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- ¡Corre!

Estoy corriendo tan rápido como puedo, mis piernas arden y siento que no puedo respirar, pero tengo que seguir.

Todo esta oscuro, es de noche y parece que estoy en un ¿bosque?. Se escuchan gruñidos y una voz gritando que corra, que no mire atrás.

— es un sueño.— seguí corriendo y repitiendo eso.

Pero al parecer no lo es, no sé como estoy aquí, no recuerdo, pero tengo miedo.

Mis piernas estaban cansadas, yo estaba cansada y se notó porque acabo de caerme de cara a la tierra. Por suerte había una piedra gigante a un lado y me arrastre hasta ahí para tratar de esconderme, ya no podía correr más.

mi respiración esta demasiado agitada pero trato de respirar silenciosamente, nisiquiera me había dado cuenta de que estoy llorando.

Todo se escucha más cerca pero distorsionado, eso significa que me voy a desmayar, carajo.

Tengo que seguir corriendo.

Me levanto y miro hacia atrás, preferiría mil veces no haber hecho eso. Horror.

Es un monstruo tratando de alcanzar a un chico, vienen hacia acá. Mierda

A correr por mi vida. Comencé a correr y ahora si, sin mirar atrás, pero no puedo dejar de pensar en esa cosa, ¿Qué coño es?.

Tropece con una piedra y caí, nuevamente, de rodillas. Es mi final.

- Te dije que no voltearas, ven aquí.- dijo alguien, mejor dicho el chico, el se encuentra escondido entre unas rocas gigantes.

Me ofrece su mano y la tomo, me jala mientras yo me arrastro hasta llegar a su lado, trato de verle la cara pero todo esta muy oscuro y solo los veo... Sus ojos...

Un par de hermosos ojos color verde. Verdes.

Silencio (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora