PENSÁNDOTE Y AMÁNDOTE

81 5 0
                                    



Hoy me he querido convertir en tu pensamiento, para penetrar en cada uno de los secretos de tu vida, y experimentar contigo los deseos de felicidad que se trenzan desde tu alma, buscar a la diosa del olvido para que me acompañe en los rincones de tus recuerdos y se lleve consigo tus tristezas y melancolías, tus angustias y pesares, tus miedos y temores.

Hoy que soy tu pensamiento, busco en tus ayeres esos instantes que te hicieron reír a carcajadas y aquellos, que en cualquier momento pintan una bella sonrisa en tu rostro, quiero traer a ti la soledad, no la que entristece sino aquella que te hace traer del pasado lo hermoso de la vida, esa soledad, que siempre será dulce compañía.

Soy tu pensamiento y estoy en ti, pensando que tú eres mi pensamiento, que te pienso aun sin pensarte, y hasta pienso que en lo profundo de tu pensar no debe existir el olvido, y si la muerte arrancarme tu pensar quisiera, que pena sentiría por ella, de nada le serviría quitarme la vida, pues antes de morir, mate al olvido.

Hoy que eres mi pensamiento, siento extraño como te pienso, porque siento, que te siento en mí, sin que me importe la distancia, que te toco aun sin presencia, queriendo que estés a mi lado, que te beso sin necesidad de tu boca, aun sabiendo que la necesito, que te toco sin tener tu cuerpo, pero que muero por tenerlo un instante, y te extraño.

Hoy que soy tu pensamiento, encuentro la felicidad de las rojas alegrías, que danzan sin temores donde un día habito el olvido, y miro en el espejo de tu alma el significado profundo del te amo, y siento que te amo, aun sin pensamiento, y siento que amo en el pensamiento mismo, y siento solo siento, que te siento en mi pensamiento

Pedro Castellón Córdoba.

Antología ColombianaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora