Cap. 3

667 100 1
                                    


Su respiración era pesada, sus pasos cada vez eran más lentos, estaba cansado y lo peor de todo es que no sabía dónde estaba.

Aquellos árboles que antes veía, los fue perdiendo de vista al igual que aquel camino que él seguía, pues la neblina le impedía ver con claridad. Lo único que se escuchaba eran sus pisadas, su respiración y el silbido que emitía la fría brisa.

«¿Dónde estoy? ¿Cómo fue que llegué hasta aquí? No recuerdo nada» Pensó él deteniendo su paso.

Un escalofrío recorrió su cuerpo al escuchar el aullido de un lobo. Estaba nervioso y ahora tenía miedo.

«Tengo que salir de aquí» Se dijo a sí mismo mientras comenzaba a caminar de nuevo.

Algo volvió a detener su paso, y ésta vez fue el ruido de unas pisadas. Alguien se acercaba a él, podía sentirlo. Comenzó a correr pero el camino ahora era fangoso, haciendo su paso lento. Aquello que lo seguía lo podía sentir cada vez más cerca.

Dándose media vuelta, gritó a todo pulmón. 

— ¡¿Qué es lo que quieres?!

No obtuvo respuesta, en cambio dejó de escuchar aquellas pisadas. De pronto, sintió una presencia tras de él. No se volteó, no podía, tenía mucho miedo. Aquella cosa que estaba tras de él comenzó a acercase a su oído, su pulso se aceleró al escuchar su voz.

— No lo encontraras.— Le susurró.

Jinyoung no reconoció aquella voz, pero ya sabía a quien se refería. A pesar del miedo que tenía le contestó con voz segura.

— Lo haré, voy a encontrarlo.

Aquella presencia se rió de lo que dijo, una risa malévola y algo escalofriante, que provoco una inmensa ira dentro de Jinyoung.

Antes de que alguno digiera algo más, escucharon una voz algo alejada, esa voz Jinyoung la reconoció de inmediato. Sus ojos ya estaban llorosos y su corazón ahora latía mas rápido por aquella voz que dijo su nombre.

— Jaebum.— Susurró él.

¡Jinyoung!

Volvió a escuchar que lo llamaba, olvidando la presencia que estaba aún tras de él, comenzó a tratar de correr hacia el lugar de dónde provenía la voz de Jaebum.

Ni siquiera pudo dar dos pasos, algo lo detenía. Aquella presencia lo había tomado de los brazos impidiendo que se fuera.

— No te dejaré que vayas por él.— Le dijo con voz autoritaria.

— ¡Sueltame!.— Jinyoung trataba de librarse de su agarre. La voz de Jaebum volvió a llamarlo, ésta vez escuchó la desesperación en él.— ¡Jaebum! ¡Jaebum, ¿Dónde estas?!

No obtuvo respuesta. El agarre de aquella presencia se hacia cada vez más fuerte, y ahora lo arrastraba en dirección contraria de Jaebum.

— ¡Ya sueltame! ¡Déjame ir! ¡Jaebum!

— ¡Jinyoung, ayudame!.— Le gritó Jaebum.

Las lágrimas ya corrían por sus mejillas, se sentía impotente, Jaebum lo necesitaba y no podía ayudarlo.

— Por favor sueltame, tengo que ir con él, necesita mi ayuda.— Suplicó Jinyoung llorando.

Aquella presencia detuvo su paso, más no lo soltó.

— ¿Por qué?.— Le preguntó enojado y dolido.— ¡¿Por qué lo amas a él y no a mi?!

Entonces Jinyoung reconoció aquella voz, se sentía un poco aliviado, pero aún tenia miedo por Jaebum quien lo seguía llamando.

— Sueltame Mark.— Susurró Jinyoung.

Cuando le hizo caso, se dio la vuelta y lo observó. Mark también lloraba.

— Siempre te he amado Jinyoung.— Le susurró agachando su mirada.

— Mark...

Jinyoung no sabía que hacer, ni que decir. Jaebum aún le estaba llamando, pero Mark estaba ahí frente a él declarándose. Tenía que tomar una decisión, quedarse para hablar con Mark o ir a ayudar a Jaebum.

Sin decir algo, se dio la vuelta y comenzó a correr, el camino ya no era fangoso, podía correr.
Su corazón y su cuerpo ya habían tomado una decisión, y era ir con Jaebum.

Después de correr por un rato comenzó a gritar su nombre.

— ¡Jaebum!

Jinyoung había dejado de escuchar su voz desde que se alejó de Mark.

Dejó de correr para caminar y poder mirar a su alrededor. La niebla había desaparecido, estaba en un bosque.

— ¿Jaebum?... ¡Jaebum!.

Nada, ni un solo ruido. Ahora estaba más desesperado que antes.

«Soy un idiota, me he tardado en ir hacia Jaebum que no pude ayudarlo» Se reprochó a sí mismo.

Un punzante dolor en su pecho lo hizo retorcerse, el dolor era muy fuerte.

— Jaebum.— Murmuró él cuando cayó arrodillado en el suelo.

— Tú tienes la culpa.— Le reprocharon.

Era Jaebum, levantó su mirada, estaba parado frente a él.

Aquella sonrisa que se había formado en los labios de Jinyoung al escuchar su voz, se borró. Su ceño estaba fruncido, él lo miraba con odio.

— ¿Jaebum?.— Preguntó Jinyoung al borde del llanto.

— Cállate, tú tienes la culpa de que yo me haya marchado.

— ¿Yo... Por qué? ¿Qué... Qué fue lo hice?

— Tú lo sabes muy bien.— Su voz era fría, distante y molesta. Jaebum nunca le había hablado de esa manera.— No me busques, no vas a encontrarme.

— Estas parado... Justamente frente a mi...— Le decía Jinyoung levantándose, el dolor de su pecho cada vez era más fuerte.— Y no voy a dejarte ir Jaebum.

Cuando intentó tomar su mano él se apartó.

— Ya lo has hecho.— Le contestó Jaebum dándose la vuelta y comenzando a caminar. 

— ¡Jaebum, regresa!... ¡Jaebum, Te amo!

Él no se detuvo, siguió su camino. Jinyoung intentó seguirlo pero no pudo, su cuerpo no reaccionaba. La ira, la desesperación, y el miedo comenzaron a apoderarse de él.

— ¡Voy a encontrarte Jaebum!... ¡Te juro que voy a encontrarte!

Entonces despertó. Sentándose en la cama Jinyoung observó su alrededor, estaba en su habitación. Su respiración estaba agitada y su cuerpo sudaba.

«Solo ha sido un sueño» Pensó Jinyoung llevando una mano a su frente.






Voy a Encontrarte Jaebum «Bnior» TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora