Estaba pensando que quería escribir desde hace mucho tiempo, en realidad, desde que tengo uso de razón. Hoy en mis dedos bailaban los deseos pero los ignoré.
Amanecí agria y deprisa, como siempre. ¿Acaso será pretexto mío para ser consumida por la amargura?
Este día no tuve fuerzas para retener a la gente que partió de mi lado. Me gusta estar sola pero mis pies están cansados de soportar tanto peso y en mi pecho siento un nido de arrepentimiento.
Las palabras complicadas son tímidas para salir en la noche, en cambio, mis dedos inquietos quieren escribir verdades atrasadas. No los dejaré.
Hoy me atreví a buscarte de nuevo, ¿piensas hacer algo por esta dama rota? Me niego a esconder mis esperanzas en el cesto frío de calcetines.
Mis ojos parecen cansados mientras me cosquillea la nariz. Hoy mis anteojos necesitan la potencia de un telescopio que capte los deseos más lejanos de la galaxia.
Eso es todo. El hambre atrae a la mosca que revolotea entre mi desazón. ¿Por qué no invitarla a pasar?
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INTENTO GRATO
Short StoryUn mísero intento de una joven que se animó a escribir por primera vez al público en general.