¿ Quién es el hombre de mi vida?

Segunda opción

A veces me pregunto si todo lo que he vivido hasta hoy ha sido producto de mis pésimas decisiones o es debido a mi mala suerte. Soy un desastre, acomplejada, torpe, aburrida para muchas personas y destinada a ser la amiga eterna de los tipos que me han gustado.
He de empezar con la premisa de que cada chico que le gustaba y llegaba a casa a hacer algún trabajo terminaba irremediablemente enamorado a lo estúpido de mi prima Annia. Me sentí mil veces invisible si ella entraba en escena, es que ella es preciosa con una belleza de esas que hacen que todos volteen a verla, que si entra a un lugar no hay nadie que no note su presencia, yo en cambio, soy simplemente yo.
No es que me considere un ser espantoso, sin embargo, nunca destaqué en nada más que en el colegio. En tantas ocasiones resulté ser la segunda opción como con Joseph mi primer novio, todo empezó como la amiga-cuñada que está ahí cuando la novia le hace añicos el corazón, visible solo cuando es menester un paño de lágrimas pero irremediablemente gris cuando la chica guapa se digna a darle una mirada.
Mi historia con Joseph inició como lo hace toda historia que está condenada desde el principio. Con un típico " no sé qué haría sin vos y tus consejos, sos la mejor"
¡ Dios! Alerta, que mi estúpido corazón aceleró a mil revoluciones y cuando me di cuenta ya era novia del ex de mi prima, pero no hablaré en especial de este tipo por ahora porque aunque llegó a amarme de una forma desmedida que aún hoy en día sigo manteniendo la idea que nadie me amó como Joseph , también me lastimó, conservo recuerdos de mi chico casi perfecto, que me demostró que el amor de verdad traspasa el tiempo.
Hoy limpiando mi librero encontré un libro que me regaló muchos años después de despedirnos y no pude evitar  recordar cuanto me amó y cuanto me enseñó que las segundas opciones también te pueden hacer amar.
Las cosas con él se fueron al diablo cuando estuve en mi último año de secundaria, obviamente otro desastre estaba por sacudir mi mundo, un desastre de categoría inconmensurable que me haría replantearme tantas cosas en mi mundo.
¿Han tenido alguna vez un terremoto de ese calibre en sus vidas? Si es así entonces comprenden como vibra la sangre en el cuerpo cuando conoces a quien podría ser el amor de tu vida. Eso fue mi perdición.