Capítulo 05

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El día estaba soleado, como un buen día de verano. Una sonrisa iluminaba su rostro como el gran sol el cielo, se sentía iluminado, pero no como si tuviera esperanza, no; sino que se sentía satisfecho. Todo estaba saliendo justo como lo había planeado.

Miró a su lado en el asiento copiloto a su esposo dormir plácidamente, le parecía tan tierno; sin embargo, estos últimos años no tenía el mismo sentimiento hacia él como cuando recién lo conoció y en sus años de noviazgo. El tener a KyungSoo a su lado lo sentía más como una necesidad, creía que estos últimos dos años tan sólo los mantenía juntos el compromiso, aún mantenía algún tipo de aprecio hacia el hombre de tez blanca y ojos grandes, mantenía cariño hacia a él, mas no amor. Al menos eso creía.

Una pequeña sonrisa surcó en sus labios cuando el pequeño hombre despertó y bostezando tiernamente tomó su mano libre colocada en la palanca del auto. ChanYeol tan sólo se dejó hacer sin decir nada. KyungSoo jugó un rato con sus manos entrelazándolas y mirándolas con una pequeña sonrisa que se notaba algo decaída hasta que se durmió de nuevo. Últimamente dormía casi todo el día y se sentía con cansancio, los dos lo atribuyeron a que el chico ojón se la pasaba saliendo y trabajando por las noches lo extra que se llevaba a casa.

KyungSoo actualmente trabaja para una empresa de bienes raíces y últimamente tenían mucho papeleo qué hacer. El trabajo lo había obtenido gracias a uno de los amigos de su esposo quién le ofreció ese trabajo al ver la depresión en la que había caído meses antes. Ahora al parecer le iba bien y ganaba un sueldo decente. No obstante, el quedarse despierto hasta tarde y levantarse temprano lo hacían quedar agotado.

Unas horas después llegaron a lo que era su destino. Todo había cambiado a la vista del alto, hace mucho que no regresaba y no lo recordaba de esa manera. El pequeño poblado en donde su abuelo lo había llevado cuando niño seguía siendo el mismo, pero con un toque distinto. Verificó la dirección y se encontró con que era la correcta. Miró a su esposo y viendo lo cansado que estaba y lo mucho que había dormido, decidió que pasarían el día por lo menos en el poblado antes de dirigirse a la villa.

Después de todo a KyungSoo siempre le había gustado conocer y visitar los pueblos.

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HanSol se estaba comportando como un malcriado y BaekHyun había decidido castigarlo. Su pequeño hijo había estado haciendo berrinche todo el día y ni SeHun había podido hacer que cambiara de opinión. Al inicio del día su bebé le había dicho que había soñado algo raro mientras hacía un puchero, lo cual en el momento le pareció adorable, pero cuando le preguntó qué era lo que había soñado HanSol se negó a contarle. Y así es como en todo el día El niño había hecho berrinche, tirando algunas cosas y BaekHyun se encontraba estresado sin saber qué hacer, su hijo jamás había hecho tal cosa.

-Tranquilo, Baek. Ya se le pasará. - SeHun le apoyaba moralmente mientras era abrazado. El castaño tan sólo se mordía las uñas pensando y preocupado por HanSol.

-Es que él no es así, estoy preocupado porque HanSol jamás había hecho un berrinche en donde aventara cosas. El solo se cruza de brazos y... - El menor lo calló besando sus labios castamente, le preocupaba que su novio entrará en algún tipo de crisis mental por estar pensando mucho las cosas.

-Es la edad. - Afirmó el rubio. - HanSol está en la edad en donde hace berrinche por todo y quiere todo para él.

-Pero está siendo grosero incluso contigo y eso no me gusta.

De verdad que estaba preocupado, su hijo parecía un diablito, estaba incontrolable.

-Yo sé lo que te digo, cariño. - Besó su cabeza. - Ahora ve.

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