situación a su compañera e inicio una explicación ante lo que pudo apreciar Jin en ese momento protervo que vivió — Necesito que entiendas lo que sucede conmigo, y si hago esto es porque para mí tú eres importante — tomo de la mano a Jin y la llevo a su cuarto, para eventualmente sentarse ambas en la cama de Yeon — también necesito que no me juzgues, después de todo cuando estamos en esta edad hacemos cosas estúpidas de las cuales nos arrepentimos en un corto lapso de tiempo ¿no? — Jin solo asintió —  Cuando te llame aquella vez, realmente tenía tantas ganas de decírtelo, incluso quería que volvieras a llamar pero no lo hiciste, eso me puso un poco triste sin embargo, quiero ser sincera contigo y conmigo — Yeon respiro profundo — Antes que nada Park Gun, nuestro profesor de artes, fue una noche cualquiera hace un par de meses ya fui con Heenim lo acompañe al bar, al de a otra vez;  ya sabes a donde é y tú se embriagaron, yo lo perdí de vista y me encontré con Park Gun él ya estaba ebrio y me pidió que lo acompañara — la voz de Yeon comenzó a quebrase — y lo hice, pero se sobrepasó conmigo y bueno — suspiro — me beso, no quiero mentir contigo, pero bueno fueron más besos — Jin comenzaba a enfadarse pero trato de ocultarlo para dejar hablar a Yeon y no interrumpirla — una cosa llevo a la otra y sucedió aquello — agacho la mirada — se supone que ahí lo habíamos dejado, ninguna parte se buscaría, pero fue tanta la obsesión conmigo que insistió en escaparnos y hacer una vida juntos — Yeon dio un gran suspiro y continuo — pero fue cuando tú llegaste y entonces me confundí más de lo que ya estaba, para ese entonces ya le había contado a Heenim — Jin interrumpió — No necesito que me cuentes todo esto si estas incomoda, no importa lo que hayas vivido, no importa lo que sucedió con el profesor Gun, o lo que está sucediendo con él y contigo — interrumpió ahora Yeon — necesito que entiendas que desde las primera vez — siguió hablando Jin — por favor ahora escúchame tú — Yeon hizo caso omiso a lo que ordeno Jin — desde la primera vez que te observe en el salón de música llamaste mi atención y no de una forma de amistad ¿entiendes? — Jin abrió los ojos como platos — Y por eso quiero que entiendas, hoy le deje en claro a Gun lo que siento y no lo tomo nada bien, entonces fue cuando tu llegaste y me sacaste de ahí y realmente lo agradezco — Yeon se levantó de la cama — eso era todo lo que te quería explicar — para después salir de la habitación, lejos de la vista de Jin.

—   Maldita sea — replico mientras se dejaba caer en la cama y estuvo así unos minutos estaba preocupada por  ¿cómo iba a pasar toda la noche con su  compañera sin que sus sentidos la quisieran traicionar? Y también se encontraba curiosa por los sentimientos de Yeon hacia ella, cerró los ojos por unos momentos y sonrío — Oye deberías mantener esa sonrisa siempre te ves linda — Yeon se sonrojo un poco y lanzo su mochila y la mochila de Jin con cuidado, sin lastimarla — ¿Hicieron algo importante hoy? — Pregunto Yeon intentado ocultar su vergüenza — ¿importante? ¿Cómo que importante? — Jin miro su mochila que estaba al lado izquierdo y el tiro fuera de la cama — Si, bueno ya sabes, algún examen u algún trabajo — Decía Yeon mientras se sentaba en frente de Jin — ¡Ah! Eso, bueno realmente no recuerdo nada, pero creo que tenemos examen de inglés y supongo que es oral — decía Jin de una forma muy despreocupada observando los gestos de Yeon que al parecer tenía que estudiar mucho — Será sencillo así que no te preocupes — Yeon se hizo para atrás realizando un gesto de desaprobación — Elly, no es lo mío ese idioma, a penas y pude pasar el escrito — se cubrió los ojos — necesito ayuda con eso — se volvió a acomodar quedando en frente de Jin — ¿Me ayudaras? Bueno no sería justo, te debería miles de cosas  — Suplico Yeon — Claro, no importa que me debas miles, en alguna ocasión te pediré de tú ayuda — tomo su mochila y saco sus apuntes — mira supongo que vendrá algo relacionado con estos verbos— comenzó a hojear su libreta mientras que Yeon se acercaba más para observar — Estos — mientras daba pequeñas palmadas a la libreta y al notar la cercanía con Yeon comenzaba a ponerse nerviosa, Yeon coloco su mano en la pierna de Jin sin querer — ¿Eso? Definitivamente voy a reprobar — HyoJin se ruborizo  ante la acción de Yeon — No...no lo harás — su voz se escuchaba nerviosa — ¿Elly? ¿Te sientes bien? — Se acercó más para tocarle la frente — Oye en serio estás bien te siento caliente — termino de decir Yeon a Jin — Ah...si... bueno en que quieres que te ayude Hani... — Quito la mano de Yeon de su rostro — ¡Cierto!

