El club de los incomprendidos

Meses antes

—¿está seguro con esta decisión?—le pregunta Natalie Martin cruzada de piernas

—completamente—afirma el director. Los padres comenzaron a cruzar miradas hasta que por fin Peter Hale se atrevió a hablar

—mi hija no estará de acuerdo con esto—dice ganándose miradas de aprobación por parte de los demás

—créame que a los míos menos—le dice Noah Stilinski acomodándose en su lugar

—obviamente no lo estarán al principio—menciona la señorita Morrel adentrándose al lugar

—disculpe pero ¿quien es usted?—le pregunta Melissa McCall

—mi nombre es Marin Morrel, soy la profesora de francés y consejera de la escuela—Natalie Martin pone sus ojos en blanco—usted debe ser madre de Lydia

Natalie la ve por unos segundos algo desconcertada

—si... ¿como supo?

—su hija hace con constancia ese gesto—camina hasta quedar al lado del director—se mucho de sus hijos... O al menos lo que puedo ver en ellos

—Kira nunca mencionó haber ido a hablar con usted—habla por primera vez el Señor Yakimura

—solo ha asistido una sola vez, al igual que todos los demás

—no entiendo porque justamente solo nuestros hijos deben asistir a eso de...—entrecierra sus ojos tratando de recordar

—reuniones con el orientador—dice Noah Stilinski ganándose una sonrisa amable de Natalie

—cuando pensamos en esto iniciamos con una larga lista en la cuál solamente los casos más serios serían seleccionados, sus hijos son esos casos

—¿que tiene de serio mi hija?—pregunta Natalie Martin en un tono de preocupación, uno que no había utilizado en ningún momento

—¿que tiene de serio? Bueno, Lydia es un chica muy lista y alegre ya que siempre la veo con una sonrisa—Natalie sonríe ante las palabras de la consejera—pero cuando fue a visitarme le pregunte el porque usaba guantes con días calurosos y esa bella sonrisa que siempre trae desapareció

A este punto Natalie se encontraba sin su sonrisa orgullosa

—nunca se han preguntado porque sus hijos actúan de esa manera—suspira—El porque Kira nunca tiene algo nuevo que contar—el señor Yakimura se remueve en su asiento—el porque Micks... Stiles—se corrige al no poder pronunciar el nombre del adolescente—pasa constantemente leyendo cómics en completa soledad sin sonreír o el porque Allison cambio tan repentinamente—Noah Stilinski hace una mueca—el porque siempre recibe quejas por el comportamiento de Malia—Peter Hale rasca su nuca para luego posarla en su barbilla—el porque Isaac no...

—su padre no quiso asistir... —la interrumpe el director posando su mano en el hombro de la consejera. La señorita Morrel hace una mueca triste

—oh... Bueno continuando el porque...

—disculpe al interrumpir su lindo discurso pero tengo que irme a trabajar, mi hijo tiene una vida normal. Muchos amigos, una que otra chica pretendiente y...

—bajas notas—completa

—¿como puede saber que...

—¿le va mal en las clases? Si me hubiera dejado seguir se hubiera enterado que Scott vive nervioso por su calificaciones incluso tiende a tener varias costumbres agresivas

Melissa se queda boquiabierta. No sabía ni la mitad de las cosas que la señorita Morrel había mencionado

—podría decir absolutamente todo lo que sus hijos hacen, dicen o como actúan en la escuela, pero eso podríamos dejarlo para otro día ¿no creen? Ahora deberíamos enfocarnos en lo importante—se voltea para coger una hojas del escritorio y entregarlas—esos son las autorizaciones para que sus hijos asistan tienen todo el tiempo que quieran para tachar el cuadro de si o del no. Es su decisión la ayuda de sus hijos esta en sus manos

No demoraron tanto, marcaron aquella que creían correcta. Solo esperaban que sus hijos no se lo tomaran de mala manera

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Estoy muy emocionada con esta historia. He estado preparándola desde hace mucho

Aún no tengo claro que parejas poner aunque creí que quizás como será una especie de gran historias compartidas pueda tener un poco de todo y luego en el desarrollo se irían quedando las historias definitivas