Con ver las tendencias se explicaba todo, aquel tweet que tenía el ruloso en ''favoritos'' ya no existía, aquel hermoso tweet, el último que hizo antes de iniciar con aquella farza llamada Eleanor Calder había dejado de existir, los fans tal vez comprendiendo el dolor del mayor, pero la verdad era que ese sentimiento era sencillamente insoportable.
- Perdóname Harry, perdóname por favor - Sollozó el castaño con lagrimas en sus ojos.
- Tranquilo Louis - Susurró el rizado suavemente envolviendo el pequeño cuerpo del castaño entre sus brazos. Nunca notó cuando se torno tan indefenso y vulnerable, continuaba haciendo caso omiso sobre ingerir más alimentos, pero al menos no podría empeorar-
- Pero yo no lo hice, yo no lo borré - Susurró mientras escondía su húmedo rostro entre el pecho del rizado. Sus ojos rojos del llanto y los surcos que dejaron las lágrimas a su paso mostraban una imagen deprimente de lo que alguna vez fue el sonriente Louis Tomlinson.
- Lo sé Louis, fueron ellos - Dijo con tristeza sintiendo como su camisa se humedecía a causa de las lagrimas de su pequeño. El día empezaba mal, una mañana fría que daba pocos ánimos sin contar los mensajes de los chicos alterados por la desaparición de el hermoso tweet.
- Ya no puedo más Harry, estoy cansado - Dijo entre sollozos aún sin despegar su rostro del pecho del rizado. Y era cierto, cada vez sentía que no podría más, pero siempre tendría a su gran rizado a su lado, dándole consuelo y siendo valiente por los dos.
- También yo Louis, también yo - Dijo en un hilo de voz, un nudo se había formado en su garganta al ver el estado en que se encontraba su amado Louis. Se conformaba con saber que pronto se liberarían de este infierno y que todo valió la pena.
Harry apretó el cuerpo de Louis con un poco más de fuerza atrayéndolo hacía el suyo aún bajo las cobijas y recargó su barbilla sobre su cabeza sintiendo como sus largos cabellos castaños le hacían cosquillas.
Ambos estaban cansados, aquella era una lucha que parecía no tener final, pero ellos seguirían adelante, su amor era lo suficientemente fuerte como para destruir cada obstáculo que se pusiera en su camino, porque ellos serian felices, y pronto lo conseguirían. Todo el apoyo de los verdaderos fans los estaría manteniendo fuertes y con esperanza de algún día poder por lo menos tomarse de las manos en público, sin restricciones, sin juicios, sin miedo, como toda relación debería de ser.