En estos — Frunció el ceño — Son realmente difíciles de pronunciar — Jin río un poco — Claro que no, mira estos solo apréndetelos— Jin comenzó a explicar a esta Yeon quien solo estaba prestando atención a los labios de su compañera directamente sin ninguna discreción — Es fácil ahora ¿no? — Termino de explicar Jin y observo que su compañera estaba concentrada en el movimientos de sus labios, así que los mojo un poco para mirar la reacción de Yeon quien solo se sonrojo y aparto la mirada de ellos — ¿Prefieres comer primero? — Expresó Yeon nerviosa haciendo que el tema cambiara drásticamente — Tengo un poco Kimchi y unos cuantos Bungeoppang o eso supongo, iré a revisar ¿me esperas? — Jin se levantó y siguió a su compañera — Hani — se acercó a donde estaba Yeon y la acorralo entre una barra con sus manos, quedando ambas mirándose fijamente — No sé cómo lo tomes pero necesito hacerlo — Hyojin tenía la respiración acelerada. No podía creerse que estuviera en aquella situación, se acercó con suavidad; sus mejillas estaban ruborizadas. Ambas estaban nerviosas.

Por fin, sus labios se tocaron con suavidad. El corazón de Yeon le martilleaba en el pecho, y casi podía notar el de Jin contra sus dedos mientras se aferraba en la camisa. Jin sentía que estaba a punto de estallar por lo ruborizada que se encontraba.

Se separaron tímidas, y evitaron mirarse a los ojos. Jin estaba tan avergonzada que sentía que Yeon la iba ignorar, pero a la vez estaba tan feliz pues el dulce sabor que pudo apreciar de Yeon. Jin quería continuar probando más de Yeon pero sintió que invadió su espacio personal abruptamente así que solo se alejó y regreso al cuarto de su compañera con las mejillas muy rojas y sin decir algo más se sentó en la cama con una gran sonrisa — Lo hice — dio un gran suspiro y se volvió a decir ella misma — Lo hice — sonrío y siguió hablando con ella misma — Me salte un paso, maldita sea, da lo mismo, igual me atreví a besarla — su emoción era tan grande que se dejó caer en la cama, esperando que su compañera no se fuera o no entrara a la habitación, dio oro gran suspiro y sonrío, Jin parecía una niña pequeña recordando lo que sucedió hace poco y cada vez que recordaba el sabor de su compañera mordía su labio —Debí de atreverme y besarla más — se decía ella misma —igual si voy no podré contener mi vergüenza — sonrío — y mi felicidad — agacho su mirada — Maldita sea Ahn Hyo Jin — volvió a sonreír  y de la nada entro Yeon sin decir una palabra, se dirigió a donde estaba Jin sus dedos agarraron su cabello con fuerza, tirando de ella, ahora Yeon era quien la besaba primero, sus labios se tocaron una y otra vez, sus lenguas jugueteaban. Parecía que ambas competían por ver quién era más rápida. Yeon soltó un gemido y se separó unos segundos paro poder respirar un poco, notando la cálida mano de Jin acariciando su cintura. No tardaron más que unos instantes en volver a unir sus bocas. Esta vez, fue un beso lento y profundo que dejo a ambas sin respiración. — Yeon — finalmente pronuncio Jin un poco sobresaltada y sorprendida por lo que sucedió — Yeon. Sé que es muy prematuro pero... — se sonrojo aún más de lo que ya estaba — Tú me gustan Ahn Hee Yeon — Jin solo sonrió mientras intentaba ocultar su mirada.

Yeon salió de la habitación sin decir una sola palabra y sin mirar a su compañera, ignorándola por completo e ignorando la confesión de ella, de Jin.
¿Que había sucedido con el anterior ambiente? Jin sabía que no esta bien ocultar lo que siente, pero al parecer su acción fue demasiado prematura, inclusive besar nerviosamente a su compañera, pero después de todo obtuvo lo que quería, degustar el dulce sabor de sus labios.