CAPITULO UNO

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JAVIER POV

Un ruido infernal mezcla de un gato en celo y una foca moribunda se metía en mis sueños y taladraba mi cabeza. Me levanté lo más rápido posible solo para darme cuenta que era mi gata Effie peleándose con el perro chihuahua de mi novia, Miki. Como pude los separé mientras regañaba a mi consentida mascota:

—Effie mala, debes respetar a Momo si es que no quieres que te castigue. Ahora vete que papá quiere dormir.

Saqué a los animalitos para poder dormir a mis anchas. Apenas había logrado envolverme en los cobertores y acomodarme en la cama cuando la alarma sonó: era hora de levantarme. Nota mental: mantener a Effie lejos de ese mugroso perro si es que quiero dormir a gusto. El problema es cómo hacerlo sin que Miki se moleste ya que ella adora a ese animal calvo y malhumorado. Bueno, que se le va a hacer gajes del oficio.

A regañadientes, me duché y arreglé para ir a entrenar a la pista de hielo. Porque si no les había comentado, mi nombre es Fernández, Javier Fernández y practico el patinaje artístico sobre hielo.

Mi novia Miki, me esperaba en la cocina con el desayuno.

— ¿Ya te vas tan pronto, amor? Yo que quería pasar más tiempo contigo antes de irme al evento de patinaje que tengo programado hoy.

—Pero tendremos toda la tarde para nosotros, no lo olvides. –le sonreí mientras comía un poco de la fruta que ella tan amablemente me había preparado.

Terminé de comer en cinco minutos, le di un prolongado beso de despedida mientras la apretaba fuertemente contra mí. Miki, nerviosa, retiró rápidamente mi mano de su trasero.

—Basta Javier, que se nos hará tarde a los dos— rio traviesa.

—Ok, pero esta noche no te escapas—prometí mientras devoraba sus rojos y suaves labios de nuevo. Ella debía irse a trabajar así que muy a nuestro pesar nos separamos. Miki y yo tenemos una relación de larga distancia, por lo que cada minuto juntos es valioso y debemos aprovecharlo al máximo.

Me subí a mi automóvil y en cinco minutos estaba en el Cricket club entrenando junto a mi mejor amigo Yuzuru Hanyu.

Yuzuru y yo hemos sido compañeros de entrenamiento por años, aunque con el paso del tiempo él se ha vuelto como un hermano para mí. Él es el actual campeón olímpico y campeón mundial. Nunca he conocido una persona más dedicada que Yuzuru. Además posee un hermoso rostro y si no tuviera ese cuerpo tan bien formado, podría confundírsele con una chica, así de bello es.

Pero no me malinterpreten, admiro su belleza, pero hasta ahí.

Terminando el entrenamiento del día, Yuzuru y yo platicamos un poco mientras nos cambiamos en el vestidor.

—Hey Yuzuru ¿Cómo va todo?

—Dentro de unos días tendré una presentación donde daré a conocer mi FS. Esta vez debo hacerlo perfecto,  no quiero defraudar a todos los que confían en mí.

—No debes de preocuparte, todos caerán rendidos a tus pies, como siempre.

Yuzu se ruborizó, apenado por el halago.

—Gracias, amigo. Tus programas también lucen increíbles esta temporada.

—Han sido un dolor en el trasero, pero he dado mi mejor esfuerzo. No me vencerás tan fácilmente esta vez ¿Me oyes, Yuzu?

Yuzuru sonríe divertido ante mis palabras.

—Claro, Javi. Será un honor competir contigo de nuevo.

El ambiente se ha puesto un poco tenso, así que decido cambiar el tema para aligerar un poco las cosas.

—Y ahora cuéntame, ¿Cómo andas de amores?

—Hay una persona que me gusta, pero no me animo a decírselo, no quiero perder su amistad.

—Anímate,Yuzu. No hay peor lucha que la que no se hace.

—Lo sé, aunque no es tan fácil...—titubea por un segundo y se me queda mirando como si quisiera decirme algo. Le sostengo la mirada hasta que él desiste de su intento y cambia la conversación— ¿y cómo van las cosas con Miki?

—Mejor que nunca, si todo sigue como hasta ahora yo creo nos casaremos pronto.

— ¿En serio?, que bueno—murmura Yuzuru con un tono de voz que es todo menos alegre

—Si no fuera porque eres mi amigo, juraría que no te alegra nada el que me case con Miki

—No me malinterpretes, es solo que... creo que eres muy joven para casarte.

—Tonterías, además si nos amamos no veo porque no debamos estar juntos, ¿no te parece?

—Tienes toda la razón—murmuró Yuzuru —Disculpa si te ofendí, es solo que estoy un poco estresado por lo de la presentación.

—No tienes por qué disculparme, tu puedes hablarme con franqueza ya que más que mi amigo eres como mi hermano.

Yuzuru esbozó una sonrisa que conozco demasiado bien: es la sonrisa que usa como una máscara para engañar a los demás. Excepto a mí.

Tenía deseos de preguntarle el por qué usaba esa sonrisa conmigo, si se supone podemos confiar plenamente el uno en el otro, pero Brian nos interrumpió: necesitaba hablar con Yuzuru para lo de su presentación. Me despedí de él con un afectuoso abrazo y me retiré apresuradamente para ir a mi cita con Miki.

No me imaginaba entonces lo que murmuraba Yuzuru para sus adentros ese día:

—Estúpido Yuzuru ¿Cuándo se lo vas a decir?

CONTINUARÁ...

TRES SON MULTITUDDonde viven las historias. Descúbrelo ahora