La aguja. Cap 27

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Kev-zeus comenzó a ponerse morado porque Homin lo estaba ahorcando con una mano. Seles corrió hasta Homin para atacarlo, pero Homin lo pateo en la cara y le aventó a Kev-zeus en el vientre. Homin comenzó a acercarse a ellos mientras Kev-zeus se levantaba tociendo sangre, y Seles estaba desmayado en el césped humedo. Homin se paró en frente de los dos y les dijo:

—¡Vaya!, son demasiado debiles. Mejor mataré a uno de ustedes... a Seles.

—Kev-zeus gritó: —¡No!—

Y trató de golpear a Homin con el puño derecho, pero Homin lo detuvo con su mano izquierda y golpeo a Kev-zeus en el abdomen con su mano derecha tan fuerte que lo hizo escupir sangre, y lo golpeo otra vez con su mano izquierda en la cara. Kev-zeus cayó al suelo sangrando por la nariz.Homin miró a Seles y comenzó a hablarle mientras alzaba su pie.

—Adiós Seles, sabio del amor—

Pero antes de que Homin aplastara a Seles, Seles se rompió como cristal; Homin quedó impresionado y confundido,y en ese momento le dispararon una flecha desde atrás en la espalda a Homin, Homin volteó y era Seles con su arco. Homin asustado le dijo:

—Pensé que explotaste.—

Seles contesto mientras caminaba hacía Homin:

—No, solo fue un truco de quinta, no se como un dios "poderoso" creyó algo así.—

Seles se detuvo a 10 metros de Homin, agarró una de sus flechas, la acomodó en su arco lista para disparar, y le dijo a Homin: —Será mejor que te defiendas.—

Seles disparó la flecha a Homin, y Homin la detuvo con su mano, pero Seles comenzó a disparar muchas flechas muy rápido; Homin logró detener algunas con sus manos, pero le rozaron el cuerpo hiriéndolo. Cuando a Seles se le terminaron las flechas, Kev-zeus rápidamente se levantó del suelo y golpeó fuertemente en la cara a Homin y lo golpeó dos veces en el abdomen con su rodilla, y Homin cayó al suelo.Kev-zeus pensó que la pelea ya había terminado, y comenzó a caminar hacía Seles con las manos en sus bolsillos, cuando Seles vio que Kev-zeus se dirigía a el le preguntó:

—¿Que sucede? ¿por que te estas acercando?—

Kev-zeus le respondió con una sonrisa en su rostro:

—Nuestro trabajo a terminado, vámonos.—

Kev-zeus escuchó algo que venía de atrás suyo, volteó y era Homin levantándose del suelo, y sacudiéndose el polvo; Kev-zeus se asustó al ver que Homin se levantaba como si nada.Homin les dijo a Kev-zeus y a Seles:

—Niños, niños, así nunca me ganarán.—

Homin puso entre sus dedos unas de las agujas que estaban clavadas en su labio inferior, la arrancó y le dijo a Seles sarcásticamente:

—Ten cuidado Seles.—

Seles se preparó para esquivar la aguja. La aguja empezó a crecer en la mano de Homin hasta llegar a los 20 centímetros. Homin lanzó la aguja; la aguja se dirigía hacía Seles, pero cuando estaba a un metro de él, la aguja se desvío clavándose en el cuello de Kev-zeus, Kev-zeus cayó al suelo, y Seles quedó impactado al ver que la aguja no le avía dado, y le pregunto a Homin:

—¿Q-que pasó? La aguja se dirigía hacía mi, yde repente...—

Seles estaba muy confundido que no sabía que decir.Homin le respondió:

—Las agujas, bueno, mis agujas...— remarcando la palabra "mis" —... y yo somos un equipo, una familia, uno solo. En resumen yo las controlo.—

De repente Seles escucho un tosido húmedo, similar a cuando alguien tiene agua o algún líquido en los pulmones, que venía del suelo, se agachó y vio a Kev-zeus tosiendo sangre con la aguja en el cuello; Kev-zeus estaba tan débil que no se podía mover ni para quitar la aguja. Seles rápidamente se agachó y puso su mano en la aguja para sacarla, pero Homin le dijo

:—¡Espera! Si le quitas la aguja morirá, porque empeoraría la hemorragia.—Seles le contestó:

—Es un dios, no le pasará nada—

—Es una herida grave, y nosotros los dioses solo somos inmortales porque nunca morimos de vejes. Además, por alguna razón está más débil que antes, así que con más razón será mejor que lo dejes. Por cierto, ¿por que te vez más pequeño? Se que eres el dios del reino 12 con menor estatura, pero no te recordaba así, pareces un humano—

Seles le contestó de una manera grosera:

—A ti que te importa, yo soy yo, no tienes derecho a decirme nada de eso—

Homin rió levemente y le dijo a Seles:

—¿Acaso Cupido no te enseñó modales? Ah, creo saber que te pasó, fue tu amiga, la científica, de seguro te dío algo para reducir tu tamaño y tal vez también le dío algo a Kev-zeus para reducir su fuerza, ¿o no es así?—

Seles corrió hacía Homin e intentó golpearlo; pero Homin esquivó el ataque de Seles, agarró su brazo y lo aventó cerca de dónde estaba Kev-zeus desangrándose. Homin empezó a caminar hacía Seles, pero al dar el séptimo paso se escuchó la voz de Anubis dirigiéndose a Homin: "Homin, regresa, es todo por ahora". Atrás de Homin apareció una puerta gigante, Homin se dío media vuelta, abrió la puerta, volteó viendo a Seles y le dijo:

—Será mejor que se preparen, porque no les diré adiós... aun—

Homin entró al portal de la puerta mientras esta se cerraba, y cuando secerró la puerta desapareció como arena en el aire.

el olimpo de kev-zeusDonde viven las historias. Descúbrelo ahora