Cojo el cuchillo y lo miro, no puedo creerme como voy a acabar con todo, como todo va a salir a la luz, como todo va a acabar.
Paso el cuchillo suavemente por mis brazos, no es la primera vez que me veo en esta situación, pero si será la última, será la última vez que me haga daño y todo por el daño que me hacen los demás, todo por ser la nueva en la ciudad, en el instituto, por ser la rara, la diferente, la sin amigas y una marginada social.
Respiro hondo y me relajo,prometo no desmayarme por haber visto sangre como me suele pasar el resto de días, clavo el cuchillo y la sangre cede, me empiezo a marear pero antes de caerme clavo otra vez el cuchillo, y de repente me caigo.
Oigo a mis padres llegar, el sonido de la ambulancia, no puedo evitar lamentarme pero ya es tarde, por fin todo el mundo me recordará, por fin dejaré de ser la pringada que siempre está sola por los pasillos y seré la chica que se suicidó por culpa de sus compañeros.
Noto como mi madre me coge de la mano mientras llora, mientras intuyo que mi padre la coge por los hombros para darle consuelo, y si, ahí es donde dejo de notar todo para notar que mi corazón se para y deja de latir, dejando paso a que la muerte se lleve mi cuerpo y mi alma, llevándome, ojalá, a otra vida que sea mucho mejor.
ESTÁS LEYENDO
Aprendiendo a vivir en esta sociedad
Teen FictionCríticas y más críticas,amenazas,notas y cuchillos son los que aparece en mi taquilla continuamente,quizás no fue muy buena idea mudarse,quizás fue lo que provocó mi muerte.
