Clarity (Paulo Dybala)

Capítulo 24

- ¡Thiago!

- Tania, boluda, vení a casa que ya he vuelto, por suerte papá y mamá no están para echarte la bronca, dale.

- Ya voy, ni se te ocurra irte.- me levanté y miré a Paulo colocarse bien.- Thiago ya está en casa.

- Puedes quedarte un rato más.

- Mejor que me vaya, si mis padres llegan y no me ven me ma...- el timbre de la casa sonó y Paulo se levantó sonriendo, por un momento pensé que era Antonella, pero no.- Oh no.

- ¡Vos!- vino corriendo hacia mí y se paró en frente, no sabía que iba a hacer.- La próxima vez que te diga que te vienes conmigo, te vienes pase lo que pase.- y me abrazó.

- Vale, Leo, tranquilo que no sos mi padre.- reí en sus brazos y me separé.- ¿Dónde están los enanos?

- ¡Aquí!- oí a Thiago detrás de Leo y me asomé.- ¡Tania!

- Hola enano.- abracé al hijo mayor de Leo y luego miré a Anto, que llevaba consigo a Mateo y estaba hablando con Paulo.- Anto, tráeme a la pulga.

- Aquí lo tenés, esta a tu lado.- miré a mi lado, estaba Leo y eso nos hizo reír a todos menos a él.- Dale amor, no te enfades.

- Las pulgas no se enfadan.- Leo cargó a Mateo y luego me lo pasó a mi.- La nueva tía.

- La tía guay y sexy.- dije sonriendo al ver a Mateo reír.

- ¿No está Antonella?

- No, se marchó un poco antes de que Tania despertara.

- Así que solos...-susurró Anto a mi lado y reí al escucharla.- Demos un paseo, pero te tenés que cambiar Tania.

- No, no, yo me tengo que ir a casa, mi hermano me está esperando.

- ¿La encarcelaste aquí?

- Ojalá.- dijo Paulo riendo.- No había nadie en su casa y no tenía las llaves.

- Pero ahora sí.- puse a Mateo en el suelo.- Así que chao.

- Te puedo acompañar.

- Te acompañamos todos y así hacemos ese paseo aunque no te cambies.

- Está bien.- reí levemente por la intención de Anto de cambiarme de ropa.

Le di la mano a Thiago y me puse delante de los demás, que hablaban animadamente mientras yo jugaba con él. Lo subía y levantaba del suelo cuando saltaba, sabiendo que lo haría. Luego él quiso jugar con su padre, subiéndose a sus hombros.

- ¿Cuándo volvés a Cataluña?

- A finales de las pequeñas vacaciones, vos igual supongo.

- Sí.

- Así que yo me voy a Italia y todos vosotros a Cataluña, esto está descompensado.

- Que se vaya Tania contigo y ya está.

- Me tendré que llevar entonces a su novio y volverá a estar descompensado.

- Pues él se queda aquí.- dijo Anto sonriendo.- Tampoco lo echaremos de menos.

Reí al escucharla. Por fin llegamos a mi casa, me despedí de ellos y entre, encontrándome con Thiago jugando a la Play. Me senté junto a él y jugué una partida, después me fui a cambiar poniéndome una sudadera con pantalones de gimnasia anchos, hoy no saldría de casa en todo el día.

Me tumbé en mi cama con el móvil y después encendí el ordenador, viendo poco después como alguien me llamaba por Skype, exactamente Marc.

- ¡Hola Marc!